Reencarnando en un Chimchar (Rescribiendo 2.0)

Cap15: Formas de Pelear. (Rescrita)

                                                       --Narrador--

Los dos Pokémon iban llegando a la casa de Selene, los nervios de Raúl se fueron calmado, después de que una vez más, Selene haya leído su mente sin permiso. A punto de llegar al final del camino los dos no hablaban.

 Raúl: Selene, ¿Qué te parece si olvidamos todo ese asunto y disfrutamos lo que falte de día? (Cuestiono inseguro, deteniendo su avance, mirando a Selene también detener su recorrido, tras escuchar la petición del Simio.)

La Gardevoir de colores singulares dejó de caminar y volteo seriamente el rostro para verle.

Selene: Fue el morbo que nos dio, a partir de ahora habrá respeto. Me siento una tonta ahora mismo. (Expreso con vergüenza, procediendo en caminar, mientras ponía su gran mano en su cabeza de estar decepcionada.)

El simio que iba detrás de ella, se sintió igual que ella. Decidió ahora tomar un descanso y despejarse la mente en el resto de días que le quedan como si fuesen unas vacaciones. Llegaron a la casa, el Simio corrió a toda velocidad para entrar a la casa, ir en busca de la radio y salir por la ventana con estilo, lo hizo tan rápido que Selene apenas había caminado unos cuantos pasos. Al ver al Simio con su radio, se molesto.

Selene: ¿¡Que haces con mi radio, que te dije antes!? (Exclamo muy asombrada, elevando los brazos, viendo como el Simio tenía la radio de Selene en sus manos.)

La cara del Mono de Fuego cambio al escuchar el tono de voz de Selene, aunque ya quedó demostrado que las chicas se ponen tensas si le tocan las cosas sin permiso.

Raúl: Selene, por favor, solo la voy a usar para entretenerme mientras entreno. (Suplico el Simio, intentando calmar esta situación.)

Selene: Aún no se si fiarme de ti en dejarte libre por mi casa. (Mencionaba ella, con un ligero estrés en su voz.)

La Gardevoir Azul se cruzó de brazos, mientras sostenía su disfraz entre sus antebrazos, giro la cabeza en otra dirección para señalar su decepción. Raúl confundido,

Raúl: Me estas diciendo que no soy de fiar, cuando hoy mismo me has estado besando sin preguntar. Ahora estoy haciendo lo mismo, así estaremos a mano. (Argumento el Infernape dejando la emisora en el suelo, mientras sonreía cómicamente al ver la cara de Selene.)

Selene se sonrojo un poco y los nervios en vez de desvanecerse, incrementaron aún más.

Selene: ¿¡No habíamos dejado ese tema en el olvido!? ¿Además que tiene que ver un juego con la confianza? (Pregunto furiosa, con la voz muy alta, demostrando su enfado.)

Raúl: Bueno, aclarar el tema será complicado. Cuidare la radio, te lo prometo. (Le indico el Simio, señalando la casa de Selene con la cabeza, con intención de que lo dejase entrenar.)

No hubo respuesta y Selene simplemente siguió caminando para entrar a casa.

Raúl: [De verdad, que carácter tiene.] (Pensó Raúl, mientras cerraba brevemente los ojos por la paciencia.)

Selene: ¡¡Te he oído imbécil!! (Grito al escuchar a Raúl decirle que tiene un problema.)

El Mono de Fuego en vez de enfadarse porque leyeran su mente, rio bastante por el buen grito que pegó, estando Selene dentro de la casa, la frecuencia fue suficiente para que el Simio lo escuchase perfectamente. Continuo riendo, paró y se preparó para iniciar su entrenamiento. El Primate ejercito su cuerpo cuando vio la radio de reojo, se acercó y la observo mejor, agacho las rodillas y estiro la mano izquierda para agarrarla, continuo mirando, logró ver un botón de apagar y encender, en la parte superior de la radio, cerca de la antena. Lo apretó y se empezó a escuchar una serie de sonidos. El primate vio una rueda que te permite girarla, entendió que era para buscar un canal de radio, el Mono dirigió la mano a la rueda y la giro un poco, para su suerte, una música adecuada sonó. Tenía un ritmo marchoso y de rock, pensó Raúl por un momento en algunas bandas de rock.