Mi primer amor.

Capítulo 8: La declaración.

Al fin llegó el día que tanto esperaba, hoy es cuando iremos a la playa y no puedo describir lo emocionada y nerviosa que estoy. Me levanto más temprano de lo normal, veo que son las 7:00 am y decido ir a prepararme el desayuno porque mis padres de seguro están dormidos, bajo las escaleras y voy rumbo a la cocina, me preparo unas tostadas y un batido de frutas.

Tras desayunar vuelvo a mi habitación para recoger las cosas que me llevaré para la playa, guardo en mi bolso una toalla, una muda de ropa de más, mis gafas para el sol y el bloqueador solar. Luego me pongo un bikini rojo bastante sexi, encima me pongo una camiseta ancha, un short de mezclilla y unas sandalias de playa. Cuando estoy por bajar las escaleras recibo una llamada de Fany diciéndome que ya casi van a buscarme, paso por la habitación de mis padres y les digo que ya era hora de irme, ellos asienten y siguen durmiendo otro poco.

Salgo y ya estaban todos esperándome en una hermosa camioneta negra, el que iba conduciendo era Samuel, Fany estaba en el asiento del copiloto y Marcos en el asiento de atrás, los saludo a todos ansiosa y me siento junto a Marcos.

Antes de llegar a la playa nos estacionamos en una tienda a comprar bebidas y algunas cosas para comer, estamos dentro de la tienda buscando qué comprar cuando siento que Marcos se acerca a mi.

—Te ves muy linda hoy.
—Muchas gracias. — le contestó sonrojada.
—Espero que en la playa me des la oportunidad de hablar contigo a solas, tengo algo que preguntarte.
—Está bien. — le digo con cara de preocupación.

¿Qué será lo que tiene que preguntarme?. Cuando terminamos de comprar todas las cosas que necesitábamos, nos subimos a la camioneta y seguimos rumbo a la playa.
Tras 1 hora aproximadamente de viaje por fin llegamos, la playa estaba repleta de personas, nos bajamos con todas las cosas y buscamos un lugar donde instalarnos, después de buscar encontramos un buen sitio cerca de una tienda de buceo.

Luego de acomodar todas las cosas, yo y Fany no aguantábamos más las ganas de darnos un chapuzón así que nos quitamos la ropa y nos quedamos en los bikinis, Fany tenía puesto un bikini negro muy parecido al mío, que hacía que su cuerpo se viera perfecto, tras caminar unos metros nos metimos en la playa, el agua estaba genial. Al rato Marcos y Samuel hicieron lo mismo que nosotras, se quedaron en traje de baño y se metieron a la playa para estar junto a nosotras. No sé por cuánto tiempo estuvimos metidos en la playa jugando y haciendo peleas de agua.

Tras salir del agua nos envolvimos en las toallas y nos acomodamos en la arena para beber y comer algo, estamos pasando un agradable momento, luego de habernos comido unos sándwiches deliciosos, Samuel y Fany vuelven a la playa a darse un chapuzón y yo me quedo sentada en la arena con Marcos. No sé porqué pero me comienzo a sentir nerviosa y no sé a dónde mirar ni qué decir.

—Te queda muy bien ese bikini.
—Gracias, a ti también te queda muy bien tu traje de baño.— le digo mientras me doy un trago de vodka.
—¿Sabes algo?, nunca pensé que una chica que apenas conozco me pudiera llamar tanto la atención.

Al escuchar esas palabras me pongo tan nerviosa que no se qué decir, ¿acaso Marcos se me está declarando?. Sin saber que decirle lo único que hago es levantarme e invitarle a darnos otro chapuzón, cuando me levanto para meterme en la playa el me toma de la mano.

—Valeria, lo que quiero decirte es que me gustas y que quisiera...

Fany y Samuel nos interrumpen en ese momento y yo lo agradezco porque casi me da un ataque al corazón. No puedo creer que Marcos me acabe de decir que le gusto, pero, ¿qué seria lo otro que me iba a decir cuando nos interrumpieron?.
Ya casi cae la noche y decidimos que es hora de marcharnos, en el camino yo y Marcos no hablamos, ni siquiera lo puedo mirar a la cara pero siento como él me mira con el rabillo del ojo. Luego de unas horas de viaje llegamos a mi casa, me despido de todos y me bajo de la camioneta cuando de pronto Marcos se baja detrás de mi.

—Valeria, ¿quieres ser mi novia?.

Yo me quedo sin habla, me quedo paralizada, no puedo creer que el chico que me gusta me acaba de pedir que sea su novia.

—No me tienes que responder ahora si no quieres, sólo piénsalo y después me dices tú respuesta.— me dice.
—Si Marcos, si quiero ser tu novia.

En cuanto termino de decir esa frase Marcos se lanza a mi y me da un gran beso en los labios. No sé por cuánto tiempo estamos así pero no quisiera que esté momento se acabe, de pronto él se separa, se despide de mi con una gran sonrisa y se marcha junto con Samuel y Fany.