Reencarnando en un Chimchar (Rescribiendo 2.0)

Cap22: Un largo viaje hasta Huwede. PT1. (Rescrita)

                                        <<Al siguiente día>>

                                               --Narrador--

Un inmenso Pokémon se levantaría muy somnoliento del suelo, se trata del fuerte Hydreigon que comenzaría su mañana. Se elevaría un poco del suelo, pero escucho unos estruendos oírse en el refugio, así que se desplazo para comprobar que pasa. Cuando se acercó, visualizo a Thelma dando un golpe contundente al rostro de Héctor, confundiendo a Melitus, continuo su paso hasta llegar a la escena. Al aterrizar a un lado del campo de batalla, llamó la atención de ambos peleadores.

Thelma: Buenas líder, si que no eres tan mañanero como yo pensaba. (Saludo la Coneja, un poco sudada de pelear con su compañero.)

Brevemente el Dragón los miro y se dio cuenta de la presencia de Raúl a pocos metros, lejos de donde están, permanecía sentado cerca de los bancos con las piernas cruzadas, mientras mantenía su mano en forma de puño en una mejilla, en señal de aburrimiento cuando los ve pelear. Verlo con esa expresión, se sintió curioso, acercándose al Primate Pokémon en cuestión de segundos. La cara de Thelma cambio bastante por como Melitus la ignoro, pero no duró mucho su enojo cuando repentinamente le propinaron un fuerte golpe en toda la cara, frustrándola.

Héctor: No te concentres en los demás, solo céntrate en nuestra batalla. (Aconsejo de forma burlesca el Lobo Pokémon, con aire de sabiduría.)

La Conejita Pokémon frunció el ceño de tal manera que parecía que iba a matar a alguien. 

Thelma: ¡Idiota, no me enfades! (Exigió molesta de atreverse su compañero a decir tales cosas.)

Cinderace se impulsaría hacia Héctor, y comenzaría a darles múltiples golpes. Mientras con Melitus y Raúl, estos miraban la pelea que se daba entre Héctor y Thelma en primera fila. 

Melitus: Te veo con mala cara, ¿Sucedió algo anoche? (Pregunto curioso de ver los ánimos mañaneros que posee Raúl.)

Infernape aun observaba fijamente la pelea que llevaban esos dos, mostrando aún su mala cara. 

Raúl: Estoy aburrido, quiero partir ahora mismo. (Aclaró el Simio con la pregunta errónea que mencionó el Hydreigon sobre su negatividad.)

Oír esas palabras, asombraron gratamente a Melitus, recordó que Thelma no poseía muchas ganas de irse, en cambio con Raúl decía todo lo contrario. El Dragón de Tres Cabezas volteo a ver la pelea que llevaba a cabo Héctor y Thelma, sin embargo al poco tiempo, volvió a dirigir su vista a Raúl.

Melitus: ¿Sabes porque están peleando ese par? ¿Es otro conflicto de los vuestros? (Formuló seriamente el Dragón, conteniendo su molestia.)

El Mono no apartaría en ningún momento la vista de la escena del campo de batalla, aunque le hayan preguntado. 

Raúl: Según esos dos, les pareció una genial idea pelearse aquí una última vez. Ven nuestro hogar de una forma sentimental. (Comento de forma chulesca en su tono de voz.)

La cara de Melitus cambio notoriamente por la respuesta, y más, cuando volvió a mirar a esos dos pelearse. 

Melitus: Raúl, no es mala idea entrenar antes de viajar, al menos pudiste pulir un poco más tus habilidades con tal de tener una oportunidad contras los rivales que se te presenten en tu camino. (Argumento el Dragón de Tres Cabezas, indignado de ver que Raúl no aprovechó el poco tiempo que tenía en hacer algo.)