Capítulo XIV (Es mi turno)

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Al salir del dormitorio de los chicos y regresar a la sala común Fred, George, Padma, Parvati, Angelina, Katie, Ron y Harry estaban atónitos por  lo que acaba de suceder, mientras Ginny, Neville y Lavender festejaban para si mismos, Luna y Hermionie estuvieran entre felices y confundidas y Dean y Seamus estuvieran mirando al suelo con un ligero sonrojo. Cuando Harry miró con atención la sala común se dio cuenta que esa noche había bastante amor, ya que además de ese juego de besos vio que Cedric y Cho también estaban de románticos pero curiosamente no entre ellos, sino que Cedric coqueteaba con la chica de Ravenclaw que había ido al baile con Dean y Cho lo hacía con Michael Corner, y no sólo eran ellos sino que varios alumnos estaban claramente coqueteando con otros, era algo extraño pero seguramente era por el hecho de que la emoción del torneo hacía que todos sintieran un extraño valor para hacer lo que quisieran, entonces ¿por qué el no tenía valor?, ya estaba más que claro que a Dean no le gustaba Ginny, así que ¿por qué no mostrar como se sentía?, Harry ya estaba convencido de lo que tenía que hacer, entonces cuando los chicos que estaban con él se fueron a hacer sus cosas Harry jalo a Ginny del brazo para detenerla.

Ginny:-¿Qué pasa Harry?- dijo la pelirroja extrañada.

Harry:-Esto- respondió el chico mientras se acercó rápidamente a la pelirroja y le dio un beso en los labios provocando la sorpresa de la chica pero haciendo que esta le correspondiera en un apasionado beso que vieron Ron, Hermionie y Dean.

Ginny:-¿E-eso que fue?- dijo la chica después de aquel beso con el que sintió una calidez interna que nunca había sentido.

Harry:-Eso son mis sentimientos por ti, sentimientos que no había querido ver pero pude visualizar hace poco, sentimientos intensos y que van más allá de un beso con el que sentí que me quitaba el alma, porque aunque suene raro mis sentimientosaunqueson intensos no son pasajeros pero nunca te lo dije porque sentí que sería raro, y por eso mismo traté de fijarme en otras chicas y hablar como lo haría si estuviera enamorado de ellas pero al ver que podías dejar de pensar en mí me puse celoso y aunqueeso no está bien al menos me ayudó a ver que no importa si eres la hermanita de mi mejor amigo, no puedo esconderme bajo otras chicas-

La pelirroja tenía el rostro aún más rojo que su cabello mientras escuchaba aquellas palabras y cuando el pelinegro terminó de decir aquello pasaron dos cosas interesantes, uno: Ron se dio cuenta de porque cuando Harry hablaba de Cho sonaba más como idiota que como enamorado y dos: Ginny se abalanzó sobre Harry para darle otro enorme beso en los labios con una pasión digna de una obra de Shakespeare, un beso que a pesar de ser el segundo beso entre ambos fue aún más hermoso que el primero y que hizo sentir a ambos en las nubes de donde no querían bajar y donde no les importaba nada más que ese preciso momento, nada más era importante, no importaba que Hermionie festejaba como loca, no importaba que Ron sonriera como diciendo "no tienen remedio", no importaba que Dean estuviera sonriendo de oreja a oreja ni que Luna estuviera planeando la boda de los 2 tortolitos, donde se imaginaba a ella como la madrina de Ginny, ya que la consideraba su amiga y todo eso desde el otro lado de la sala común.

Esa noche hubo 2 besos memorables, besos muy hermosos que no podrían compararse entre ellos, ya que el de el Dean y Seamus era como el de 2 amantes que le daban un beso cálido y tierno lleno de amor joven pero genuino que decía "estaré siempre a tu lado y jamás dejaré de amarte" a quien era su alma gemela sin que ninguno lo supiera, mientras que el de Ginny y Harry era como un beso entre enamorados que se habían tenido que separar y se reencontraban mucho tiempo después mientras se decían "te extrañé mucho y no me iré nunca más mi amor" sólo con tocar los labios del otro.

Explota mi corazón (Deamus)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora