Era viernes, y el colegio estaba lleno de movimiento. Los estudiantes se apresuraban a recoger sus cosas, ansiosos por salir y aprovechar el fin de semana. Entre risas y despedidas, los pasillos comenzaban a vaciarse, quedando solo el eco de los pasos y el leve murmullo de las últimas conversaciones.
Mientras la multitud se dirigía hacia la salida, una persona notó algo extraño en el suelo, un pequeño pedazo de papel doblado que destacaba en medio del ajetreo. Al agacharse para recogerlo, vio que el mensaje era breve, pero tenía un tono que desprendía urgencia.
Inmediatamente, la persona recorrió los pasillos con la mirada, buscando a Earth o a Santa, suponiendo que uno de ellos debía estar cerca. Sin embargo, ambos parecían haber desaparecido. Preguntó a algunos estudiantes, pero nadie recordaba haberlos visto salir juntos. Intrigado y con un ligero presentimiento, la persona continuó su búsqueda un poco más, pero la escuela estaba cada vez más desierta.
La última campanada del colegio resonó, marcando el inicio del fin de semana, y el silencio se apoderó de los pasillos. Sosteniendo la nota en su mano, aquella persona sintió una inquietud inexplicable. Algo había en esas palabras que hacía que no pudiera simplemente dejarlas pasar.
***
Santa y Earth estaban esperando junto a la entrada del colegio cuando el auto de los padres de Santa llegó, estacionándose frente a ellos. Al verlos bajar, Santa sonrió y le dio un ligero apretón en el brazo a Earth, como para transmitirle calma. Aunque habían hablado del viaje, Earth aún se sentía un poco nervioso por pasar un fin de semana entero junto a su familia. Sin embargo, la calidez con la que los padres de Santa los recibieron hizo que esa tensión se disolviera un poco.
La madre de Santa, con una sonrisa amable, abrió los brazos y le dio un abrazo a Earth, comentando cuánto se alegraba de que se uniera al viaje. El padre de Santa asintió con una sonrisa cómplice, mientras guardaba las mochilas en el maletero. Era claro que los dos habían planeado cada detalle de ese viaje, asegurándose de que todo estuviera listo para que pudieran disfrutar.
Una vez en el auto, Santa se sentó junto a Earth en el asiento trasero, y con el paisaje cambiando lentamente a su alrededor, ambos sintieron cómo las preocupaciones comenzaban a desvanecerse. Santa le dio un suave codazo a Earth y le murmuró, "Prepárate para ver la playa más hermosa de todas." Earth sonrió, agradecido por el esfuerzo de Santa para hacerlo sentir cómodo. Mientras el auto avanzaba, sabía que este viaje no solo sería una oportunidad de relajarse, sino también un momento crucial para compartir su verdad y dejar atrás los temores que lo atormentaban.
Mientras el auto avanzaba por la carretera y el paisaje se volvía más verde y abierto, el padre de Santa miró a Earth por el espejo retrovisor y, con una sonrisa, rompió el silencio.
"Entonces, Earth, dime... ¿cómo va este muchacho en clases?", preguntó con tono amistoso, mientras Santa soltaba una leve risa nerviosa a su lado.
Earth sonrió, miró de reojo a Santa y respondió: "Bueno, Santa es un buen estudiante... aunque a veces le gusta tomar pequeños atajos," dijo con una sonrisa traviesa, a lo que Santa lo miró, fingiendo ofenderse.
El padre de Santa soltó una carcajada. "Ah, ya me lo imaginaba. ¡Desde pequeño le ha gustado encontrar caminos fáciles para todo! Siempre decía que era para 'optimizar' su tiempo."
Santa se rió y se encogió de hombros. "A ver, ¿no se supone que es eso lo que hacen los inteligentes?"
"Claro, claro," respondió Earth, haciéndole una mirada cómplice. "Aunque a veces me da trabajo convencerlo de que esos atajos no siempre funcionan en los exámenes."
El padre de Santa asintió, visiblemente contento de ver la buena relación entre ellos. "Bueno, no te queda más que seguir ayudándolo a mantenerse en el camino correcto, Earth. Y tú, hijo, escucha bien a tu profesor, ¿eh?"
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Mi mayor secreto es Menor - SantaEarth
FanficUna historia llena de emociones, entre el amor, y el odio, entre secuestros y posibles violaciones? podrán superarlo juntos?