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¿Qué tan hermosa es la vida?, ¿Vale la pena seguir con vida?
En un mundo donde el más fuerte sobrevive, ser débil significa tu muerte temprana.
Para Fushiguro Mei ser débil era ser una persona insignificante, ser una persona más en este oscuro mundo, donde mostrase débil, era demostrar ser manipulable para los demás.
Las personas débiles mueren diario, muchas personas mueren a diario, y a pesar de eso nadie se cuestiona el porque, nadie se detiene a pensar en ningún momento sobre la causa de esas muertes, lo único que les importa es saber que no quieren ser ellos los que morirán pronto.
Esa es la naturaleza humana, esa es la naturaleza que ella mas detesta.
A pesar de detestar la naturaleza humana, Mei tiene el deber de salvar a esas arrogantes y egoístas personas, es su deber como Hechicera, es su deber como una de los pocos humanos con la extraña habilidad de ver a esas horripilantes, asquerosas y sobre todo peligrosas cosas para la vida humana.
¿Qué eran? Los chamanes o Hechiceros, los denominaban espíritus malditos o Maldiciones, son una especie de seres espirituales que nacen de la energía maldita como producto de las emociones intensas que manifiestan los humanos. Son espíritus con habilidades sobrenaturales que existen para destruir a la humanidad.
Y claramente no podían dejarlos rodando alrededor de las personas.
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Frente a ambos mellizos, se había colocado un tipo de cabellos blancos como la nieve, unas ridículas gafas de sol, sin contar que traía una extraña ropa.
''¿Saben?'' el mayor frente a ellos empezó, ''Su padre pertenecía al clan Zenin, una buena familia de hechiceros''
La menor ladeo la cabeza confundida, ¿hechiceros?, el mayor solo se mantenía neutro, sin ninguna emoción en su rostro.
''Pero como no pudo alcanzarme, abandono el clan y los tuvo a ambos'' el mayor frente a ambos sonreía, ''Ambos pueden verlos ¿No?'' cuestiono mirándolos fijamente, ''Ambos se han dado cuenta del poder que tienen ¿no es así?''
Ambos azabaches miraban al mayor de forma seria, no era como si les importara algo que tuviera que ver con su padre, si es que lo podían llamar padre.
''Al clan Zenin le encanta el talento. Nosotros solemos despertar nuestros hechizos entre los 4 y 6 años, y además esa es la edad preferible para venderlos''
El mellizo mayor frunció el ceño ante la palabra venderlos no iba a dejar que nada le pasara a Mei ni a Tsumiki.
''Ósea Megumi, Mei'' llamo el mayor, ''Dejarlos a cargo del Clan Zenin, fue la mejor jugada que pudo haber hecho su padre'' finalizo haciendo con su manos un signo representativo a ganancia.
Ambos mellizos tenían su rostro serio, tampoco les importaba nada que tuviera que ver su padre.
''Están enojados, ¿No?'' cuestiono el mayor mientras se inclinaba hacia abajo para estar a la altura de los menores. ''Pero yo me encarg...'' el mayor no termino sus palabras debido a las hostiles palabras que salieron de los labios de uno de los mellizos.
''Que nos importa'' la menor e inofensiva azabache había alzado la vos, sin demostrar alguna emoción ante la situación. ''No nos importa lo que esté haciendo''
El mayor frente a ellos abrió sus ojos con sorpresa, mirándolos fijamente con sus azulados ojos, aun así ninguno mostro ninguna emoción.
''Hace años que no lo vemos, ni tan siquiera recordamos su rostro'' ahora era el mellizo mayor en hablar, ''Pero ahora ya entendimos más o menos la situación''
''La madre de Tsumiki tampoco regreso'' ahora la menor hablo, ''Nosotros ya cumplimos nuestro cometido, Nosotros ya lo les servimos'' termino con total seriedad.
La menor levanto la vista y observo en una balcón de una de las habitación como su hermanastra mayor estaba ahí, ''Oh ya han regresado'' esta tenía un sonrisa alegre hacia los menores.
''¿Realmente son de primer grado?'' murmuro el albino, con una semi sonrisa, se colocó de pie mirándolos a ambos con una juguetona sonrisa, ''Bueno que va, cuando quieran saber de su padre solo pregunten, creo que puede ser bastante entretenido'' paro unos segundo para mirar al mayor, ''En fin vamos al grano''
Ante eso, los menores prestaron atención.
''¿Que quieren hacer? ¿Quieren ir con el clan Zenin?'' cuestiono mirándolos a ambos de pie.
''¿Qué pasara con Tsumiki?'' cuestiono la menor, deseando lo mejor para su hermana mayor.
''¿Si vamos, podrá allí ser feliz?'' cuestiono ahora el mayor de los mellizos.
Ni el mayor ni la menor de los mellizos se vieron intimidado ante la mirada del mayor ante las siguientes palabra.
''No'' eran frías palabras las cuales eran pronunciadas por el albino, ''Estoy 100% seguro de que no, se los puedo asegurar''
Ante la fría mirada de ambos menores, el albino soltó una pequeña risa, levanto sus manos y las coloco en el cabello de ambos, desordenándolo en el progreso.
''Muy bien'' hablo quitando las manos, ''Yo me encargo del resto'' se dio la vuelta sin mirarlos pero antes hablo, ''Pero les voy a pedir que se esfuercen mucho, Bien'' la menor ladeo su cabeza confundida, ''Den lo mejor de ustedes''
El mayor empezó a caminar despacio hacia donde había venido, el mellizo mayor también, pero la menor se quedó viéndolo fijamente, debido a esto logro escuchar las palabras que el mayor dijo en vos baja.
''Háganse fuertes, Lo suficiente para que yo no los deje atrás''
Ese día, desde ese encuentro, la vida de ambos cambio, ambos descubrirían con el tiempo que el mundo es un lugar cruel, y oscuro, donde ser débil era una perdición, si querías vivir.
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𝐒𝐇𝐀𝐃𝐎𝐖 𝐓𝐈𝐄𝐒 ──𝐉𝐉𝐊
Fanfiction𝐒𝐇𝐀𝐃𝐎𝐖 𝐓𝐈𝐄𝐒 | 𝐉𝐮𝐣𝐮𝐭𝐬𝐮 𝐊𝐚𝐢𝐬𝐞𝐧. Inefable. Así era la relación de los mellizos Fushiguro para los demás. Porque absolutamente nadie podría formular palabras para explicar una relación tan rara, cercana, extraña e increíble como l...