Le mots qu'on ne dit pas

Capitulo 8. Sin que el final nos separe

-¿Ya vas a dejar de lamentarte?.- Preguntó finalmente la pelirroja después de que hubieran pasado buen rato los dos en la madriguera y en silencio.

Una mirada de enojo fue la que el diseñador le dio a la heroína al escuchar aquellas palabras, si bien había comprendido su error y se arrepentía de ello, no toleraría que hablara de lo que había pasado como si no tuviese importancia, porque aquel momento en que Nathalie Sancoeur moría en sus brazos se iba a quedar en su cabeza para siempre, no era algo sin importancia.- No me pidas que olvide lo que acaba de pasar así como así, porque ha sido muy real, ¡Lo sabes!.-

-Lo sé, y no te pido que lo olvides.- La heroína dirigió la mirada al diseñador quien seguía consternado.- El temor de un mal final es esencial, ese no se va, solo se queda contigo por siempre y no lo olvidas jamás.- La pelirroja se cruzó de brazos mientras veía como las pocas ventanas a los futuros se mantenían a duras penas.- Cuando se viaja en el tiempo lo visto visto está, aunque ya no pueda pasar no quiere decir que no tengas el temor de que pase, pero te recuerda lo que tienes que cuidar.-

Gabriel se relajó un poco al escuchar aquello dándose cuenta a lo que ella se refería, olvidaba que ella había vivido muchas más cosas que él, igual o peores, y que a pesar de todo ella era la única que siempre lo recordaba. Tomó aire intentando calmarse, sabía que aún había algunas cosas que arreglar, y sobre todo trató de pensar en lo bueno, aún tendría la oportunidad de hacer las cosas bien, tenía que hacerlo.- Estoy listo, llévame a casa...-

Bunnyx no dijo nada, solo asintió con la cabeza agradecida de que estuviera al fin listo para terminar al fin con esa locura, tocó con sus manos una de aquellas ventanas haciendo que las imágenes en esta cambiaran rápidamente, acercándose a ella el de cabello platinado pudo ver una vez más el momento en que ambos discutían, en el que ella se iba y él la dejaba ir por sus miedos.- Ahora escúchame...- Llamó su atención la otra portadora mientras el tiempo en aquel espacio seguía corriendo con normalidad.- Te devolveré de donde te tomé, pero minutos antes, con ese tiempo extra podrás encontrarla antes de ser akumatizada y no te encontrarás con tu otro yo.- Ambos pudieron ver como en esa Paris frente a ellos una Mayura con el rostro al borde del llanto avanzaba con velocidad por los tejados de los edificios.- Una vez que evites que sea akumatizada busca a Ladybug, ella y Chat Noir estaban patrullando cuando todo pasó, necesitaremos su amuleto encantado para arreglar los daños y borrar ese futuro por completo.- Con la cabeza, señaló al otro extremo de la madriguera, donde en otra de sus entradas se podía ver aún aquella Nathalie.

Gabriel la vio por unos segundos antes de enfocarse de nuevo en las indicaciones que le daban.- Ellos no van a creerme, y no pondré en peligro a Nathalie, no de nuevo.-

-Creí que eras inteligente.- Le dijo ella en tono de burla ganándose otra de esas miradas de reproche del diseñador.- Se que sabrás que hacer, si no, yo misma te ayudaré.-

El de cabello platinado asintió con la cabeza demostrando estar de acuerdo con aquello.- Nooro, alas oscuras a mi.- Y una vez más se transformó en el villano de Paris, quizá por última vez; Observó a la portadora del conejo y luego a aquel lugar donde había confiado en llevarlo y por último a aquella ventana al futuro que tuvo que vivir en carne propia, a lo lejos vislumbró a su asistente tendida en el suelo de la mansión, y le prometió en silencio que arreglaría todo.

Tomando valor se lanzó a través de aquel portal llegando hasta el tejado por el que acababa de ver pasar a su compañera desde la madriguera, sabía ahora mejor que nunca que no debía de perder el tiempo así que de inmediato fue de techo en techo buscando a Mayura, podía sentir su akuma, no estaba muy lejos, y conforme sabía que se iba acercando a él pudo distinguir también las emociones de la azabache, debía apresurarse.