Tengo una melliza??

Despierta Porfavor!

Draco Malfoy

Desperté en la enfermería, todo se repetía una y otra vez en mi mente. Como peleamos, Izzy volando y callendo inconsciente. La preocupación, la tristeza. La pelea mano a mano con Potter, el hechizo, el dolor, la sangre. Snape susurrando algo a mi lado, pequeñas imágenes del camino a la enfermería. Miré a un costado Izzy estaba acostada en otra camilla. No se movía, nisiquiera parecía que respirara. Quería levantarme e ir hasta ella, tomar su mano, acariciar su rostro. Pero no podía moverme, el dolor era inmenso. La enfermera llegó y me revisó, le pregunté por Isabelle pero no sabía mucho más que yo. Estaba esperando a que despierte. Snape entró de repente.

- Draco... Que bueno que estés mejor.

- Quien dijo que estoy mejor? No puedo ni moverme.

- Tienes suerte de estar vivo... Cuéntame lo que pasó- pidió sentandose a mi lado. Le conté todo- en un par de días podrás salir de la enfermería...

- Que va a pasar con Izzy?

- No se sabe, puede que no tenga nada y en un par de horas despierte. Puede que tenga algunas secuelas como pérdida de memoria. Puede que demore en despertar unas horas, dias, semanas o meses... Si es que despierta.

- Como que 'si es que despierta'? Va a despertar cierto? Estará bien?- unas lágrimas salieron de mis ojos.

- No quiero mentirte o asustarte o crear falsas expectativas... Realmente no sabemos nada. Ahora descansa, más tarde volveré.- dijo antes de irse.

'Si es que despierta' no podía dejar de pensar en eso. El recuerdo se apoderaba de mi. Cuando calló al suelo, me acerqué a ella. La movía pero no reaccionaba... Comencé a llorar, no podía parar. Quería abrazarla, besarla, tenerla devuelta. Necesitaba que despertara. Pasaron cuatro días y me dejaron salir. Isabelle todavía no despertaba, iba a visitarla siempre que me permitía el horario de visita. Estaba preocupado y triste... Ginny se encontraba conmigo y me cosalaba, ella también estaba preocupada pero lo llevaba mejor. No tenía ganas de comer, no podía dormir. Snape me pidió que siguiera con la misión. No podía concentrarme. Después de ir a la sala de menesteres decidí ir a ver a Isabelle, no era hora de visita pero necesitaba ir. Por suerte no me encontré a nadie en el camino. Entré, me senté a su lado y tomé su mano, lloraba en silencio. Era casi inevitable. De repente escuché que se abrió la puerta, no me moví del lugar, creí que podría ser la enfermera o Snape. Escuchaba a alguien pero no veía a nadie. Si era Potter con su estúpida capa lo mataría.

- Cállate Ron, nos escucharán- oí lejos en un susurro. Parecía que Potter y Weasley venían a verla. Llegaron cerca de la camilla y se sacaron la capa.

- Que se supone que hacen acá? Te recuerdo que es tu culpa que esté así- dije limpiandome unas lágrimas.

- Todo fue un accidente Malfoy, además es mi hermana pudo venir a verla- contestó Ron.

- En horario de visita, ahora no.

- Y porque estás acá si no es el horario?- preguntó Potter. Lo mataría.

- Porque soy su prometido. Es mejor que se vayan.

- No nos puedes decir que hacer Malfoy, nos quedaremos aquí- dijo Ron y ambos se sentaron del otro lado de la camilla.
Quería asesinarlo pero no podía. Estúpido Potter. Los tres la mirabamos con la esperanza de que despertara. Ron colocó su mano bajo la nariz de Isabelle.

- Que haces?- pregunté extrañado.

- Verificando que respire...- rodé los ojos.
Las horas pasaron eran las dos de la mañana, parecía que ninguno se iba a mover de su lugar. No me iría hasta que ellos se fueran, no los dejaría solos con Isabelle, podrían levantar su manga y ver la marca.
Acaricié su rostro suavemente y besé su frente.

- Crees que despertará con el beso de su príncipe de Slytherin?- preguntó Ginny.

- De donde saliste?

- Llegué hace un rato pero estaban tan callados y en paz que no quise interrumpir...

- Y?

- Que?- pregunté

- Pobaste despertarla con un beso?

- No es un cuento de hadas Ginny...

- Claro que no... Pero el amor es una magia muy poderosa- la miré extrañado- más si son almas gemelas...

- Como sabes que son almas gemelas?- preguntó Harry.

- Solo supongo... Adelante, prueba. No tienes nada que perder...

Me acerqué y le dí un tierno beso en sus labios. Me alejé despacio, nada pasó.

- Bueno, por lo menos lo intentaste- Ginny trató de consolarme- que pasa Draco? Porque tienes esa cara?

- Está apretando mi mano...- todos la miramos atentos a ver si se movía. Abrió los ojos despacio. Nadie decía nada, todos quedamos en shock.

- Donde estoy? Que pasó?- trató de incorporarse pero no pudo.

- Tranquila, no te muevas... Llamen a la enfermera- les pedí, Ron fue y la trajo enseguida.

- Dime niña, recuerdas como te llamas?- preguntó la medimaga.

- Isabelle Weasley

- Recuerdas porque estás en la enfermería?

- No

- Sabés quién es el?- preguntó señalando a Potter. Ella lo miraba y balbuceaba cosas.

- Eeh... Yo... Creo que... Aam...

- Está bien, no te preocupes. Y él?- señaló a Ron. Isabelle guardó silencio- a ella?- otra vez silencio- conoces a ese chico?- me señaló a mí. Isabelle me miró pero no decía nada.- como te sientes?- preguntó al ver que no contestaba.

- Rara, me duele mucho la cabeza y todo el cuerpo, pero en especial la cabeza. Mis recuerdos están un poco confusos... Muchas imágenes pasan por mi cabeza...

- Quieres decirme que son esas imágenes?

- Son confusas y borrosas...

- Bien, que te parece si descansas un rato? Eso ayudará a arreglar tus pensamientos...- Isabelle asintió- bien, ustedes acompañenme.- los cuatro la seguimos.

- Que le pasa?- preguntó Ginny. Yo no podía hablar, tenía un nudo en la garganta.

- Puede que presente pérdida de memoria... Tal vez solo está confundida y necesita dormir un poco y cuando se despierte ya esté mejor y recuerde todo. Mañana a primera hora le haré un chequeo y sabré con exactitud que es lo que tiene. Ahora vayan a dormir niños.

- Yo me quedaré a su lado, no pienso irme- logré decir.

- Está bien, usted puede quedarse pero no hable con ella hasta el chequeo, el resto a la cama de inmediato- todos se fueron. Yo me volví a sentar a su lado. Todavía estaba despierta. Me miró por unos minutos antes de quedarse dormida y unos minutos después me dormí yo.