Paces Con El Capitán

1.9K 229 1
                                    

Capítulo 22.

El ambiente estaba sereno y tranquilo, la salida del sol se miraba perfecta desde el balcón donde ambos se encontraban, el castaño besaba de manera lenta el cuello de YoonGi haciéndole unas cuentas cosquillas.

–Jeongguk.

–Mmm– emite mientras sigue besando el cuello ajeno, esta vez bajando un poco más, cerca de sus clavículas mascadas con puntos morados por los anteriores ataques de el castaño en esa área.

YoonGi se estremeció de manera involuntaria por la placentera sensación.

–¡Deja de distraerme!– manoteo el pecho del castaño, que ahora reía de manera divertida.

–¿Que necesitas?– Jeongguk mantuvo sus manos de manera floja en la cintura de YoonGi, ambos en capas de ropa para dormir, mal sujetas ahora por los besos y caricias que se comenzaron a repartir apenas salieron de la cama. Jeon estaba contento por lo receptivo que había sido Yoongi a sus caricias y besos, logrando que algo primitivo reinará su cuerpo y hayan logrado copular más de cuatro veces en toda la faena.

–Quiero preguntarte algo importante.

Jeongguk se acomoda en barandilla de manera tentadora.

–Dime.

–¿Qué es lo que realmente sientes por mi? Además del deseo– Jeongguk sonrió, esperaba la pregunta, en realidad había pensado que había sido llamado por esa misma pregunta, cosa errónea, pero gracias a Jimin logro saber dar una respuesta sincera.

–Siento muchas cosas Yoon, como que me gusta tu sonrisa, me gusta cuando estas enojado, o celoso, me gusta tu inteligencia y fortaleza, porque déjame decirte, que nadie a logrado lo que tú. Me gusta tu mal carácter, ¿Lo que siento por ti? Es que me tienes a tus pies, con gusto seré tu perro con tal de estar a tu lado. Renuncio a mi libertad si deseas que me quede a tu lado.

La seriedad que mostraba el castaño dejaba en claro que sus palabras eran sinceras, logrando que el corazón de YoonGi palpitara de manera acelerada, el rubio sonrió y con sus manos ásperas por las batallas libradas tomaron las tiernas mejillas de Jeongguk y lo beso.

–Me alegra que lo hayas mencionado, porque a partir de ahora. Me perteneces. Min Jeongguk.

Y con ello sellaron su promesa, a la vista de un nuevo amanecer.

(…)

Taehyung miraba divertido como Yoongi escondía el fuerte sonrojo en sus pálidos cachetes, un Jeongguk con la respiración agitada en una esquina de la oficina de su amigo le daba suficiente pista de lo que había logrado pasar allí y que el interrumpió.

Desde que regresaron de la capital hace unos pocos días había logrado notar a esos dos bien justos, las miraditas y sonrisas no pasaban desapercibidos por el capitán, el cual se divertía de lo lindo junto a SeokJin interrumpiendo deliberadamente los momentos calientes de esos dos en momentos de trabajo.

–Perdón Emperador, no sabía que estaba ocupado, le vengo a dejar un mensaje del Rey– Taehyung se inclinó respetuosamente mirando de reojo a Jeongguk, el cual se notaba irritado, le  saco la lengua de manera infantil, pero que fue contesta de igual manera.

–Gracias Tae, puedes retirarte– Yoongi no levantó sus vista de los pergaminos, pero sabía perfectamente que esos dos se estaban insultando de manera no verbal –Ya dejen de estar haciendo muecas y larguense.

Taehyung rio y se marchó con una suave venida, en cambio Jein se quedó en el mismo lugar.

–Esto aplica también para ti Gguk– desde su vista periférica logró ver como el castaño hacia un puchero y se iba a paso lento, no fue hasta que la puerta fue cerrada que soltó un suspiro y luego una carcajada.

Esos dos no podían estar solos juntos y querer matarse.

Volvió la vista en los papeles que le fueron entregado, alegrándose de las buenas noticias que le eran entregadas.
Pronto todo estaría a como debía ser.

(…)

Jeongguk entrenaba de manera aburrida, estaba solo así que no era muy entretenido, eso hasta que logró ver a Taehyung cerca de donde estaba él.

–Capitán Kim.

Taehyung ciertamente tenía tiempo viendo como Jeongguk entrenaba, no lo hacía mal y se notaba su antiguo entrenamiento militar, tomó una espada de madera y se puso enfrente de él.

–En posición Jeon.

El mencionado miró con extrañeza a Taehyung para posteriormente reír entendiendo lo que el contrario quería.

–Bien– y sin previo aviso se estrello contra el capitán, el cual ya se lo veía venir, contra-atacó, logrando hacer que Jeongguk retrocediera, puso más peso en su brazo y se abalanzó contra el castaño, este lo esquivo y se defendió.

Y así pasaron un buen rato, tratando de vencer al contrario y no perder su orgullo en el proceso.

(…)

La respiración de ambos era pesada, estaban acostados en la hierba mojada y aplastada por su entrenamiento imprevisto. A Jeongguk le dolía su brazo más de lo que debería, lo había forzado mucho. Taehyung en cambio, le dolían la piernas ya que Jeongguk había puesto su espada de madera en la mínima oportunidad que tenía en ellas. Ambos no sabían quién había logrado ganar, así que ambos lo declararon un empate y así quedó el resultado.

–Sí lo lastimas Jeon, créeme, te mataré– la voz de Taehyung sonó lastimera –Es mi hermano y no quiero que le lastimes el corazón...

–No lo pienso hacer.

–YoonGi es muy inseguro de si mismo, he querido quitarle eso, pero no lo he logrado, pero desde que llegaste e notado un pequeño cambio, así que por favor, no lo lastimes.

Se levantó y se colocó cerca de donde estaba Jeongguk acostado. Mirando en lo alto.

–El Emperador Min Yoongi es una persona capaz de lograr todo lo que desee, pero cuando está solo, únicamente es Yoongi, el doncel disfrazado. No quiero que Yoon regrese a los días en los que más sufrió– la voz del pelinegro se quebró y trago grueso, sólo en recordar aquellos días de soledad y deprecion de su amigo de cabellos rubios, le daba una fuerte culpa al no saber como consolarlo.

Jeongguk se quedó callado, analizando las palabras ajenas.

–Todo este tiempo... ¿Fue una Prueba de tu parte?– no obtuvo respuesta, lo único que pudo hacer fue ver como Taehyung se marchaba.

La puerta se cerró en un ruido sordo, Jeongguk sonrió y también se puso de pie.

Por primera vez, se sentía libre.

Se sentía completamente libre.

Emperador | KookGi EDITANDODonde viven las historias. Descúbrelo ahora