Cómo acabé siendo un Ghostbuster

Unidad Contenedora

Ray nos llamó a todos detrás de un edificio, mientras el caos se desataba en la ciudad, y Gozer causaba más estragos; debíamos de pararlo, sea como sea, sino acabará con nuestro mundo. –Esa perra se ha ganado un boleto de ida –comentó Venkman enfurecido.

–Lo tengo, puede que funcione –Dijo Ray–Dispara –se levantó para mirar hacía la puerta de la estación de bomberos.

–Dime que no pretendes entrar ahí para acabar cometiendo la mayor estupidez de todas. –Peter, sabía lo que era capaz de hacer su amigo, con tal de salvar New York, y la humanidad. –Necesito entrar ahí. Tengo que llegar hasta la unidad contenedora –Peter negó con la cabeza ante la idea de Ray.

Sin embargo, Winston asintió con la cabeza. -¿Lo dices en serio? –Dijo Peter enfurecido –Escuchar, no es una casualidad que Gozer eligiera la estación de bomberos.

Para empezar la unidad contenedora es una puerta interdimensional –Miré a Ray con el ceño ligeramente fruncido.

–La primera vez que nos enfrentamos a Gozer destruimos su templo que era su medio para ingresar a nuestra dimensión.

Es como su Disneyland particular, donde se mueve como pez en el agua –Nos explicó Ray, para que pudiéramos entenderle mejor.

–Lo que significa que si dejamos que Gozer pretende destruirlo todo luego necesitará esa puerta para volver a su mundo. Pero si cerramos ese portal lograríamos atrapar al dios –

Por eso necesito que la distraigan para poder cerrar la parrilla y así impedir a Gozer su cometido. –Peter se secó el sudor de la frente con un pañuelo. –Bien, lo haremos–

Ray asintió mirando otra vez hacía la puerta. –Seremos todos –Dije, levantándome intercambiando una mirada con los presentes –Somos cazafantasmas. Ser cobardes no está en nuestro diccionario. –

Lucky se acercó para tirarme de mi brazo –Trevor yo... –Aproveché ese momento para besar sus labios y esbozar una sonrisa confiado en que todo iba a salir bien, y que no debemos de preocuparnos.

-Trevor –fruncí el ceño -¿Si? -Lucky sonrió negando con la cabeza para sujetarme el rostro entre sus manos y devolverme el beso con más intensidad. –Conozco un buen sitio para nuestra primera cita. Sólo procura poner tu culo blanco a salvo – Winston, carraspeó mirándonos a ambos como los dos adolescentes imprudentes que éramos.

Ray, quien se había quedado en silencio unos instantes–De acuerdo, mientras ustedes lo distraen yo entraré dentro de la estación de bomberos, y cerraré la unidad contenedora.

Pero tendré que pediros algo muy importante. No será suficiente, tenemos que cerrar el portal para impedir el paso. El problema será que el resto de los fantasmas que han escapado estarán libres por New York.

Pero habremos salvado la humanidad –Peter, temiendo en lo peor de los casos –Dime que no vas a decirlo. –Ray asintió, convencido de que iba a soltarnos –Tendremos que cruzar los rayos. –

Phoebe se levantó mirando hacia arriba del edificio que se había derrumbado.

– ¡Esperar! Algo está pasando mirad hacia arriba.

Lo que vimos fue a Gozer rugiendo dando zarpazos al aire. Los fantasma no dejaban de atacar logrando que el dios comenzará a reducir de tamaño -¡Ahora Ray!

Stantz, sale corriendo entrando en la estación de bomberos. Peter, y Winston nos dice que le sigamos.

-A mi señal –Lucky, lanza un rayo de contención contra la criatura. -¡Esa es mi chica!–grite, y Winston me miró con una sonrisa.

Todavía no puedo creer que fuese su abuelo, y, no me lo había dicho hasta el último momento.

Todos salimos para disparar a Gozer aprovechando que se estaba debilitando cada vez más.

De pronto, los fantasmas actuaban como si estuvieran a nuestro favor. Atravesando una y otra vez el pecho del perro infernal que poco a poco tomaba la forma original.

Justo desaparece de nuestra vista. -¡Ray! –Gritó Peter entrando corriendo a la estación de bomberos donde se encontraba su amigo.

Corríamos detrás de Venkman hasta ver como Ray lograba cerrar la unidad de contención dejando a Gozer fuera de combate. -¡Ahora! ¡Cruzar los rayos! –Se apartó rápidamente para ponerse a nuestro lado.

Todos disparamos nuestras pistolas de protones para la polarización inversa y así cerrar el portal.

Cada uno juntamos los rayos sintiendo como las manos nos vibraban con el arma entre nuestras manos. -Oye, recuérdame ese verano cuando morimos debajo de un montón de escombros.

Y el calor se apoderaba de nosotros podía sentirlo, si, tal vez acabe siendo desintegrado pero mi muerte habrá valido la pena. Cerré los ojos con fuerza y apreté los dientes.