Capítulo 2

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Después de un poco más de ocho horas de vuelo el humor de Santana empeoró y se acordó de todo el árbol genealógico de Quinn.
Hace seis años que Santana no volvía a los Estados Unidos, ni siquiera vino a la boda de las faberry por miedo de verla a ella, pero si viene a su divorcio, algo muy divertido la verdad.
El avión aterrizó y fue en busca de su valija para luego encontrar a la persona que la había ido a buscar, y ahí estaba la rubia, un poco más alta y con el cabello un poco más corto.

—No cambiaste nada eh— ambas rieron— dame un abrazo latina.

—Hola Q, más que un abrazo te voy a asesinar— se quejó— ¿Quien en su sano juicio llama a altas horas de la madrugada para pedirle a alguien que se tome un avión a otro continente?

—Yo también te extrañe— la abrazó por los hombros mientras caminaban.

—Por querer divorciarte estás muy feliz...

—El divorcio me está comiendo por dentro, pero trato de fingir por los melli— se frenó y Santana la miró confundida— no puede ser que no conozcas a mis hijos.

—Bueno, cuando me fui Rachel estaba embarazada ¿Tienen cinco años, no?— la rubia asintió— bueno, y después vi fotos— volvieron a caminar— además mis hermanos me contaban cosas, espero que hayas hecho lo mismo con ellos y sepan quien es la tía Tana.

—Amiga mía, mi casa está llena de fotos nuestras, claramente saben quien es la tía Tana— ambas rieron— ¿Donde te vas a quedar?

—En un hotel, mañana quizás compre un departamento— se subieron al auto de Quinn— No quiero molestar a mis hermanos.

—¿Hotel? claro que no, te venís a casa— Santana alzó una ceja— Rachel está en Lima con los melli visitando a sus padres, vuelve el fin de semana, además hace días que no convivimos— la latina asintió y se quedaron en silencio por un rato— Ella lo vendió.

—¿De que hablas?— preguntó confundida.

—Brittany y el departamento, cuando te fuiste lo vendió.

—Yo hubiera hecho lo mismo— suspiró nostálgica— Quizás lo compre, siempre me gustó, era acogedor y elegante.

—¿En serio?— Quinn rió— ¿Vas a comprar el departamento donde vivías con tu ex?

—Sip, así recuerdo porqué me fui en primer lugar y no me agarran ganas de quedarme— ambas rieron.

—Por fin admitis que te fuiste por ella— Quinn sonrió.

—Nunca lo negué tampoco, pero no iba a quedarme cuando la persona que amaba me dejó y salió con otra persona a los días.

—Gracias por esto Tana— le apoyó una mano en el hombro mientras estacionaba— gracias por volver.

—De nada Fabray.

—Así que... cuando dijiste que tenías familia— entraron a la casa—¿Me imagino que era por Alfonso y Maribel, no?

—Es una historia para otro día— rió y le dio golpecitos en la espalda— ¿Sabes si alguno de mis hermanos está trabajando ahora?

—Santana es de madrugada acá ¿Vas a ir al hospital a ver a tus hermanos?

—No los veo desde el año pasado Q, además tengo el sueño cambiado, la madrugada de acá es la mañana en Italia.

—Anda y yo acomodo las cosas en tu habitación. Llévate mi auto, pero mañana te alquilas uno López— le revoleo las llaves.

—Gracias, por la mañana hablamos de tu tema eh.

—Estoy contando las horas.

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DESAFIO- brittanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora