Fanfic NS: Renacer [+18] [Terminado]

Capitulo 12.- La deuda, Parte 1

Créditos al autor: Arminius

Hatake Kakashi observaba la aldea desde su oficina en lo más alto de la torre Hokage. Durante mucho tiempo había dudado sobre la conveniencia de ser el líder de la villa. No se creía adecuado para el puesto, sencillamente mirando a los grandes hombres y mujer que tuvieron el sombrero anteriormente, el Rokudaime se veía a si mismo ridículo.


Sobre su escritorio, un estuche de madera trabajada con preciosa laboriosidad. Kakashi lo conservaba ahí desde días atrás. Normalmente el Hokage, no solía hablar con nadie los asuntos que rondaban en su mente o corazón. Era el tipo de persona que jamás podía dejar de culparse por los errores que cometía. Pero tampoco lo demostraría o siquiera lo hablaría con alguien.


Usualmente Shizune se acercaba a él. Hablaban bastante, pero principalmente de trabajo. Sin embargo, había un tema en el cual coincidían casi siempre. Naruto Uzumaki Namikase era la preocupación de ambos ninja. Para la mujer, Naruto representaba la única familia que tenía. Le recordaba todo lo que había perdido. Su tío Dan, el resto de sus parientes, y también a Tsunade-sama. Para Kakashi era diferente. Comprendía a Naruto porque lo conocía. Porque había conocido a su padre, porque tuvo una relación similar con Obito Uchiha, a lo que Naruto tenía con Sasuke.

El estuche seguía allí, sobre el escritorio. Inmóvil pero llamándolo. Como si gritara "ábreme".

¿Había hecho lo indicado? ¿Podía confiar en que Naruto tomaría la decisión correcta? ¿Tendría la opción de tomarla en cualquier caso? Porque Sasuke no era precisamente alguien fácil de manejar. Era más bien inestable, un completo y decidido luchador dispuesto a lo peor. ¿Arreglarían el asunto sin asesinarse? ¿Podrían terminar de una vez con esas absurdas peleas?

Kakashi se sentó en su sillón, bebió su té de hierbas y por fin se animó a abrir el estuche. El tant¬o era un tipo de arma específico. Dentro del estuche, el arma por la cual su padre había sido nombrado "colmillo blanco". El arma estaba rota, en varios fragmentos y el hombre no podía dejar de recordar el día que fue destruida. Fue una jornada muy triste para Kakashi esa vez. Ese día perdió a Rin en una misión. Su mejor amiga, la única compañera de equipo que le quedaba. Esa noche realmente quedo solo. Por Konoha lo perdió todo, y debió de volver al inicio.

Primero su padre por honor, luego Obito por la amistad, ya que el sujeto enmascarado no era su amigo de antaño. Minato-sensei también se fue, pero por amor a su esposa. Y finalmente Rin Nohara, su mejor amiga, tal vez la única mujer por la que sintió atracción romántica. Ella murió por salvar a la aldea. Ese mismo día Kakashi rompió el arma de su padre. El Tantō que era un tipo de espada corta plana y de doble filo, cuya punta era rectangular. El tipo de hoja utilizada solo para cortar, no perforar.


Hatake Sakumo usaba ese Tantō y con él, fue uno de los Shinobi más temidos de los 5 países. Se decía que cuando el aplicaba chakra, la hoja brillaba intensamente en luz blanca. Por esa razón, el sobrenombre del "colmillo blanco" que lo hizo famoso. Sin embargo, pocos sabían que el arma rota, tenía una espada gemela. El Hokage tomó el filo quebrado, su padre le dijo una vez que toda arma tenía su espíritu. El Tantō entre sus dos armas, era un excelente conductor de chakra. Ahora roto en manos de Kakashi, ya nunca volvería a luchar. Pero existía su gemela, una espada tipo ninjato. Corta como su hermana, pero de punta afilada como ninguna.

Y con un secreto dormido en su interior.


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Ella era feliz. No podía precisar su alegría en cantidades descriptivas, pero cada momento de sus días eran tan solo para sonreír. Sakura Haruno había pasado momentos muy difíciles. Desde años anteriores que había concentrado toda su energía en salvar a Naruto. Y muchas cosas habían salido bien. ¡Incluso más que bien!, porque los problemas que se habían previsto tanto con el consejo de clanes como con Sasuke, parecían haberse evaporado. Amaba y era amada, una sencillez a la que pocas personas tenían acceso en la vida. Muchas noches se encontró abrazando su almohada en la oscuridad de su habitación. Y solo podía pensar en el calor de Naruto. En la dureza de su cuerpo, en la sensación de seguridad que obtenía. Era increíble, porque cuando más vulnerable debía sentirse como Kunoichi, desnuda y casi inconsciente por el placer, más completa y libre terminaba.


Incluso la relación con sus padres comenzó a mejorar. Antes reñía con su madre por cualquier asunto. Ahora eran más unidas que nunca. Antes casi no hablaba con su padre, ya que Kizashi siempre quería que su hija se casara cuanto antes y formara una familia. Actualmente su padre ya no insistía en ese asunto. Tal vez el comenzaba a sentir que su "bebe" había crecido, y por fin sería una mujer para otro hombre. En resumen, ambos progenitores estaban convencidos que su Sakura era más feliz que nunca junto a Naruto Namikase. Ya no intervendrían más en ese asunto.


Ese día en particular, Sakura había pensado que sería buena idea planear una cena íntima para dos. Le había dado un espacio más que suficiente a Naruto para que pudiera entrenar y prepararse para volver a ser ninja activo. Sakura se sentía feliz particularmente, porque notaba que el espíritu de lucha en su pareja había regresado. Era ese ánimo, esa forma fantástica de luchar lo que ella había admirado siempre. Fue al mercado luego del trabajo, era ya de tarde y las compras para practicar una nueva receta de su madre estaban listas. El plan era simple, cocinar en lo de sus padres y llevar todo listo para cenar junto a Naruto.

Era una buena tarde, hasta que alguien se apareció de improviso y lo cambió todo.


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Terminó su entrenamiento en los bosques luego de casi 4 horas de forzarse mucho. Su hermana menor la había acompañado durante los primeros ensayos de madrugada. Pero Hinata no solo practicaba en las mañanas, sino que en las tardes propiciaba una nada saludable rutina de gran desgaste. Había hablado durante muchas horas con su sensei Kurenai, había entrenado con Shino y también Kiba. Finalmente ayudó en las prácticas de su hermana menor Hanabi para relajarse un poco. Su vida, se había reducido a ese pequeño sub-mundo que solo consistía en entrenar. Recordaba a su primo Neji, y ahora por fin lo entendía. Hinata podía comprender la pasión de su primo en aumentar su nivel. Cuando no eres dueño de tu destino, y solo haciéndote fuerte lograras tener una oportunidad de escapar.

Los últimos días, Hinata también pensaba mucho en Sasuke.

El joven Uchiha era el rebelde perpetuo. Siempre en contra del sistema, siempre tomando el control y yendo al frente aunque eso no sea políticamente correcto. Inadaptado, tosco, incorrecto, silencioso. Tratando de hacerse dueño de su destino contra viento y marea. Como integrante del clan Uchiha, Sasuke estaba condenado a ser ninja, por su hermano estuvo condenado a ser vengador. Como fuera todos intentaron y en algún nivel aun intentaban dictar sus acciones. Pero Sasuke no cedía en su búsqueda de libertad, o al menos luchaba lo más duro que podía por no ceder. Como fuera, era de admirar esa determinación. Justo el tipo de actitud que Hinata nunca había tenido en su vida, pero que necesitaba con urgencia.


Durante la última hora de entrenamiento que se había tomado, Hinata pudo verla con claridad. Se fue acercando sigilosamente y escondía su chakra con una serie de ingeniosas tretas. Hinata sin embargo pudo captarla. No solo tenía al Byakugan como forma de rastrear. Como fuera esa Kunoichi que se acercaba a ella a través de los árboles, no parecía tener intensiones agresivas. Tal vez tuviera orden de espiarla por parte de los Hyuuga. Tal vez era integrante del ANBU tratando de averiguar quién estaba entrenando en el campo más alejado de la villa. Como fuera a Hinata no le interesaba. Simplemente iba a simular que no la sentía y esperaría a ver sus acciones. Pero si acaso esa espía tenia malas intenciones, bueno....Hinata Hyuuga no estaba de buen ánimo para perdonar tal atropello.


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La sala de interrogatorios 31 tenía tan solo 2 ocupantes. La división de Ibiki Morino encargada siempre de obtener información de los prisioneros, había dejado lugar al único hombre que estaba en cuarto con el reciente capturado. Como antiguo integrante de los ANBU de "Raíz", la fuerza secreta de espías y asesinos más efectiva del mundo. Sai no tenía ninguna duda de hasta donde llegaría con tal de hacer hablar a ese Chunnin compañero de Katsuhiko Homura, principal sospechoso del atentado contra Naruto Uzumaki-Namikase. Sai tenía la autorización del Hokage para usar el máximo nivel de hostilidad si acaso fuera necesario. Sin embargo, dependiendo del prisionero en cuestión. Cierto tipo de violencia no funcionaba tan bien como otra.

Había estado haciéndole preguntas de rutina para confundirlo. Sai tenía el apoyo de Ibiki que escuchaba y observaba todo desde una pared falsa. Con un comunicador en su oído, Sai tendría detalles precisos del capitán más efectivo en interrogación y tortura.

-¿Conoces a Anko Mitarashi? –Dijo Sai sonriendo falsamente- es la capitana de tortura más despiadada que Konoha tiene.

El prisionero sintió el mensaje como un golpe. Hasta el momento se lo veía seguro, como si jamás fuera a decir nada sobre el plan que tenían para Naruto. Pero el solo nombrar a la estudiante de Orochimaru como presentandola, que la sola idea de que viniera inspiraba temor.

-Pude saber que tuvo la tarea de hacer hablar a los 25 ninjas que pertenecían a Raíz. Luego que Danzou-sama falleciera. Créeme cuando te digo que jamás vi que alguien pudiera romper la resistencia de esos ANBU con tanto.... "arte" digamos. –finalizó el pálido Shinobi, haciendo que el prisionero le ganara en palidez.

-no tengo nada para decir....-se defendió el sujeto apresado- mis compañeros y yo solo nos reunimos para entrenar y cenar juntos. So.....somos compañeros de la academia.

-¿entonces no sabes nada del ataque que Naruto Uzumaki recibió en plena villa?

-No conozco personalmente al jinchuriki. –Dijo el ninja prisionero de manera neutral- pero dudo mucho que alguien pudiera atacarlo y sobrevivir, si es tan fuerte como todos dicen.


Sai observó algunos documentos propios sobre la mesa. Sería difícil hacerlo hablar y confesar todo. Mientras no diera ninguna pista, usar a Anko era mala idea. ¿Qué ocurría si el Shinobi resistía lo suficiente para parecer inocente? Sería un problema para Sai y también para Kakashi.

-El día 13 del mes pasado...-continuó el pelinegro- tú estuviste siguiendo todos los movimientos de Naruto. ¿Acaso lo negaras?

-solo seguía órdenes.

-¿ordenes de quién?

El ninja sonrió levemente, por supuesto que no diría quien daba las órdenes. Sino tendrían excusa para detenerlo también a Katsuhiko. Y todo el plan se arruinaría.

-no creo que sea importante quien me dio la orden. –Dijo el Shinobi tratando de confundir- lo cierto es que no hice nada ilegal. Mi misión era seguir al jinchuriki y asegurarme que su control del Kyuubi sea lo suficientemente confiable como para no lamentar otro ataque de la bestia a Konoha.

-Que considerado... –Apuntó Sai- supongo entonces que tienes un equipo completo siguiendo los pasos de Naruto. Por qué dudo que usaras las 24 horas de tus días, para vigilarlo.

Ahí lo había atrapado. Ahora tenía que darle nombres de otros ninja. Aunque no podía ser acusado de nada, era indudable que no debía ocultar la identidad de quienes nada había hecho supuestamente. ¿Qué iba a decirle? Negar los nombres era prácticamente gritar que ocultaban algo. Tampoco era lógico que dijera que el solo vigilaba los movimientos de Naruto.

-¿Y bien? –Consultó Sai ante el silencio del acusado- tus compañeros de misión no tienen nada que temer. Siempre y cuando puedan explicar sus acciones. Y sobre todo....

-¿Sobre todo qué?

-Ustedes no nos interesan....-Señaló Sai con astucia- queremos que la persona que estuvo vigilando a Naruto la noche del ataque que recibió....identifique a los agresores. Dispones de 5 minutos....-afirmó yendo a la puerta de salida para dejarlo solo. Si cuando regrese no tienes nombres para buscar e interrogar....bueno....utilizare los servicios de Anko-sempai. Y lo lamentaras, estoy seguro.


Sai salió del cuarto y Morino lo esperaba en el pasillo. El moreno le informó que conocía perfectamente las identidades de todos los compañeros de Katsuhiko. Incluso que los había vigilado durante meses y todos parecían estar implicados en la noche del ataque. Sin dudas lo intentarían de nuevo, en algún momento harían su jugada y Sai quería estar ahí para evitarlo. Por supuesto, no contaban con que Katsuhiko y sus compañeros previeran ser atrapados.

El prisionero en el cuarto, simplemente colocó en el papel blanco sobre la mesa, los nombres de 5 ninjas que no estaban en Konoha. El solo había sido un señuelo, solo hacerles perder tiempo a los espías amigos del monstruo. Katsuhiko y su equipo iban camino hacia el lugar donde la pelea entre el jinchuriki y el Uchiha se estaba realizando. Ellos habían vigilado cada paso de ambos contendientes y hasta provocaron a Sasuke en un bar haciéndole notar que Naruto le había robado la mujer. Todo estaba preparado, todo absolutamente y la división de interrogatorios estaba demasiado atrás en la jugada.


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La madrugada no clareaba, y los golpes aun no perdían intensidad. Luego de un furioso intercambio en Tayjutsu, Sasuke quiso pasar a los ninjutsu pero Naruto no le permitía alejarse lo suficiente. El Uzumaki había mejorado mucho en el manejo del kunai y shuriken. Sasuke gracias a su sharingan pudo evitar ser lastimado gravemente por los ataques sorpresa que organizaba su rival. El estilo de Naruto se conservaba por momentos, pero en otros era un tanto "diferente".


-Es como si....-pensaba Sasuke cuando se separaron algunos metros y respiraban pesado- es como si luchara con otro guerrero.


Naruto no cedía un centímetro. Era una actitud de su antiguo yo, pero su forma de pelear, las técnicas que elegía y sobre todo el silencio que reinaba desde que empezó a luchar, era de un sujeto muy diferente. Definitivo que no era el combate que el Uchiha esperaba.

-¡¿Qué pasa contigo Dobe?! –Gritó enojado Sasuke haciendo sellos, y tomando con su mano izquierda la muñeca derecha, se dispuso a reunir chakra- ¡deja de jugar y ataca con tus mejores técnicas! –la energía en su mano derecha se hizo visible en un chirriante azul- CHIDORI......


Envistió furioso de manera frontal, pero Naruto en lugar de preparar el Rasengan como se pudiera prever, extrajo un grupo de kunai y corriendo de frente a la llegada de Sasuke, comenzó a lanzarlos cargados de Futon. El moreno los evitó en su mayoría, por la previsión que le aportaban sus ojos y cada vez se acercaba más con la mano derecha destrozando el suelo por la fuerza del rayo. Preparado para dar un golpe mortal, porque Naruto no parecía crear un Rasengan para chocar e igualarlo.

A pocos metros de impactar brutalmente, Naruto dejó de arrojar armas que no daban en el blanco o eran desviadas, para sacar un arma más grande. Sasuke no pudo ver qué tipo de herramienta era, simplemente ambos chocaron y la fuerza del Chidori se detuvo en el centro de una esfera de luz que la energía había creado. La mano derecha de Naruto estaba extendida como un puño impactando de su lado, mientras que Sasuke del lado opuesto hacia lo posible por quebrar la paridad:

-NARUTOOOO!!!

-SASUKEEE!!!!


La explosión los separó muy fuerte. Trataron de aferrar los pies al terreno y formaron un surco por su esfuerzo, conservando ambos la vertical. La mano de Sasuke estaba levemente lastimada. El moreno no apartaba la vista de su enemigo, tratando de ver mejor el arma que había usado para bloquear el Chidori. Naruto en tanto estaba de costado, ocultando con su cuerpo el brazo derecho.

-¿Qué ha pasado? –Pensaba Sasuke confundido- sentí que él podía penetrar mi ataque. Como si pudiera cortar el Chidori en dos. ¿Qué tipo de técnica ha usado?


Naruto esperaba inmóvil en el centro del campo. En cuanto Sasuke dejaba de atacar, el parecía quedarse esperando algo. Solo en el intercambio de golpes cuerpo a cuerpo lo tuvo muy activo, pero en cuanto Sasuke comenzó a realizar consumo masivo de chakra, Naruto dejó de igualarse a él. El moreno aprovechó la distancia para usar sus jutsu de fuego. Haciendo sellos atacó con varias técnicas y esperó que los clones de Naruto aparecieran. Sin embargo, el Uzumaki solo usaba una gran velocidad y evitaba los ataques, volviendo siempre al centro del campo. Sasuke no esperaba una pelea de este tipo. Naruto siempre había sido impulsivo y agresivo. Imperativo, jamás quieto y siempre tomando la iniciativa. Pero este Naruto parecía estar amoldándose a algo, esperando su oportunidad, bloqueando la pelea, trabándola, obstaculizándola. Como fuera la cuestión, de los dos luchadores, era quien parecía no querer pelear.

-Me tienes harto....-declaró furioso Sasuke desenvainando su katana Chokuto- me darás una pelea en serio....-el filo del arma de cubrió de Rayton- o te destrozaré en el proceso.


Sasuke utilizó un sunshin con gran rapidez e intentó partir a su rival en dos apareciendo por detrás. Naruto se redujo agachándose y girando su cuerpo barrió con su pierna derecha para desestabilizar a Sasuke. El moreno inclinó su cuerpo hacia un lado y usó el impulso de sus pies para saltar dando un giro completo por sobre la barrida. Al mismo tiempo de su salto de lado, cabeza abajo volvió a intentar con su katana un golpe, pero Naruto lo frenó con su mano derecha al desnudo. Fue demasiado rápido, nadie que no fuera Sasuke lo hubiera visto, nadie que no tuviera el sharingan.


-Desgraciado....-gruñó Sasuke ante la sonrisa de Naruto en cuanto cayo de pie, algunos metros más allá- tienes un ninjato escondido en tu manga derecha.

-Esos ojos son un fastidio teme...-respondió el rubio divertido y colocando su brazo derecho por delante se pudo ver al fin un filo pegado al antebrazo, ya que Naruto tomaba la empuñadura al revés- supongo que será una batalla de espadas a partir de ahora.

Y se lanzó sobre Sasuke rápidamente haciendo que las armas chocaran violentas. El ninjato de Naruto era diferente a los que Sasuke había visto. Cuando esa arma no se partió al medio por solo chocar con Chokuto, Sasuke definitivamente supo que era especial. Peor aún, el filo de Naruto tenía un extraño brillo verde y resistía perfectamente el Rayton del arma que Sasuke portaba. Naruto lo usaba para cortar y Sasuke en la defensiva esperaba una apertura. Chocaron varias veces complementando las armas con Tayjutsu. El moreno usó su mano izquierda para crear una espada de chakra y contraatacó como si portara dos armas. Naruto retrocedió defendiéndose y fue herido en varias zonas, no sin administrarle a su rival una potente patada al vientre.

El golpe los alejó, Naruto tenía un corte en el brazo y dos en el vientre. Sasuke solo un golpe.

-es un error pelear contra mí en arte de espadas, Dobe...-sonrió con soberbia el moreno- aunque debo decir que me sorprende tu ninjato. Cualquier arma común ya estaría partida al chocar con Chokuto. Aun así, dudo que me puedas herir con ella.

-No mires abajo teme...-respondió el rubio sonriendo y cuando Sasuke lo hizo, su muslo derecho tenía una profunda cortada- te dije que no miraras...


¿Lo había herido? ¿Cuándo Naruto lo había herido? ¿Qué tipo de arma podía resistir a Chokuto y encima soportar el elemento rayo concentrado? Naruto parecía haber estado entrenando otras técnicas y Sasuke por fin se dio cuenta que no sería una pelea esperada. No habría lluvia de clones, ni mil variedades de Rasengan. Pero sobre todo, el dato más importante y que a otrora entregaría la victoria al Uchiha. Las heridas de Naruto no sanaba, los cortes seguían abiertos pese a no ser muy profundos.

El Kyuubi no lo estaba curando.


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Por los bosques del país de fuego. En medio de la noche habían estado corriendo a todo lo que las piernas daban. Tres figuras iban con mucha agilidad entre árboles y rocas. Saltando y acelerando hasta donde el chakra les alcanzaba. Además venían discutiendo, demasiado nerviosas y a contramano de lo esperado formando equipo. A veces la necesidad o la urgencia formaban extrañas alianzas.

-¡espérame Haruno! –Gritaba una pelirroja que se quedaba atrás invariablemente- ¡ni siquiera sabes adónde vas! ¡MAS TE VALE QUE NO TE ACERQUES A MI SASUKE-KUN!

-Sakura-san....-apuntó Hinata saltando a la par de la pelirosa que estaba muy irritada- ellos van a estar bien. Solo querían....

-¡TE VOY A DESPEDAZAR SASUKE! –chillaba furiosa Sakura que aumentaba la velocidad a pesar de su límite- ¡SI LLEGAS A LASTIMAR A NARUTO, TE CONVERTIRÉ A PAPILLA!

-ah ah ah....-jadeaba Karin varios metros atrás- espérenme....

-Sakura-san debe tranquilizarse...-le decía Hinata aunque por dentro también estaba preocupada por ambos Shinobi- ellos solo estarán....etto.....practicando.

-¡NARUTO MAS TE VALE ESTAR VIVO......POR QUE TE MATARÉ SI TE PASA ALGO! –Gritaba en una mesclando angustia con rabia la pelirosa, y cada vez le sacaban más distancia a Karin- ¿COMO TE ATREVISTE A ENGAÑARME?


¿Qué hago si muere? Esa era la pregunta que Sakura tenía atravesada en el medio del corazón. Todas las amenazas y la rabia no servían para explicar el inmenso dolor que sentiría si algo le sucedía a su Naruto. Poco le importaba las demás, si algo le ocurría a Naruto todo terminaría en más que una muerte. Sakura estaba segura de algo, desde que había aceptado que amaba a Naruto Uzumaki, también había aceptado que no podía vivir sin él. Que había hecho mil locuras y seguiría haciéndolas. Había aceptado que era a todo o nada. Que con Naruto el amor era así, al máximo y hasta el final. Si algo le ocurría, Sakura sabía que moriría con él.

-es un inconsciente...-señaló Hinata que no podía ocultar su preocupación- Naruto-kun aún no ha recuperado el nivel como para combatir con Sasuke. Tenemos que detenerlos antes que hagan una tontería.

-¡QUE ME ESPEREN LES HE DICHO! –gritaba a lo lejos Karin y las hizo parar cuando justo llegaron a un claro en el medio del bosque.


Sakura estaba demasiado angustiada para pensar en el cansancio. Ahora por fin comprendía porque Sasuke no había presentado condiciones en la finalización del contrato. Era porque ni los padres de Sakura, ni ella misma tenían lo que Sasuke deseaba. Una pelea, una pelea de nivel elite. Naruto era el único que podía darle eso, pero no se había recuperado y Sasuke no lo sabía. Naruto tardaría demasiado en volver a su nivel, y sin el Kyuubi presuntamente muerto, no habría paridad.

-les advierto que Sasuke-kun es mío....-resoplaba Karin levemente arrodillada y tratando de respirar mejor- y solo les advertí que ellos se fueron lejos por que no quiero que Naruto lo lastime.

-¿Dónde demonios están? –Gruño Sakura muy nerviosa- ¿Por qué se fueron de la aldea?

-por que....porque nosotras hubiéramos intervenido. –Definió Hinata- los hubiera visto combatir en cualquier lugar de la aldea. Intentaron que nadie se interpusiera.

-están peleando....-dijo Karin de pronto luego de juntar sus manos en posición tigre y apuntar hacia el norte- sus chakra aumentan cada vez más. Aún están lejos, pero con su nivel de energía es fácil....

-¿hacia dónde? –consultaron las otra dos féminas.

-Valle del fin, tal vez más lejos.


Las tres Kunoichi comenzaron a correr, Hinata estaba algo asombrada de la "fijación" que esa chica Karin tenia por Sasuke. No solo estaba sorprendida, sino triste. ¿Acaso era así como ella misma había "pretendido" a Naruto? ¿Se veía desesperada? ¿Se veía patética? Le tomó algunos minutos reflexionar con cuidado y darse cuenta la verdad. Eran etapas que todas las personas debían superar. Tal vez Karin solo le faltaba admitir la verdad. No podía ver que Sasuke no le correspondía. Eso le causaba dolor, era indudable.

Hinata también observó a Sakura. La recordaba de la niñez, donde también tuvo una especie de obsesión por Sasuke. Ahora estaba un nivel de confianza y seguridad tan grande con respecto a Naruto, que la sola idea de perder a su hombre le producía rabia. De pronto, pensando sobre sus dos acompañantes en esa carrera nocturna, Hinata volvió a razonar sobre lo último que Karin dijo cuándo rastreaba el chakra. Y preguntar fue inevitable:

-¿dijiste que sus chakra aumentaron? –Consultó la morena- ¿Qué tanto?

-Demasiado....y no es todo el problema....-anuncio Karin- Naruto y Sasuke-kun no son los únicos que dejaron rastros de chakra por estos bosques.


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Algunas horas después, La batalla estaba en su desenlace. Naruto había intentado luchar de manera igualada para no consumir chakra en cantidades brutales. Pero Sasuke era superior en todo aspecto. Velocidad, pese a que el modo Sennin de Naruto igualó por momentos el combate. Fuerza, porque los golpes de Sasuke eran más contundentes y su resistencia física no estaba mellada como la del Uzumaki. Chakra, cuando el rubio siempre había sido superior en el pasado. Ahora Sasuke no solo tenía la habilidad y el sharingan, también en el nivel de poder era más.


Ambos tenían heridas, pero mientras que las de Sasuke eran superficiales. Chokuto había causado estragos en el cuerpo de Naruto que apenas se podía mantener de pie. Había dado su mejor esfuerzo, pero la derrota estaba escrita desde antes de luchar. Pero no se quejaba Naruto, las veces que había caído por el terreno se había puesto de pie para combatir. Nunca retrocediendo, nunca renunciando. Luego de un desigual combate de Kinjutsu, Naruto utilizó algunos Rasengan para preocupar la defensa de Sasuke. Pero el moreno se enfundó en el espíritu guerrero llamado Sunsanoo y todo fue a su favor desde entonces. La espada espiritual hizo estragos, el sharingan del moreno lo veía todo y Naruto perdió el modo Sennin luego de casi 4 horas de brutal batalla.

Cayó al suelo como tantas veces, pero esa vez no se puso de pie. Sasuke deshizo al espíritu y también desactivo el Magenkyo Sharingan, quedándose con el Doujutsu básico. Caminó lentamente hacia su rival caído, y por alguna razón no se sentía satisfecho. La mayor parte del valle había sido destruido. Naruto había invocado a los sapos horas antes para mantener más tiempo el modo ermitaño, pero ni así pudo contra el poder del Sharingan eterno. Todo había terminado.

-Sin el chakra del Kyuubi o tu caudal de poder propio....no eres rival para mí.


Naruto se sentó con dificultad, su boca estaba chorreando en rojo y la sonrisa aún se dibujaba. Sasuke no lo entendía, estaba a punto de morir y aun así sonreía. Ni siquiera había sido un combate parejo, nunca, en ningún momento Naruto tuvo chance de ganar. ¿Por qué demonios había aceptado la pelea?

-No debiste tomar a Sakura...-dijo el moreno con su katana ensangrentada, empuñada para cortar- sabias que yo terminaría por matarte.

-No tuve opción...-respondió el rubio negando con la cabeza- por ella....solamente por ella soy capaz de todo.

-no fuiste capaz de ganarme.

-no vine aquí para vencerte teme....


De un impulso, Naruto se puso de pie rápidamente y lanzó una combinación de golpes con sus puños. Sasuke eludió algunos e intentó apuñalarlo con su Chokuto, pero el Uzumaki la apartó con una patada lateral e intentó mantener la corta distancia para seguir peleando. Sasuke inclinó su cuerpo agachándose de lado y enterró su arma en el terreno para usarla de apoyo y soltar una furiosa patada en el costado de Naruto, a la altura de las costillas. El rubio recibió el golpe apretando los dientes y sangrando por las heridas. Para cuando el moreno recuperó la vertical, Naruto lo tomó con ambas manos del cuello furiosamente.

Sasuke usó el mango de su katana al desenterrarla del suelo, para incrustarlo en la zona del hígado de su rival, haciendo que perdiera sus fuerzas. Luego agachó su cabeza evitando que Naruto asegurara la presa en su cuello y le dio un terrible gancho al mentón con su mano derecha. Para esto, Sasuke había soltado su arma y en el movimiento ascendente que hizo a continuación, ejecutado el golpe de puño por dentro de los brazos de rival.

Naruto no respondió, sus brazos quedaron sobre los hombros de Sasuke y se miraron cara a cara sabiendo que era el final.

-Terminaste Dobe....-dijo el moreno mirándolo a los ojos y sabiendo que está casi inconsciente. –es el final.


Naruto apenas podía respirar, la patada y el golpe al hígado por ambos lados lo había dejado inmóvil. Estaba parado solo porque sus piernas estaban rectas y sus brazos yacían sin fuerzas sobre los hombros del moreno. Los ojos azules del rubio estaban vidriosos, su vida se estaba escapando sin remedio. Sasuke era demasiado fuerte, demasiado hábil y efectivo como para luchar contra él, con tan poco tiempo de entrenamiento. Los meses anteriores apenas habían alcanzado para que Naruto se pusiera en forma. Apenas para ser considerado un Chunnin. Sin su chakra, sin más tiempo para aprender las técnicas de sus padres. Había dado su mejor esfuerzo, pero contra Sasuke eso era casi nada.

-luchaste con valentía....-susurró Sasuke- pero ambos sabíamos que esto iba a suceder. No podías ganar Naruto. Nunca debiste arrebatarme a Sakura.

-no vine....aquí.....-gimió débilmente mientras la sangre brotaba de sus labios- para ganar....

-¿Cómo pensabas amarla y tener una familia sino puedes vencer?

-por que.....aunque no pueda vencerte.....-respondió el rubio a su oído- aun puedo....aun puedo...


Sasuke tuvo un mal presentimiento. Solo en una ocasión sintió lo mismo. La anterior pelea en el valle del fin. Cuando eran niños, cuando Naruto cayó derrotado y Sasuke pudo escapar. Cuando el poder del Kyuubi no fue suficiente para vencer al sello de maldición. Sasuke tuvo la opción de matarlo esa vez. Antes de irse lo tuvo a su merced. Pero no pudo matarlo, no quiso matarlo porque el fondo de su corazón como guerrero tenía una duda. Tenía un presentimiento que se acumulaba hasta reventar en su interior. Naruto Uzumaki había perdido, porque no había luchado con todo su poder. Había perdido por que quiso rescatarlo, quiso regresarlo a la villa sin matarlo.

Naruto había perdido por que no fue con todo en ese golpe final.


Ahora ese presentimiento volvía a atrapar a Sasuke Uchiha. Naruto no había luchado con todo, no tenía lo máximo que podía tener en nivel. Sin el Kyuubi, sin su chakra y aun así no había luchado al máximo. ¿Cómo podía ser? ¿Cómo podía matarlo cuando era el único que podía darle esa pelea? ¿Cuándo era el único que podía aplacar esa necesidad y emoción de la batalla?

Naruto usó sus últimas fuerzas para acumular chakra en su puño e intentar golpear. Pero apartarse de Sasuke para tomar la distancia correcta, hizo al moreno reaccionar y prever ese ataque por su sharingan. Simplemente Sasuke se apartó otro paso de Naruto y aplicó una furiosa patada al pecho del rubio lanzándolo a 20 metros. Sobre el terreno, Naruto Uzumaki yacía para no levantarse más. Sasuke había ganado.

-esta pelea era de verdad Naruto....-anunció el Uchiha juntando su Chokuto y dispuesto a terminarlo- a muerte fue lo que acordamos....

-Lo siento...teme...-balbuceó el rubio poniéndose boca arriba en el suelo- no pude pelear mejor. No puedo evitar amar a Sakura-chan. Perdóname amigo...aunque no pueda vencerte....aun puedo....


Sasuke avanzó dos pasos hacia Naruto dispuesto a usar su katana por última vez. Si este era el nivel que Naruto podía alcanzar después de recuperarse. Era mejor que muriera. Ya no era su rival, tal vez desde el comienzo debió morir. Sería una carga para Sakura, sería una carga para todos. Sasuke avanzó y vio como Naruto estiró su brazo por la tierra tomando el ninjato que era del colmillo blanco. Ya no podía moverse Naruto, ¿para qué insistía?


-aun puedo....-volvió a insistir el rubio- ....matarte.


Sasuke se detuvo, el cuerpo de Naruto había desaparecido en un instante. Sintió que alguien lo empujaba desde atrás, algo leve en un comienzo que luego se volvió extraño. Bajó su vista sorprendido y un filo sobresalía de su propio pecho. Una punta de metal brillante en verde, saliendo de una grieta roja. Sasuke comenzó a sentir que su boca se llenaba de sangre. Su propia sangre, su propio orgullo. La respiración pesada, el último esfuerzo de Naruto que jadeaba en su cuello. El rubio estaba parado detrás. Había enterrado el ninjato especial por la espalda de Sasuke. Lado a lado lo había atravesado sin miramientos.

-impo.....imposible.... –pensaba Sasuke que perdió las fuerzas y soltó su katana- no pude...verlo.

-no me moví teme....tal vez no tenía tiempo para ponerme a tu nivel. Pero Sakura-chan me ayudó a entrenar el jutsu más efectivo de mi padre. Nunca podría haberlo hecho sin ella, y es por eso, que la amo.

-"Hiraishin no jutsu" –pensó Sasuke sonriendo levemente y sentía que los ojos le pesaban- el idiota aprendió una de las técnicas más difíciles del mundo. ¿Cómo pudo poner un sello cerca de mí?
-en tu cuello teme....-susurro Naruto adivinando la silenciosa pregunta- donde tus ojos no pueden ver.

Naruto no podía ganar. Lo supo desde siempre. Pero también conocía a su rival y sabía que se confiaría sobre el final. Sabía que Sasuke bajaría su guardia, aunque fuera por un instante cuando se sintiera vencedor. Así que espero ese momento, acumuló chakra natural solo para soportar el castigo físico. Sakura le había enseñado la mejor forma de administrarlo y aunque no era tan bueno como ella, supo aprovechar esas enseñanzas. Además, Hiraishin no jutsu era una forma de acumular y soltar chakra a la perfección. Sakura aportó la teoría, Naruto desarrolló la práctica, y los ancianos sapos a través de la meditación le dieron la paz que necesitaba para encontrar la forma de usar la técnica en el momento preciso.

Naruto soltó el mango de su ninjato que estaba clavado atravesando a Sasuke. Le dijo algo más al oído, y lo vio caer de rodillas frente a él. Cuando el moreno se desplomó al suelo en silencio, sucedió lo que nadie había pensado que sucedería. Naruto Uzumaki parecía haber asesinado a su amigo. Por el suelo, de costado yacía Sasuke de extinto clan Uchiha. El cuerpo del Uzumaki no daba más, todo su cuerpo le dolía de una manera aterradora. Parado junto al caído rival, observó la claridad del amanecer que parecía mucho más brillante que cualquier otro.

Tan cerca de ganarse una nueva vida, y a la vez tan lejos.



Ellos aparecieron de los arboles más lejanos minutos después. Eran 4, enmascarados y con capas grises o verdes oscuro. Esperaron el momento preciso, se ocultaron fuera del rango de detección potable y esperaron a que los chakra se fueran debilitando hasta decaer. Llegaron sobre el final del combate, aprovechando que por casi toda una noche Naruto y Sasuke había peleado. El Uzumaki no tenía el poder para detenerlos, ellos habían planeado con inteligencia su movida.

-¡vaya vaya! –Gritó el líder del grupo con satisfacción- ¡pero si tenemos al monstruo herido!

-y al bastardo Uchiha muerto, -declaró otro- una lástima, también habíamos preparado como bloquear y extraer sus ojos.

-El jinchuriki dio una buena batalla ciertamente –señaló un tercero- pero Katsuhiko tenía razón.


Naruto caminó hacia un lado con dificultad. Quería alejarse de Sasuke por si el enemigo decidía iniciar su ataque de manera general. "Katsuhiko", Naruto no recordaba de dónde pero lo había escuchado antes. Luego las máscaras cayeron al suelo, pudo ver los rostros de aquellos que lo atacaron hace tiempo, y el de su líder. Aquel Chunnin con quien tuvo su pelea en el fallido examen.

-la paliza que te dimos sin problemas hace tiempo, -dijo el castaño perteneciente al clan Homura- me dio la pauta de la valiosa oportunidad para exterminar a la amenaza del jinchuriki. –los 4 se iban acercando a la zona donde Naruto estaba, caminando en forma de semi circulo comenzaban a rodearlo- pero luego supe por mi abuelo, que el Hokage nos arrebató dinero y poder, para dártelo a ti. Creo que eso termino por decidirme acabarte.


Cuando uno de los Shinobi desplegó un largo pergamino, Naruto supo de qué se trataba todo. Intentarían liberar al Kyuubi, para luego sellarlo en otro lugar o sujeto. Tal vez en el líder que tanto hablaba mientras desenvainaba su espada.

-reconozco esos movimientos...-pensó Naruto- ellos no vienen a jugar. Lo siento Sakura-chan, no pude volver a casa.


Intentó defenderse, en serio hizo el intento. Pero ellos estaban en perfectas condiciones y la pelea había desgastado completamente a Naruto Uzumaki. Podrían haber acabado rápido, pero teniéndolo tan fácil decidieron torturarlo un poco. Todos tenían viejos rencores contra el Kyuubi, todos tenían excusas para odiar a la bestia que tantas personas había asesinado la noche que Naruto vino al mundo. Durante casi una hora se dedicaron a golpearlo a placer. Lo rodearon quitándole las armas y entre patadas y golpes de puño lo sometieron. El ojo derecho de Naruto estaba totalmente cerrado por una inflamación. Su cuerpo no contaba con ningún sector sano. En un círculo de hombres, Naruto fue el centro recibiendo todo tipo de golpes.

Finalmente, lo lanzaron por los suelos cayendo entre escombros de tierra y muy cercano al cuerpo de Sasuke Uchiha. Ya era de día, el sol asomaba a lo lejos por los bosques, y Naruto aun magullado y derrotado, uso sus últimas fuerzas para ponerse de pie. La katana de Sasuke estaba cerca, la tomó del suelo y parándose con las rodillas temblorosas, intentó mostrarse aun dispuesto a resistir.

Las risas de los torturadores le humillaban. ¡Si tan solo hubieran llegado un rato antes! El modo Sennin de Naruto o el Sharingan de Sasuke los hubieran puesto de sobreaviso. Seguramente hubieran peleado juntos y hasta hecho las paces sin llegar tan al extremo de la destrucción. Uno de los hombres desplegó el pergamino, y los demás lo imitaron aplicándole chakra. El papiro brilló en color azul y unas cadenas de metal surgieron como invocación. Esas cadenas estaban brillando por el chakra, destinadas a sellar el cuerpo de Naruto y así comenzar la extracción. El rubio sabía que debía evitar esas cadenas que volaban hacia él, pero su cuerpo no respondía. La sangre chorreaba de su frente y le cubrió los ojos brevemente. Naruto se limpió con su brazo para ver como la muerte venia en camino, pero a pesar del ruido de cadenas atravesando la carne, no sintió en su cuerpo el dolor esperado. Solo pudo ver el mango de su ninjato, y la espalda de Sasuke Uchiha en donde estaba enterrado.


Parado entre las cadenas de chakra y el mismo, Naruto pudo ver a Sasuke Uchiha. Había recibido de frente el golpe en lugar del rubio, con sus brazos cruzados en el pecho, y el sharingan activado en su fase básica. Sasuke Uchiha lo había salvado de la muerte. Una vez más, como aquella ocasión en el puente del país de la Ola. Una vez más Sasuke Uchiha, volvía a interponerse para salvar a Naruto, aun sin saber por qué.


CONTINUARA....