Hilos Del Destino

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Imagínense estar en el peor momento de su vida, para hacerlo más fácil imagínense en un lugar, y que ahi están todas sus pesadillas reunidas burlándose de ti, tu corazón se oprime y tu mente solo te da más motivos para renunciar, te odias por tus acciones pasadas, el sentimiento aumenta, sabes que no tienes la culpa, no deberías sentirse así, como si en un solo chasquido de dedos pudieras arruinar todo lo bueno y dulce que por solo unos segundos alcanzaste a tener ¿fue de verdad? ¿Enserio tuve tanta felicidad? No sabía que pensar, se sentía como un sueño que se desvanecía en la yema de mis dedos, mientras más suplicaba su regreso mas grande era el agujero en mi pecho, no solo mi nueva vida estaba arruinada por un dios, sino que también me fui obligada a dejar atrás muchas personas, tanto nuevas, como antiguas, el tiempo avanzaba al compas del reloj de mi habitación, un tictac triste y a la vez estresante, este era mi lugar, donde habitan todas mis pesadillas, estaba en casa, ninguna frase absurda me dirá que no hay nada mejor como el hogar, es ridículo, no era el mundo mágico, no era la tierra, mi hogar estaba en las personas, y un nuevo compañero se había integrado a la familia, o eso creí.

Hikari Sakamai ha sido olvidada, mi nombre ha sido olvidado, no puedo pensar en que tal vez estoy siendo muy dramática, pero es que así me sentía, como si cada hueso de mi frágil cuerpo estuviera destinado a pisar el suelo de ese mundo, a conocer esa otra dimensión, lo sabía, lo sentía, yo nací para estar con ... ¿Quién? ¿Por qué este sentimiento tan lindo no era hacia él? ¿No es suficiente amarlo por 7 años? ¿Me estoy engañando? Sueno tan esperanzada que me daba lástima, el miserable dios no mentía, el no me amaba y eso me despertó de lo que es tener un sentimiento fuerte por… ¿Quién? ¿Estoy atada al mundo o a una persona?

_estas aquí para escuchar mi predicción- cruce miradas con Palmer la diosa del tiempo, no paraba de examinarme con la mirada haciéndome colocar nerviosa.

Por alguna razón que desconozco quede inconsciente cuando Kazuto nos presento a ese misterioso dios, mis recuerdos sobre ese acontecimiento eran pocos, solo desperté en la habitación de esta diosa que tenía unos ojos muy extraños, estos eran rojos y su iris tenía una forma como de engranaje, traía puesto un suéter rojo con capucha, de esta sobresalían mechones de cabellos plateados, sus puntas apuntaban a todos lados, estaba como enmarañado, su piel era de un color similar al mío y sus manos estaban rojas en los dedos, como si se hubiera cortado. No explicó el motivo por el cual estoy en su territorio, solo me dijo que tenía una predicción de mí, me ocultaba otra cosa pero no estaba con ánimos de preguntar nada, también tenia curiosidad sobre lo que me depara el futuro.

_ ¿crees en el hilo rojo? – me pregunto sin perderme de vista, a pesar de que yo recorría con la mirada la habitación en la que estábamos.

Era muy espaciosa y estaba en perfecto orden, las paredes estaban pintadas de un color terracota haciendo un ambiente histórico, además de que tenia repisas con estatuas, objetos que probablemente son de ese mundo, un escritorio lleno de mapas, libros y aparatos tecnológicos que desconozco. Mis pies imploraban moverse y mis manos ansiaban tocar cada cosa, mi lengua parecía estar inquieta por preguntar pero la diosa me mandaba un aura de pocos amigos, como adivinando lo que quería y de una vez diciendo un rotundo no, yo solo le dedicaba una sonrisa de labio cerrado, incomoda por todo esto.

_si…es una historia muy bonita – respondí finalmente su pregunta, por lo general hablaría mas pero, esta diosa me hacia tener una conducta nada propia de mi ¿acaso me tendrá hechizada? ¡Y si es una bruja! No estaría tan lejos de la realidad, su cabello estaba tan maltratado, solo le faltaban las verrugas.

_no soy una bruja.

Mis ojos se abrieron de golpe ante sus palabras, juraría que no lo dije en voz alta.

Luces Del Segundo MundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora