The healer. (MoonSun)

Capítulo 1.

•MoonByul

Me encontraba bajo la pequeña mesa que se encontraba en la cocina, los manteles largos me ocultaban. Lo único que podía escuchar era cada golpe que mi padre le daba a mi madre y como ella se quejaba de dolor. Abracé mis piernas y enterré mi cabeza sobre ellas.

~ Esto es solo un sueño, esto es solo un sueño - me repetía una y otra vez.

De un momento a otro dejé de escuchar los golpes, lo único que se escuchó después, fue la puerta de la casa indicando que mi padre se había ido.

~ ¡Mierda! - grité al despertar, cada vez se hacían más y más recurrentes los sueños.

Me levanté de la cama y salí hacia la cocina, agarré un vaso y lo llené de soju, la única manera de no soñar era si me emborrachaba un poco así que ya era rutina de todas las noches. Me recosté en el respaldo de la mesa de mármol que se encontraba a poca distancia del refrigerador y me quedé viendo fijamente el calendario.

~ Por fin mañana te conoceré Kim Yong Sun - dije con una sonrisa traviesa - tú y yo nos vamos a divertir - en realidad, era yo la que se iba a divertir.

Dejé el vaso en el fregadero y me encaminé hacia a mi habitación, me volví a acostar y sentí como mi cuerpo se relajaba gracias al soju.

...

Sonó la alarma y poco a poco fui abriendo los ojos, podía ver los pequeños destellos de luz que entraban por mi habitación, me levanté y me metí al baño para darme una ducha rápida, me puse unos jeans con una playera blanca y una chamarra negra encima a juego con un gorro negro y unos tenis blancos.

Me terminaba de poner perfume cuando escuché que abrían la puerta.

~ Es ella - pensé.

Salí rápido de mi habitación y me dirigí hacia la sala, al llegar me encontré con Kim Yong Sun, era incluso mas hermosa en persona, a lado de ella se encontraban sus padres y su hermana. Al percatarse de mi presencia todos me voltearon a ver con sonrisas en sus rostros.

~ Mucho gusto - dije mientras les daba la mano a cada uno - mi nombre es Moon Byul Yi - me giré hacía Yong Sun - Kim Yong Sun, ¿verdad? - le extendí mi mano y al tocarnos sentí electricidad correr por todo mi cuerpo, ella sintió lo mismo ya que dio un pequeño respingo al sentirlo.

Era extraño, se sentía extraño, volteé a ver nuestras manos para luego subir mi mirada, ella estaba siguiendo cada movimiento que hacía, al conectar nuestras miradas sentí como si pudiera ver a través de mí. Giré levemente mi cabeza tratando de entender porqué me sentía así.

~ Interesante... - pensé.

~ Sí, pero me puedes decir Sun - dijo emocionada.

~ Ellos son mis padres Kim Yu Bin y Kim Sung Hoon y mi hermana Kim Sun Hee.

~ Mucho gusto, les daré un pequeño tour por el departamento - todos asintieron.

Les enseñé prácticamente todo, la pequeña biblioteca, qué a pesar de ser pequeña, podías encontrar todo tipo de libros, la cocina y todo lo que podía encontrar ahí, desde sartenes, especias, etc. La sala y el pequeño espacio detrás de la sala, era mi espacio favorito, ahí me sentaba a leer mientras veía todo el campus desde la gran ventana.

~ Y por último, tu habitación - abrí y dejé que pasaran todos primero - espero tengas todo lo que necesites, esta habitación solía ser mi gimnasio así que no estaba amueblada para habitación.

~ Es perfecta - dijo - gracias - se giró hacia a mí y nuestras miradas conectaron, ahí estaba otra vez, ese escalofrío.

~ Las únicas dos reglas que tengo es no hacer fiestas aquí y mantener limpio el departamento, tengo un pequeño tic con la limpieza - me excusé.

~ No te preocupes, no soy de fiestas y también tengo un tic por la limpieza - dijo mientras veía cada rincón de la habitación.

~ Bueno, los dejo para que se instalen cómodamente, me tengo qué ir - me acerqué a los señores Kim y les tendí la mano - un placer conocerlos.

~ Igualmente - respondieron al mismo tiempo.

Me di la media vuelta y me dirigí a la puerta, antes de abrir sentí que alguien tocó mi hombro.

~ Disculpa, creo que te quedaste con la llave de la habitación - dijo nerviosa.

- Ah sí, toma - agarró la llave y antes de que diera media vuelta para irse, la agarré del hombro - y tengo una regla más - dije seriamente - jamás te acerques o entres a mi cuarto.

Me di la media vuelta y salí del departamento, pude sentir como se quedó sorprendida por mi cambio repentino de actitud. Me dirigí hacia el elevador mientras sonreía maliciosamente.

~ Vamos a ver cuánto tiempo aguantarás - dije en mi mente.