25 days დ →Langa x Reki

Epílogo

2 meses y 25 días habían pasado después de la luna de miel, habían regresado a Japón entre la primera semana de diciembre, ahora ya era febrero, era primavera.

Entre esos meses Reki estuvo con muchos cuidados después de lo sucedido, Langa se encargaba de cuidarlo con mucha paciencia y amor, su madre también lo cuidaba al igual que los chicos, el que más visitaba a Reki era Miya.

Aquel día de febrero se suponía que Langa se quedaría en casa y cuidaría todo el día a Reki.

—Langa, amor quiero ir al baño.— Dijo Reki tratando de safarse de los brazos de Langa el cual lo tenía abrazado a el.

—Mhm~.— Se quedó entre dormido, moviéndose causando que Reki pudiera salir de la cama.

Reki se había despertado por un dolor en el vientre, pensó que como se acercaba la fecha del parto sería por eso.

Sin poder ir al baño, en medio del pasillo del apartamento sintió un líquido recorrer por sus piernas.

Había roto fuente.

—¡Langa!— Gritaba Reki inmóvil, tuvo que gritar varias veces para que Langa despertase.

—¡¿Que paso, estás bien?!— Dijo Langa saliendo de la cama asustado corriendo hacia donde escuchaba a Reki.

—El bebé.— Dijo nervioso Reki entre susurros.

—¿Que le pasa al bebé?— pregunto Langa acercándose hacia el.

—¡El bebé ya viene!—Dijo asustado y muy nervioso Reki, no pensó que sería ya.

Cómo si hubiera Langa visto a un fastasma, su cara se volvió pálida pero muy pálida, Langa no sabía que hacer.

—Ve por la pañalera.— Dijo Reki tratando de tranquilizarse, pues sabía que su esposo no sabría que hacer.—¡Pero ya!

Cómo si fuera flash, corrió hacia la habitación por la pañalera lo más rápido que pudo.

—Vamos hacia el auto.— Dijo Langa apurado cargando a Reki entre sus brazos.

—¡Bájame! No vas a poder cargarme mucho tiempo.—Dijo Reki sonrojado mientras Langa lo cargaba pasando por el estacionamiento mientras muchas personas quedaban viendo.

—Fue más rápido, a parte no pesas mucho bebé.— Dijo Langa dejando con mucho cuidado a Reki en el asiento del copiloto, para luego subirse al auto.

Langa iba un poco apresurado hacia el hospital, mientras calmaba a Reki el cual empezó a sentir los dolores más fuertes.

—Respira y exhala.— Intento acercar su mano hacia Reki para tranquilizarlo, pero lo único que recibió fue que Reki mordió su mano.

—¡Esto es tu culpa! Si te hubieras controlado ese día, no estuviera pasando por esto.— Reki no sabía que estaba diciendo solo estaba sufriendo por el dolor.

En todo el camino Reki con mucho dolor en el vientre le iba reclamando a Langa, Reki en ese momento no pensaba, lo único que pasaba por su mente era matar a Langa por el dolor que ahora estaba teniendo.

Llegaron rápidamente al hospital, Langa cargando a Reki en su brazos mientras Reki casi se desmaya del dolor.

Los enfermeros atendieron muy rápido a Reki, lo llevaron a sala de parto, en dónde se decidió que sería por cesárea.

Los minutos para Langa se volvieron horas casi una eternidad, llamo a los padres de Reki y a su madre y a los chicos.

—¿No han dicho nada?—Pregunto Hiromi llegando con los demás.

—No.— Langa estaba asustado hace 3 horas que no le daban noticia de el.

—Tranquilízate, Reki y Mian estarán bien.— Dijo Joe intentado tranquilizar a Langa.

—Familiares de Reki Kyan.— Dijo un médico cerca de ellos.

—Aqui, soy su esposo.— Dijo Langa rápido.

—Los dos están bien, salió bien el parto, en unos minutos lo traerán.— Dijo el médico para luego retirarse.

—Te dije.

Pasaron como 20 minutos y Reki ya estaba en la habitación asignada, solo habían dejado entrar a una persona ya luego irían pasando más.

—¡Reki!— Dijo Langa aliviado al verlo entrando a la habitación.

—Langa...el bebé.

Reki estaba un poco débil.

—Esta bien amor, ya traerán a Mian.— Dijo Langa tomando la mano de Reki y acariciandola.

Y como dijo Langa, la enfermera llegó con el bebé.

Su cabello era de color azul pero al estilo de Reki, y sus ojos eran una combinación de rojo y azul.

Se parecía tanto a Reki.

—Gracias por hacerme el hombre más feliz, como te amo.— Dijo Langa con algunas lágrimas en sus ojos mientras sostenía a Mian, el cual abrió los ojos.

—Acércate, quiero verlo.— Reki estaba feliz, por fin tenía la familia que había deseado, el amor de su vida y su hijo.

Después de ellos, su familia fue la segunda en pasar y al último los chicos.

—Que bueno que se parece a reki.— Dijo Miya mientras cargaba a Mian, y lo acariciaba.

—¡Tu!

—Que tierno.—Dijo Kaoru viendo a Mian.

—Ya le tengo muchos peluches en mi casa luego se los paso dejando.— Dijo Hiromi el cual le llevo flores a Reki y a Mian.

Todos rieron por qué sabían que Mian sería un niño muy consentido, y todavía faltaba Ainosuke con miles de juguetes.

......

¡Gracias por las 3k!<3
Ya traigo el epílogo y solo queda un extra que subiré luego yei.

Mucha gracias por seguir está historia.
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