Era normal que Blitzø a veces desapareciera por hacer algo estúpido, así que sus empleados de la empresa I.M.P. no le prestaron mucha atención y solo planeaban gritarle cuando regresara. Sin embargo, nueve días sin ver a su jefe deja en claro que al...
Había una razón por la que Moxxie odiaba tanto los hospitales, y era por toda la jodida espera. No fue una sorpresa que un hospital en el Infierno estuviera siempre ocupado y abarrotado pues, después de todo, los demonios intentaban matarse entre sí todos los días por varias razones. Sin embargo, en lugar de esperar a ser atendido, estaba aquí esperando el pronóstico de su jefe. Habían pasado cinco horas y Moxxie estaba casi listo para desmayarse por la falta de sueño; La adrenalina de la pelea había desaparecido hacía horas y lo único que lo mantenía despierto era el miedo.
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Millie y Loona les habían dicho a los demás lo mal que estaba Blitzø, y Moxxie solo podía preguntarse de qué cojones estaba hecho su jefe... Incluso un demonio de nivel superior habría muerto seis veces por lo que le habían hecho, pero Blitzø se las había arreglado para sobrevivir. Moxxie sabía que, incluso si Blitzø lograba salir vivo de esto, le llevaría meses recuperarse.
Odiaba pensar en los 'qué pasaría si', pero aún existía la posibilidad de que Blitzø pudiera morir... No quería pensar en eso, sobre todo porque si lo hiciera entonces, Moxxie no podría dejar de llorar. Era gracioso, nunca se había preocupado así por su jefe, pero demostró cuánto, en el fondo, le importaba ese fastidioso imbécil después de todo lo que había sucedido.
...Se preguntaba cuánto quedaría del viejo Blitzø.
Nadie puede pasar por una prueba como esta sin que el trauma lo destruya. Sabía que su jefe estaba viendo a un terapeuta, o al menos él les dijo que sí, pero Moxxie no era un idiota: Blitzø tenía algún tipo de problema pasado del que no le gustaba hablar y se escondió detrás de una máscara de egoísmo y espectáculo para evitarlo... Lo más probable es que ahora estuviera permanentemente roto, pero independientemente de lo que sucediera, Moxxie estaría allí para él. Después de todo, no arriesgó su vida solo para poder mantener su trabajo... Le guste o no, Moxxie era parte de la familia de su jefe.
No sabía cómo afectaría esto a I.M.P. en general, pero en este momento, lo único que le preocupaba era el bienestar de Blitzø. Las cuestiones técnicas relacionadas con la empresa podrían ser abordadas más adelante.
Miró a su esposa, que dormía acurrucada en su hombro mientras él acariciaba su cabello; Ella casi se había desmayado justo cuando llegaron Moxxie, Stolas y, para sorpresa de todos, Octavia, quien había dicho algo sobre la necesidad de salir de la casa donde estaba 'esa mujer', y nadie presionó más; Moxxie le había dicho a su mujer que durmiera mientras él prometía despertarla cuando se les diera la noticia de Blitzø. Loona era la única otra que tenía los ojos cerrados, sentada en su silla, con Octavia sosteniendo su mano mientras Stolas caminaba de un lado a otro.
El amanecer estaba comenzando a despuntar cuando las puertas de emergencia finalmente se abrieron y el médico jefe que trabajaba en el caso de Blitzø salió, su atuendo quirúrgico verde cubierto de sangre. ― ¿La familia de Blitzø?
