Jujutsu Kaisen - OneShots

"The Game"- Sukuna Ryomen

Título: "The Game" -el juego-. Sukuna Ryomen 🛐✨

Universo Alterno

Advertencia: Contenido +18. Leer con precaución.
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____'s pov

-¿Has visto al estudiante nuevo?- preguntó Rin mientras se lamía la miga de las papitas que le habían quedado en los dedos. 
-No te lamas los dedos, después tocarás todo con eso. Ve a lavarte.-Dije con una mueca de asco. 
-Después voy, pesada- puso los ojos en blanco-. ¿Lo has visto o no?

Me puse a pensar en su pregunta. Realmente no recordaba haber visto a nadie nuevo.
-La universidad es grande, Rin. No recuerdo si vi a alguien nuevo o no. 
-¿Itadori no te ha hablado de él?

Recordé las palabras de mi mejor amigo y asentí suave. 
-Cierto. ¿Su primo, verdad? 

Mi amiga asintió enérgica. 

-Pues no, no lo he visto.
-Pues tienes que verlo, está buenísimo, para comérselo. 

Me reí y rodeé los ojos. 
-No creo que sea para tanto.
-Oh, créeme, lo es. No te daré detalles, lo juzgarás por ti misma en el juego de hoy. 

Cerré el libro de biología de sopetón. 
-¡ES VERDAD! ¡Hoy hay juego!

-¡¿Lo habías olvidado?!
Una voz masculina e indignada se manifestó en mis espaldas y maldije mentalmente. 

-Yuuji, mejor amigo al cual amo con mi alma entera...-Fuí girando en mi lugar hasta tenerlo en frente. 
-No funcionará.-Sentenció con cara de dolido. 
-Lo siento, sabes que estoy hasta el cuello de exámenes. 

Se sentó en una de las sillas sobrantes mientras me robaba una papita. 
-¿Eso significa que no vendrás? 
-Claro que iré, sé que este juego es importante, no me lo perdería por nada. 

Entrecerró sus ojos hacia mí y después sonrió. 
-Está bien, te perdono. 

Volvió a su típica expresión de niño pequeño mientras hablaba efusivo. Al poco tiempo llegó Megumi, nos saludó y se sentó a "platicar" -emitir unos cuantos monosílabos y una sonrisa, eso ya era mucho para ser él-.

Seguimos hablando tranquilamente cuando notamos que el resto de las pláticas se habían detenido y los murmullos se hacían presentes. Ni me giré, probablemente sería un chico/chica guapa que había ingresado. 

Ví a Rin con la boca abierta y a Yuuji sonreír negando con la cabeza. El pelinegro solo rodeó los ojos. 

Me levanté de mi asiento para tirar el envoltorio de mi comida a la basura, de paso miraría qué tanto alboroto. 

Me giré y antes de poder procesar nada, mi cuerpo estaba chocando contra uno muchísimo más grande y musculoso; hubiese caído de trasero al suelo si el extraño no me hubiese sujetado de la cintura. 
El tacto de su gran mano me estremeció. 

Levanté mis ojos de su pecho y lo recorrí hasta llegar hasta su rostro.
Asique era por él... no  me extrañaba la actitud de los demás. Estaba de escándalo. 

Unos extraños ojos que parecían rojos me analizaban en silencio. 

Su rostro perfilado estaba decorado con tatuajes en líneas que parecían formar símbolos que desconocía. Nunca había visto a alguien con  el rostro tatuado, eso era jugársela en grande.

Tenía unos labios medianos y rellenos, de un color carmesí natural  muy suave, y una nariz recta y fina. Era increíblemente precioso. 

Muy parecido a Itadori-kun, pero los tatuajes le daban ese toque.