CAPÍTULO 22

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Una fría noche  se hizo presente en los terrenos de Hogwarts, El cielo nocturno describía una oscura y despejada noche , sembrado de estrellas desparramadas, como si fueran un puñado de luciérnagas titilando a lo lejos , mientras que en el interior del majestuoso castillo la mayoría de los alumnos se refugiaban en los lugares más cálidos del colegio y otros se acogian en sus salas comunes, así como Harry, Ron y Hermione que se encontraban sentados delante del fuego en la sala común, donde aún quedaban unos pocos compañeros de sexto que pronto se irían a dormir.

La castaña sentada en el sofá a lado de su peludo gato Crookshanks que dormía profundamente, mientras ella hojeaba delicadamente las páginas del libro que hace unos días había retirado de la biblioteca.

Harry se sentaba en la alfombra color escarlata frente a la chimenea, leyendo su libro de " Posiones avanzadas" y Ron estaba arrodillado frente a la pequeña mesa que era iluminado por las llamas de la hoguera, el pelirrojo tenía el pergamino vacio junto con una pluma en su mano y observando concentradamente el amarillento pergamino , como si quisiera que apareciera algo por arte de magia.

Ron por fin se decidió a terminar la condenada redacción encargada por Snape,que Harry y Hermione ya habían acabado.

— Ron no nos quedaremos aquí toda la noche — le habló Hermione Lanzando un resoplido y observando al pelirrojo hipnotizando a su pergamino.

— Solo me falta unas cuantas hojas Hermione,!!! — dijo el pelirrojo alzando la mirada hacia su amiga, y mordiendose una uña.

Ella apretó los labios con resignación.

Harry dejó de leer y bajó su libro de posiciones.
— Bueno.. A mi también me costó terminar las cincuenta hojas — dijo El pelinegro mirando a su amigo.

— Para ti fue más fácil Harry, si Hermione te ayudó — le dijo Ron abriendo un nuevo tintero.

— Claro que no!!! — repuso Harry con énfasis.
— Hermione y yo hicimos juntos la tarea, pero yo lo hice solo, no Herms?? — se dirigió a su amiga.

Ella asintió y cerró el voluminoso libro,
— Si, es cierto, debo aceptar que lo hiciste solo.

— Esto no es justo, porque no me dijeron que iban a hacer la tarea?? — dijo el pelirrojo algo ceñudo.

Harry y Hermione se miraron con los ojos abierto como no creyendo lo que acabaron de escuchar.

— Claro que te dijimos Ron — reclamó Hermione indignada.
— Pero tu preferiste irte con Lavender!!! — le dijo la castaña enojada.

— Que yo preferí irme con ella?? , pero si no vieron que me atrapó en el vestibulo, y después de eso tuve que escucharla parlotear dos horas!!! — se quejó Ron mojando la punta de su pluma en el tintero.

— Aún no terminas con ella?? — preguntó Hermione frunciendo El entrecejo.

— No es tan fácil Herms — repuso el pelirrojo.

Harry se disponía a abrir la boca para acotar algo, pero el pelirrojo no lo dejó.
— Y no me digas que es fácil Harry!!! — le dijo Ron apuntando le con el dedo.

De repente Ron abrió los ojos,
— Ya sé!!! — dijo y empezó a arrastrar su pluma sobre el pergamino, después de unos segundos la castaña y el pelinegro volvieron a su lectura, no querían cortar la inspiración de su pecoso amigo que le costaba tanto terminar su redacción, lo único que se oía era el chisporroteo del fuego y el rasgueo de Ron contra el pergamino.

Hermione abrió de nuevo su libro, e iba leyendo casi las mismas páginas que ya había hojeado, aunque lo leyera por tercera vez no lograba retener nada, una profunda preocupación la aquejaba, lanzó un sonoro suspiro,

Un Slytherin En Apuros. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora