Capítulo 1: Cuando te conocí.

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Era un día soleado común y corriente, un día como cualquier otro, o al menos eso pensaba yo. Mi nombre es Valeria, pero me llaman Val, soy una chica ordinaria de 16 años, cabello castaño, ojos cafés, complexión delgada y piel blanca como la leche o al menos eso me dicen mis amigos. Nunca he sido la típica chica linda por la que todos suspiran, he sido todo lo contrario, pero aún así no pierdo las esperanzas de algún día poder encontrar el amor verdadero.

—Entonces te espero a la 1:00 pm donde acordamos.
—Si Fany, estaré ahí a esa hora— le respondo.
—Bien, igual a las 12:30 pm te llamaré para que te apresures.

Luego de hablar largas horas por teléfono con mi mejor amiga Estefany, quedamos en que nos íbamos a ver por la tarde en las gradas del estadio ya que mi amiga tenía que contarme algo que le había sucedido y necesitaba un lugar tranquilo para hablar de ello, y qué mejor lugar que uno al que nadie visita. Estefany ha sido mi mejor amiga desde que tengo uso de razón, siempre nos hemos contado todo la una a la otra ya que nos criamos juntas desde pequeñas y la confianza que tenemos es de otro planeta. Es una chica hermosa con cabello largo y rubio como el oro, de ojos color cielo y con un cuerpo bastante voluminoso para su edad, no solo es una chica hermosa físicamente, sino que también tiene unos sentimientos preciosos, aunque es un poco alocada y fiestera pero su forma de ser es lo que la hace única e inigualable.
Llegadas las 12:30 pm recibo nuevamente una llamada de mi amiga, quien me apresura para que ya salga a su encuentro. Tras colgar me pongo los zapatos, le doy un beso a mi madre y salgo rumbo al lugar acordado para encontrarme con Estefany, por suerte las gradas del estadio no quedan tan lejos de mi casa así que estaré allí en unos 30 minutos. Cuando llego, mi amiga Estefany me recibe con un fuerte abrazo y con una felicidad más grande de lo normal y eso me extraña, de seguro lo que le pasó es algo especial para que ella esté así de feliz.

—Y bien, ¿qué es lo que tienes que contarme?— le digo con cara de curiosidad.
—No sé cómo voy a empezar a contarte lo que me pasó— ella responde emocionada.
—Pues desde el principio— le contesto.
—¿Recuerdas el chico que te dije que me llamaba la atención?.
—¿El jugador de fútbol?— le pregunto.
—Si ese, bueno pues ayer cuando iba camino a mi casa me lo encontré y resulta ser que...
—¿Resulta ser qué? Estefany habla.— le digo emocionada.
—Pues resulta ser que ayer estuvimos conversando y pues me dijo que le gusto y que quiere que nos conozcamos.
—¿Qué? No me lo puedo creer!!— grito emocionada.
—Yo tampoco me lo creo— responde.

Estefany tiene tanta suerte, es obvio que el chico que le llame la atención se fije en ella porque ella es preciosa y cualquier chico daría lo que fuera por salir con ella. Luego de risas y bromas miro mi celular y me doy cuenta de que ya son las 5:00 pm, en qué momento pasó tan rápido el tiempo. Le digo a Estefany que es hora de que nos marchemos y ella asiente. Camino a nuestras casas recuerdo que mi primo Enrique vive cerca y decido pasar a visitarlo, cuando llegamos a casa de mi primo él se sorprende al verme porque casi siempre es él quien me visita, me da un abrazo y me dice que pase a saludar a mi tía quien estaba en la cocina. Cuando entro para mi sorpresa, mi primo no estaba solo, en la sala estaba un chico muy guapo, pelo negro, ojos cafés, de complexión delgada como yo pero tenía sus músculos definidos, se veía que era mucho más mayor que yo, quizás 3 o 4 años más, nuestras miradas se cruzan pero sin darle importancia sigo hasta la cocina para saludar a mi tía. Luego de saludarla salgo y me dirijo a la salida para irme, pero mi primo me agarra de la mano y me detiene.

—Mira Val, el es mi amigo Marcos— me dice.
—Marcos ella es mi prima Valeria y ella— señala a Fany— su mejor amiga Estefany.
—Mucho gusto— respondemos yo y Estefany al unísono.
—El gusto es todo mío— prosigue él regalándome una mirada que me pone nerviosa.

No sé cómo alguien que apenas conozco logra que me ponga nerviosa pero nuevamente sin darle importancia sigo mi camino hacia la puerta cuando su voz aguda y raspada me detiene.

—Serías tan amable de regalarme tu número telefónico.
—Lo siento, pero no le doy mi número a desconocidos.— Le contesto y trato de seguir mi camino cuando nuevamente lo escucho hablarme.
—Mi nombre es Marcos, tengo 20 años y soy el mejor amigo de tu primo, ya no soy un desconocido— dice él.
—Lo siento nuevamente, con esa información no es suficiente para que te conozca.

Me doy media vuelta, agarro a Fany de la mano y salimos prácticamente corriendo de ahí. Al llegar a mi casa me tumbo en la cama y me quedo mirando fijamente el techo. Quién iba a pensar que esa tarde iba a conocer a ese chico, el cual me puso nerviosa con tan solo una mirada y unas palabras, porqué me habré puesto así si ni siquiera lo conozco, jamás lo había visto en mi vida. Todas esas preguntas daban vueltas como un carrusel en mi cabeza hasta que el cansancio me arropa y caigo en un sueño profundo.

Mi primer amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora