Mi primer amor.

Capítulo 15: Tengo que dejarlo ir.

Ya han pasado dos días desde lo de Marcos y aunque me siento un poco menos dolida y triste, sigo con algo clavado en el pecho, él en este tiempo, no ha parado de llamarme para hablar conmigo, pero no le he contestado, no quiero hablar con él, no puedo mirarle a la cara después de lo que me hizo, ni siquiera tengo deseos de escuchar lo que tiene que decir.

En la mañana me despierto y decido que ya es hora de pararme de la cama, ya es hora de salir, no puedo pasarme la vida llorando por alguien que no me valoró, él no se merece mis lágrimas. Luego de asearme y desayunar le digo a mi madre que pasaré a ver a Fany, hace unos días que no la veo y ya la extraño.

Camino a casa de Fany, Marcos me ha seguido llamando y yo sigo ignorando sus llamadas, no quiero saber nada de él, si no supo valorar mi amor y quiso traicionarme con otra persona, no puedo hacer nada más, tengo que dejarlo ir y seguir mi vida sin él.

Llego a casa de mi amiga y ella me recibe con mucha alegría, se nota que también me ha extrañado.

—¿Estás bien hermosa?.— pregunta.
—Si, aún estoy un poco triste pero con un poco de tiempo sé que el dolor y la tristeza se irán.
—Esa es la actitud que debes tener, estoy muy orgullosa de ti.

Hemos estado hablando y riendo las dos juntas hasta que llega Samuel, nos saluda y lo noto un poco incómodo, ¿qué le pasará?.

—Perdóname  Valeria.— me dice.

Yo sin entender nada le voy a preguntar que a qué venía eso cuando de pronto me giro y lo veo, era Marcos, estaba afuera de casa de Fany. ¿Cómo después de lo que hizo tiene la cara de venir hasta aquí?. Rápidamente le lanzo una mirada de enfado a Samuel y me levanto para irme a mi casa, al salir, Marcos me toma de la mano acelerando mi corazón.

—Marcos suéltame.— le exijo.
—Por favor Valeria, déjame hablar contigo, necesito explicarte y necesito decirte algo importante.
—No me interesa saber nada de lo que tienes que decir, no después de lo que vi aquel día.

Yo trato de soltarme pero Marcos no me deja.

—Por favor sólo serán unos minutos, prometo que si después de eso no quieres saber más nada de mi te dejaré en paz.
—Acaso no entendiste lo que te acabo de decir, no me interesa saber nada Marcos, no quiero verte más ni quiero saber nada de ti.
—Valeria yo, por favor déjame explicarte, escúchame sólo un momento y luego te dejaré si es lo que quieres.

Se escucha tan sincero, tan dolido, le miro a los ojos y siento que de verdad tiene algo importante que decirme.

—Ok Marcos, te voy a escuchar, pero no ahora, quedemos para vernos mañana en las gradas.
—Perfecto, a las 2:00 pm estaré allí esperándote.

Tras decirle eso me despido de Fany y me voy directo a mi casa. En el camino me voy preguntando qué será lo que tiene que decirme Marcos.
Al llegar a mi casa, voy directo a darme una ducha, necesito despejar mi mente, una ves en el baño, coloco mi teléfono sobre el lavamanos y reproduzco mi playlist favorito. Mientras cae el agua sobre mi piel y mi cabeza sigo pensando en el encuentro con Marcos, cómo puede ser posible que después de lo que me hizo, aún siga poniéndome nerviosa, aún me gusta Marcos porque de la noche a la mañana no puedo olvidar lo que siento por él, a pesar de que me traicionó, pasé lindos momentos junto a él. Estaba sumergida en mis pensamientos hasta que la voz de mi madre gritándome que ya saliera del baño me sacó de mi burbuja.

Salgo de la ducha y me pongo mi ropa de dormir, bajo a comer con mis padres, la cena está deliciosa, una ves que termino voy directo a mi cuarto, estoy revisando mis redes sociales en el móvil cuando de pronto me llega un mensaje.

MARCOS: espero que la cita de mañana se mantenga, me alegró mucho verte hoy, espero que algún día me puedas perdonar, siempre pero siempre te querré Val. Descansa.

Esas palabras de Marcos, acaso ¿de verdad estará arrepentido de lo que sucedió? Tal ves mañana pueda saber la verdad de todo. Apago mi celular y me duermo.