5- Ich verspreche kleiner Engel

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Te lo prometo Angelito


8:00p.m Brixton Lambeth - Reino Unido, Inglaterra

El viaje de regreso, había sido un poco menos largo que en un avión de pasajeros, pero igual de cansado y tedioso, incluso más que eso, diez hombres al cuidado de dos pequeños de cuatro años, inexpertos y amargados a excepción de Harry y Anton, este último tenía un hijo mayor, vivió junto al varios años y por lo tanto tenía algunas nociones de cómo tratar con pequeños diablillos, a Harry siempre le han gustado los niños, dice que son los humanos más puros de la tierra, que hacen que la maldad no invada por completo al mundo.

En realidad, los mellizos eran muy bien portados, uno muy inteligente, valiente, seguro y muy positivo, mientras que el otro era todo lo opuesto, ingenuo, tímido, inseguro, y torpe. Pero ambos tan puros, tiernos y divertidos.

A las pocas horas de salir de América se habían quedado completamente dormidos.

El jet aterrizó en el aeródromo de la residencia por la noche, los hombres de seguridad bajaron primero con todo lo que habían traído de América, antes de que los niños despertaran. Cuando todos ya estaban abajo, finalmente Harry bajó junto a Zayn, Zamar igual había despertado por los ruidos que se ocasionaron, pero Gideon seguía profundamente dormido.

-Zayn, tu lleva a Zamar, tómalo de la mano-

-Porque lo tomaré de la mano, ya estamos en casa, no se va a perder-

-Porque es un niño Zayn, yo cargaré a Gideon, aún duerme-

Harry desabrochó el cinturón del asiento del pequeño, para tomarlo entre sus brazos con cuidado de no despertarlo, bajó de jet después de Zayn y Zamar

-Ven bestia, dame la mano- le dijo Zayn al pequeño, regalándole una sonrisa, el pequeño observó la mano ofrecida y le devolvió la linda sonrisa tomando su mano para caminar hasta la entrada de la casa.

Al cruzar la puerta escucharon pasos apresurados provenientes de la cocina - ¡Oh por Dios, ¿nuevos integrantes a la familia?!- preguntó la mujer emocionada, acercándose a arrebatarle al niño de la mano al moreno, para después cargarlo y repartirle besos en su carita.

-No Amelie, no se quedarán con nosotros, les buscaremos un hogar a primera hora mañana, mientras, pasarán la noche aquí-

La mujer se entristeció un poco -Bueno, espero que su nueva familia sea muy linda como ustedes- le dijo al pequeño mirándolo sonriente. El que Harry sostenía en sus brazos se comenzaba a despertar

- ¿Como se llaman hermosuras? - preguntó la mujer

-Soy Zamar y él es mi hermano Gideon- Amelie estaba a punto de hablar cuando un grito chillante se escuchó bajando de las escaleras -Esos dos príncipes se quedarán con el tío Niall- advirtió el rubio

-Niall, no se quedarán, por favor no empieces-

- ¿Tu eres hermano de uno de mis papis? - preguntó Zamar confundido y emocionado a la vez, Harry miró mal al rubio, ahora tenían que explicarle al pequeño.

-No Zamar, él no es tu familia, lo que quiso decir con eso, es que, le puedes llamar de esa manera cuando ambos sienten un cariño especial como si en realidad lo fueran, puedes contar con el cuándo tu necesites ayuda, algún consejo, cuando te sientas triste o incluso cuando quieras salir a distraerte un rato-

El niño asintió, comprendiendo lo que el rizado le dijo y voltió su vista al rubio sonriendo con demasiado ánimo - ¡Tío Niall! - gritó el pequeñín lanzándose sobre el mencionado, Gideon hizo la misma acción cuando Harry lo bajó de sus brazos.

Fürsten (Larry Stylinson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora