Sweetener | Tsukishima Kei

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- ¿Qué? – Tomone preguntó confundido.

Yachi no dijo una palabra, pero estaba visiblemente frustrada por alguna razón.

- De todos modos, realmente tengo que irme ahora, Yachi. Además, fue un placer conocerte, T/N-san. Nos vemos – se despidió de ti antes de salir.

Simplemente la miró e inclinó la cabeza en señal de respeto al menos.

- ¿Comisiones de joyería? ¿Cómo personalización y todo eso? – le preguntaste a Yachi: - No es que estuviera escuchando tu conversación, quiero decir, me siento aquí – sentiste la necesidad de justificarte.

- Ah, no es nada, no te preocupes demasiado –

- Uh oh, es Deuce – comentó Yachi, ahora desviando su atención de regreso al juego.

- ¡El setter la puso! Qué momento tan increíble – exclamó el espectador. Un punto más y el otro equipo gana el segundo set.

- Uh oh – suspiro Yachi.

Era el turno del capitán del otro equipo de sacar y sabías muy bien lo preciso y poderoso que eran sus saques.

- Diablos, el tiempo – se quejó ansiosamente Yachi.

- ¡Fuera! ¡Está fuera! – Kei le gritó al líbero.

- ¡No parece ser un fuera! – Yachi exclamó.

- ¿O si es? – acierto.

- ¡Es fuera! – anunció el espectador tan pronto como se hizo la bandera, haciendo que la multitud se volviera más salvaje.

Sin embargo, mientras los dos equipos luchaban por los dos puntos, tu cabeza todavía estaba llena de pensamiento sobre Tomone.

"Entonces, ella probablemente personaliza la joyería, bueno, parece estar bien informada sobre la joyería" pensaste, sin preocuparte más por el juego.

"Y Kei podría haberse reunido con ella recientemente, y ella sabe algo sobre sus dedos"

- ¡T/N! Un punto más y las ranas de Sendai gana – te informó Yachi, su emoción había vuelto.

"Y Yachi, ella está sacando el tema del matrimonio y todo eso" pensaste y la miraste.

- Un as de servicio del capitán de las ranas de Sendai, ¡Una forma verdaderamente notable de terminar el juego! – escuchaste el anuncio y de repente perdiste el hilo de tus pensamientos.

- ¡Vamos a reunirnos! – Yachi sugirió y se levantó.

- ¿Reunirse con él? –

- Sí, vamos – te dijo y te agarró de la mano para arrastrarte lejos de tu asiento.

Bajas las escaleras con ella mientras intentaba ahuyentar tu confuso análisis.

- Muy bien, espera aquí – te instruyó Yachi – lo buscaré por ti –

- ¿Eh? –

- ¡Espera ahí! – ella se apresuró a irse y tú te quedaste ahí obedientemente.

Mientras tanto, justo después de que Kei se cambiara de ropa en el vestuario, su superior llamó su atención.

- Tsukishima-kun, si vas a comprar una bebida, ¿Puedes invitarme a mí también? Vamos – pregunto el jugador mayor.

- En realidad, estaba a punto de ir- -

- Gracias, eres muy amable – el mayor ni siquiera dejó que Kei terminara.

Kei solo suspiró mientras salía de la habitación para hacer el pequeño recado. Sin embargo, cuando abrió la puerta, una figura familiar y entrañable lo saludó.

- ¡Ah, Tsuki! – Yamaguchi habló con sorpresa y alegría escrita en todo su rostro.

- Oh – murmuró Kei.

- ¡Felicidades por tu victoria, Tsuki! – Yamaguchi exclamó cuando Kei salió del vestuario.

- ¿Estabas mirando? Y también, todavía tengo que volver a mi equipo – preguntó el rubio mientras caminaba uno al lado del otro.

- Lo vi, aunque llegué tarde. Solo pude ver el segundo set – explicó.

- ¿De verdad? –

- Sí, tenía algunas cosas que hacer. Lo siento, Tsuki –

- Está bien, de verdad –

Kei se detuvo al ver una maquina expendedora y sacó su billetera de su bolsillo para comprar una bebida. Mientras dejaba caer la moneda, los dos chicos escucharon a alguien correr hacia ellos.

- Oye, oye, tengo muy malas noticias para ti. Ahora está desconfiando mucho – Yachi corrió hacia ellos y les informó con una mirada de pánico.

- ¿Eh? – era Yamaguchi quien parecía más alarmado - ¿T/N-chan? –

- Kitagawa-san vino a ver tu juego y no sabía que T/N estaba a mi lado – explicó.

- ¿Qué paso después? – pregunto Kei mientras presionaba el botón de la máquina expendedora.

- Luego, preguntó cómo estabas y nos dijo que te dolían los dedos –

- ¿Eh? – Yamaguchi articuló, ahora debido a la confusión, - ¿Y qué? –

- Es un problema, ya sabes. Kitagawa-san es una persona completamente desconocida para ella y probablemente piensa que eres cercano a ella y eso... Kitagawa-san sabe más sobre ti – explicó Yachi.

- ¿Eh? – el más pequeño movió su cabeza en signo de confusión - ¿Qué están pasando? –

Kei gimió de frustración, "Genial, ahora mi novia probablemente piensa que estoy engañándola o algo así."

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