Tengo una melliza??

Regalo

Me desperté con una carta de Emma, mi amiga de EE.UU. encontró un regalo que podría gustarle a Draco de acuerdo a la descripción que le dí de el en una carta. El paquete llegaría a Hogwarts al mediodía. Ya faltaba poco para las vacaciones de Navidad. Debía decirles a mis hermanos que me quedaría. Al principio intentaron convencerme de ir a casa pero desistieron. Les expliqué que nunca la festejaba y lo entendieron, Fred le mandó una carta a Molly y dijo que podía quedarme. Se sorprendieron mucho al ver como Malfoy ahora no era grosero con ellos, por lo menos cuando yo estaba presente. Aunque estaban muy celosos, no entendía porque. Los gemelos no se despegaban de mí por mucho tiempo y durante las clases Ron y Harry tomaban su papel.

- Rubio!- lo llamé, iba caminando solo con una carta en la mano.

- Izzy, que pasó?

- Mañana empiezan las vacaciones y quería darte algo antes de que te vayas...- sonrió y levantó la carta.

- No me iré, mis padres se van a Francia por temas familiares y me pidieron que me quede aquí. Supongo que pasaré la Navidad solo...

- Bueno, solo lo que se dice solo no estarás.

- Porque?

- Yo no festejo la Navidad, para mí es otro día como cualquier otro por eso decidí quedarme aquí. Así que no estarás solo, yo estaré contigo- me dió un fuerte abrazo y me giró en el aire.

- Espera, pero no tengo un regalo para tí, pensaba compar algo en las vacaciones...

- No acostumbro a recibir regalos en Navidad, ya te dije, yo no la festejo. Así que no importa. Compré un regalo para tí porque me regalaste esto- levanté mi mano mostrando el anillo- pero no quiero que me regales nada para navidad.

(･ω･)つ⊂(･ω･)

Me despedí de mis hermanos, el castillo estaba casi vacío, incluso algunos profesores se habían ido con sus familias. Los chicos de Slytherin se habían ido casi todos, solo queda Draco y dos o tres niños chiquitos.

- Ya te despediste de tus hermanos?- me preguntó Draco al verme en la sala común.

- Sip... Quieres que te dé tu regalo ahora o en Navidad?- me senté a su lado.

- Mmm... Ahora- me reí.

- Bien espérame aquí, iré a buscarlo- me levanté, fui hasta mi habitación y volví enseguida- bueno, espero que te guste...- se lo pasé y lo abrió- me dijiste que cuando eras chiquito tu mamá te decía Dragón, también me pareció buena idea ya que tu me regalaste un coyote, ambos tenemos animalitos, no?

- Me encanta, es perfecto- se lo puso y me abrazó. Nos quedamos conversando al lado de la chimenea.
Después de la cena fuimos directo a su habitación y nos acostamos a leer.

｡◕‿◕｡

Subíamos a la torre de astronomía, Draco me dijo que tenía algo planeado. Cuando llegamos había una especie de picnic y una tienda.

- Se que dijiste que no querías regalo de Navidad pero esto no cuenta como regalo, es un detalle. Veremos el atardecer, después cenaremos, miraremos la luna y las estrellas. Pasaremos la noche aquí en la tienda y nos levantaremos temprano para ver el amanecer... Te gusta la idea?

- Me encanta- nos sentamos y vimos el atardecer. Luego comimos y nos acostamos a ver las estrellas.

- Es el segundo día de vacaciones y ya son las mejores- reí ante su comentario.

- Que te parece si vamos a Hogsmeade el fin de semana y nos abastecemos de chocolates y dulces para todas las vacaciones?- sugerí. 

- Claro, todavía no entiendo como comes tanto y nunca subís de peso.

- No me has visto correr por el bosque- reí.

- Siempre olvido ese pequeño detalle de que sos animaga... Sabes hacer un patronus?

- No, el profesor Lupin me ayudará con eso después de vacaciones.

- Y porque te enseñará solo a tí?

- Es porque soy la mejor- dije en broma y ambos reimos. Hablamos, comimos, dormimos, nos despertamos y vimos el amanecer.

- Tienes razón, si son diferentes- me abrazó, me besó en la frente y apreciamos la vista un poco más.

(◕ᴗ◕✿)

Pasamos toda la semana juntos, charlabamos, reíamos. Nos quedamos dormidos en la sala común sin querer, al otro día nos dolía el cuerpo entero. Le conté como fue el proceso para convertirme en animaga. Me contó sobre su famila. Nos abrazamos. Se alegró cuando le mostré el dibujo de la cena con su nombre y fecha a un lado. Me pidió que lo dibujara. Le conté mi pasado, sin olvidar nada, el me contó el suyo con lujo de detalle. Lloramos ante el recuerdo de nuestro pasado, nos consolamos. Volvimos a reir, corrimos por todo el castillo. Nos restaron 10 puntos a cada uno por entrar a la sección prohibida de la biblioteca. Dormimos juntos. Jugamos. Fuimos al bosque y me convertí en coyote, corrimos un rato. Conocimos al otro más de lo que nos conocíamos a nosotros mismos. Caminamos rumbo a Hogsmeade, Draco tomó mi mano y escuché su corazón latir mas fuerte y rápido. Compramos dulces y chocolates. Fuimos por una cerveza de mantequilla y regresamos al castillo tomados de la mano.

- Porque al principio solo ibas a la sc de Ravenclaw?- me preguntó.

- Porque es más linda.

- Claro que no! Slytherin es mejor.

- Alguna vez has ido a la sala común de Ravenclaw?- negó con la cabeza, me levanté y le extendí mi mano- bueno, vamos entonces- tomó mi mano y caminamos hacia la sc.

- Que tiene de especial?- preguntó mientras caminábamos.

- Ya lo vas a ver...- resolví el acertijo y entramos. Miró a su alrededor, no había nadie, ya era de noche.

- Ves, es más iluminada, mas cálida. Tiene una biblioteca grande. Y mi parte favorita es esta, ven- caminamos hacia la mitad de la sala y me acosté en el suelo, el hizo lo mismo- el techo está encantado como en el Gran Comedor, se pueden ver las estrellas.

- Es hermoso- miramos un rato las estrellas, sentía su mirada en mi y me giré para verlo.

- No te gusta ver las estrellas?- pregunté extrañada- dijiste que era hermoso pero no las miras...

- Es una vista hermosa pero no tanto como tú- nos miramos por un rato en silencio, nuestros rostros comenzaron a acercarse.
Acarició mi mejilla con su mano, nustros labios se encontraron en un beso lento y cariñoso. Nuestros corazones se aceleraron. El tiempo se detuvo y nuestras manos se entrelazaron. Nos separamos por falta de aire, estaba oscuro pero la luna iluminaba la sala. Ambos sonreíamos, sus mejillas se pintaron con un color rosa y sus labios estaban rojos y un poco hinchados. Se veía tan tierno.

- Gracias Izzy...

- Porque?

- Gracias por acercarte a mi y ofrecerme ese trato aquella noche, gracias por calmar mis ataques, por estar para mí, por quedarte a mi lado. Gracias por confiar en mí y dejarme confiar en vos. Gracias por los abrazos, por las caricias, por el regalo. Gracias por consolarme y no juzgarme. Gracias por las mejores vacaciones de la vida. Gracias por ser mi amiga... Gracias por ese beso...

- Te quiero mucho mi rubio- sonrió

- Te quiero mucho Izzy- sonreí- tienes una sonrisa hermosa.