Titan de ataque

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Como pudimos ayudamos a Mikasa a subir a Eren hacia uno de los techos más cercanos, estábamos consternados; hasta hace un momento Armin y yo habíamos sido testigos de como un titán se había comido a Eren

- ¿C-C-Como fue?- entre llantos de Mikasa y la incertidumbre varios soldados de otras divisiones hacían acto de presencia; todos rodeandonos.
- espero que tengan una buena razón para esto- la voz imponente de uno de los soldados de mayor rango llamó nuestra atención, su mirada fría daba escalofríos -ustedes cuatro vengan conmigo, los demás deben ir a la base y reportar lo sucedido- y tal como nos dijo fuimos guiados a las orillas de la muralla. Pronto aparecieron varios soldados que nos apuntaban -chicos esto es malo, ahora creen que Jeager es peligroso-
- ¿desde cuándo me llamas solo por mi apellido?-
- eso no importa ahora. Lo que importa es pensar en como salir de esta-
- los soldados están esperando el más mínimo movimiento para disparar nos a los cuatro-
-Mikasa, Armin, (TN) perdónenme. Yo los metí en esto-
- estamos juntos en esto y juntos salimos-
- ¡Disparen!-
-¡No!- Armin, Mikasa y yo nos cubrimos, pero estábamos sintiendo un calor sofocante y una gran estructura de titán nos había cubierto - ¡Jeager! ¿Estas bien?-
-si-
Todos tratábamos de calmar nuestras respiraciones, hasta que Eren hablo
- tengo un plan A y un plan B. El plan a es distraer a los soldados, para que yo pueda cruzar la muralla e irme-
¿Y el plan B?-
-ese te lo dejo a ti Armin. Si puedes probar que existe otra salida me quedare, así que decide bien- Armin lo pensaba bastante; pero Eren se desesperaba. Después de un momento Armin ideo un plan; con un semblante serio pero aterrado camido hacia el frente donde nos esperaban varios soldados dispuestos a dispararnos a todos.

- ¡escuchen! Yo abogare por el soldado Eren Jeager. Confío en que será de gran ayuda tapando el gran hueco que quedo en la muralla; solo denle una oportunidad de demostrar su valor estratégico - dicho esto hizo el típico saludo de la legión. Esperábamos una respuesta hasta que una voz hizo llamar nuestra atención -¡Bajen las armas!- dirigimos nuestras miradas a la fuente de aquella voz. Era un hombre de mayor edad, calvo pero con un semblante calmado -asi que ¿tu serás quien ayude a cerrar la muralla?- expreso con una sonrisa, a lo que Eren asintió -suban- usamos nuestros equipos para ayudarnos a subir. Ya una vez arriba aquel soldado de nos presento- mi nombre es Pixies- los tres lo saludamos - necesitaré hablar con el joven Eren- sentimos y nos alejamos de ellos sin bajarnos del lugar.

Después de un rato ambos volvieron, Eren nos comunicó el plan que tenían.
- voy a bloquear la muralla para evitar que más titanes entre, ustedes ayudarán a los demás soldados a evitar que los titanes me ataquen, entren o ataquen a los demás ¿entendido?-
- ¡Que comience la función!- dije para salir volando junto con Mikasa y Armin. Eren se quedó en el lugar, unos metros alejados un gran estruendo apareció de la nada; y aquel gran titán que poseía Eren  hizo acto de aparición - es hora- dije mientras me detenía en uno de los edificios contando a los titanes que había que combatir, nueve en total, por mi parte asesinaba a los titanes que podía, pero había algo que retrasaba a Eren; todo parecía marchar bien. Pero Eren no se movía, lo cual nos preocupaba  bastante - Armin, algo le sucede a Eren, ya no se mueve y si esos titanes logran devorarlo será nuestro fin- Mikasa se desvió para ir con Eren, Armin y yo nos dividimos para eliminar a los titanes que estaban más próximos a el. Pero Eren no respondia -¡Jeager! Es momento de que muevas tu enorme trasero y bloquees la muralla en este instante- ordené mientras pasaba por todos los edificios con ayuda de mi equipo
- algo esta mal con Eren, es como si no tuviera conciencia de lo que hacía-
-como si no pudiera controlarse, Armin rápido ve con Mikasa a este paso podría lastimarla o comersela-
-aunque sea Eren, no podemos tomarlo a la ligera-
- yo iré con los demás, necesitan ayuda- Armin y yo nos separamos e intentamos ayudar lo más que podíamos.

Después de unas horas Armin y Mikasa ya estaban a mi lado
-¿Y Eren?-
- será mejor que lo veas con tus propios ojos-
Observe en la dirección donde me habían señalado encontrándome con una escena tan digna de traer paz y asombro a mi mente. Eren sostenía una enorme Roca misma con la cual bloqueó, las bengalas verdes fueron disparadas
-¡Lo logro!- los tres fuimos hasta donde estaba Eren, nuevamente nos habían apuntado con las armas, mientras Eren salía de aquel titán, un enorme titan apareció mismo que tan pronto como apareció cayo frente a nosotros, un tipo de una altura de  uno sesenta  apareció sobre aquel titán
- mocosos ¿alguien me puede explicar que está sucediendo?-
Lo reconocimos en un instante -Capitan Levi Ackerman-
-veo que sabes mi  nombre, niña-
- eh escuchado de usted en algún momento; pero no crei que lo vería en estas circunstancias-
- el mocoso de ahí debe ir conmigo, será juzgado y dependiendo de las circunstancias, se determinará su sentencia-
- ¿lo van a meter a la cárcel?- cuestionó Armin - quien sabe- dicho esto, desapareció junto con Eren, otro soldado apareció detrás de nosotros - ustedes tres, deben ir a reportar- los tres los seguimos, llegamos al lugar donde comenzó todo encontrándonos con varios cadáveres y cosas asquerosas a nuestro paso.

La jornada del día había acabado, todos los cadáveres que habían fueron juntados y se quemarian al siguiente en la noche, ese mismo día en la mañana sería el juicio de Eren.

A la mañana siguiente, nos levantamos temprano ya que el juicio era a las siete de la mañana nos arreglamos y nos colocamos el uniforme especial que se nos había dado mismo que era como de gala, Armin, Mikasa y yo eramos los testigos.

La sala de juzgado era enorme y habíamos muchas personas, en medio había una torre hecha de marfil en la cual estaba encadenado Eren esperando su sentencia. Después de algunas horas y una paliza cortesía de Levi, se sugirió que Eren entrara a la legión de Reconocimiento tal y como el quería. Ese mismo día fuimos separados; aún teníamos que tomar la decisión de a que división unirnos.

Llegada la noche, todos los cuerpos que habían sido "rescatados" fueron apilados en montones y luego fueron cremados; fui con Jean. Lo mire estaba triste y devastado
-que las muertes de Mina, Marco y los demás no sean en vano-

Fuimos llamados hacia el centro de la plaza; en la tarima que estaba frente a nosotros apareció un hombre, de mayor estatura y edad.

Era el comandante Erwin Smith quien había venido a dar invitacion abierta a la legión de reconocimiento; varios se fueron quedándonos solo: Sasha, Reiner, Bertold, Crista, Ymir, Connie, Jean, Mikasa, Armin y yo.
- ¡Soldados Saluden!- el miedo invadía mi cuerpo ¿qué locura estoy haciendo? Me preguntaba a mi misma.

Llegada la mañana tomamos nuestras cosas y nos dirigíamos hacia la base de la legion; al llegar vimos a Eren en los establos -¡Eren!-
- ¿ah? Chicos que sorpresa-
Llegue y le di un leve golpe en el brazo
- ¿creíste que te libraría de nosotros Jeager?-
-claro que no, ya los extrañaba chicos- en capitán Levi llego para darnos la bienvenida mientras que una mujer de lentes y con el mismo peinado que tenía Sasha llego muy entusiasta -los nuevos uniformes han llegado- nos entregó a cada uno unas capas que tenían el emblema de la legion de reconocimiento.

Después de eso fuimos guiados por Levi hacia una hacienda abandonada la cual nos serviría como base de operaciones y refugio, nos instalamos en las habitaciones asignadas y después nos reunimos en el comedor. Conversábamos de todo lo sucedido y de los planes que se tenían a futuro mientras tomábamos la cena -bien ya es momento de descansar, mañana les espera un largo día. Empezando por la limpieza de este lugar- anuncio el capitán Levi mientras se levantaba de su haciendo. Todos imitamos la acción de capitán menos Eren, quien se había quedado a conversar con Hange.

Ah llegado la mañana, mi reloj biológico me obligó a despertarme a las cinco de la mañana

Me cambié y salí de la habitación la cual compartía con Sasha, Mikasa y Crista, al llegar al comedor vi a Eren y a la sargento Hange que aún platicaban
- ¿enserio no durmieron toda la noche?-
- ¡¡Ahhhh que sorpresa!!! Ya está amaneciendo- hablo con Hange con euforia mientras se levantaba de su asiento.

Alas de libertad - Armin Arlert y TNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora