Él... él parecía un chico normal, de este con el que vas, tienes una cita, se divierten y luego pierdes la virginidad porque lo crees perfécto... ya saben, un chico caballeroso, que no tarda en enamorarte con palabras hermosas, eso parecía. Pero su...
- Bien, ustedes dos estarán en detención durante 3 horas.
- ¿Ay salón de detención?
-... N... No. ¡Pero! - sacó llaves de su bolsillo. - Como soy el director y tengo mucho trabajo que hacer, su castigo será limpiar este enorme cuadro de inutilidad. Lo van a convertir en un museo, colgarán todas y cada una de las pinturas, trapearán y sacarán el polvo. Así no tendré que preocuparme por ustedes.
- Suena a que debemos ser productivos. No me gusta.
- Suena doloroso. - añadí.
- Bueno, eso debieron pensarlo antes de hacer lo que hiciéron. - cerró la puerta. - Y no podrán salir hasta tener todo como nalgas de recién nacido.
¿Quieren saber como llegué a este lugar? ¿Realmente quieren saber qué me trajo hasta aquí? Bien... para eso hay que retroceder 1, 2... 3 horas atrás. Básicamente hasta el momento en el que Jennie y Jody dejarían de pisar la universidad.
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- Sólo, que use condón... te amo. - cerró.
- Yo... te amo más.
Eso había sido raro... ¿Qué se supone que es un BPS? ¿Era una fruta? ¿Se podía comer?
- ¡Aush! Pero que coño... ¿Esto que es?... ¡Jennie!
Miré por la ventana, Jennie ya estaba montándo las cosas en el auto de sus padres. Por lo que corrí escaleras abajo sin tener zapatos o una chaqueta para el frío. No tenía tiempo para el asensor pero de todas formas sentía que estaba tardándo demasiado por las escaleras. Al salir, el portón se encontraba evidentemente cerrado, vi unas escaleras de reparación, las tomé e intenté trepar la valla... lo que, definitivamente fue una pésima idea.
- ¡Oye!... ¡Baja ahora mismo!
- Mierda.
Miré a la carretéra, pero ya era tarde, podía ver el auto alejándose cada vez más. El vigilante amigo de Choi San me había atrapado. ¿Seonghwa era su nombre?
- Aquí Seonghwa, llamándo al director.
Joder pues sí. Me llevó nuevamente dentro del edificio, Wooyoung quien había terminado su último turno de la semana, pasó por nuestro lado atónito y curioso por lo que estaba viendo. Pocos minutos pasaron que el director se presentó en "detención"... y no estaba solo.
- Sigues robando las llaves de la azotea... y vas a llevarte la expulsión definitiva Kim Taehyung. Y no importa si tu padre viene a sobornar.
- Que bien, tú aquí. - entró. - ¿Qué hizo una chica tan linda para terminar en un lugar tan feo?
- Yo no hice nada cariño. - miré al director. - A Jennie se le quedó un collar, sólo quería devolverlo.
- No se fue para siempre, pudiste entregarlo el domingo por la tarde.
- Es importante para ella.
- ¿Qué tan importante?
- Demasiado importante.
- Si era tan importante ¿Porqué lo dejó?
-....
-....
- Exácto... Oh, y entréguen sus celulares.
- Esto es increíble.
- No utilizo mi celular los fines de semana, sólo pinto.
- Pintas y robas las llaves de tu director, pasa tiempos maravillosos Kim. Revísenlo.
- Sólo quería devolver su collar.
- Parecía que intentabas escapar, y aquí soy responsable de cada uno de ustedes. Entrégamelo.
- No me dió tiempo a tomarlo. Revíseme si quiere.
Seonghwa comenzó a tocar mi cintura y bajó hasta mis tobillos. Miró al director y se retiró. Este viejo tiene todas las pintas de ser el padre de Lisa y Jisoo. Luego... creo que ya saben lo que pasó.
- Increíble, menudo estúpido es tu suegro Kim.
- Que no es mi puto suegro.
- Es demasiado injusto.
- Si, bueno, que no me dejen estar en la azotea es injusto.
- Taehyung... robas las llaves. Tú no tienes justificación.
- Las robo porque no me dejan estar ahí... al menos a la hora que quiero estar.
- Ajusta tus horarios azotéicos.
- Esa palabra ni siquiera existe.
- ¿Y porqué es tan importante estar en la azotea?
- ¿Porqué era importante para tí entregar ese collar?
- Porque ella se siente segura con él. Su abuelo se lo dió antes de morir.
- Lo mismo conmigo.
- ¿Tu abuelo fallecido te dió la azotea?
- No Jess... me siento seguro ahí arriba.
- Oh...
Jamás esperé que una azotea fuera un lugar seguro para alguien. Menos por la altura que este tenía. Pero bueno en fin. Comenzamos a organizar los cuadros, algunas pinturas y otras cosas llenas de polvo.
- Casi está listo.
- ¿Qué? Taehyung, apenas empezamos.
- Ah... hablaba de mi parte. - se sentó. - Aquí estaremos todo el día.
- ¡Joder Jungkook! Tengo que avisar... no hay teléfono. Aquí estoy, estancáda.
- Querida, yo tampoco estoy muy a gusto, digo, de todas las personas tenían que encerrárme contigo.
- ¿Disculpa? Tú fuiste quien abrió el cajón de mierda.
- Ni siquiera recuerdo cómo te conocí.
- Oye, pues yo tampoco recuerdo, la verdad. - me senté. - Si al final tendrémos que estar aquí... acépto tu invitación.
- Siempre me salgo con la mía. - sonrió.
- Estúpido. - volteé y sonreí. - Bueno que vas ayudar ¿o no?
Escuché una pequeña risita a mis espaldas y seguí limpiando. Los cuadros que habían en esa habitación eran hermosos, no sé porqué estában perdidos en ese lugar. Merecían ser vistos por la universidad entera.
- Es increíble. - susurré.
- ¿Qué?
- Estas pinturas... ¿Porqué no están arriba?
- Ah, estos son cuadros de los alumnos antes de nosotros. Los traen aquí cuando no fueron cuadros ganadores.
-... Cuadros ¿Ganadores?
- No tuvieron tantos votos. Ya lo entenderás al terminar la universidad.
- ¿Cómo sabes de esto? Tú no haz terminado.
- Bueno... se supone que sí, el año pasado. Llevo 4 años de curso.
- Un año más de lo debido... ¿Porqué haz estado un año más?
- Historia larga.
- Tenemos todo el tiempo del mundo Kim.
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