Seducción -Omegaverse XueXiao-

2- una pequeña cita. Con una grata sorpresa.

La imagen NO me pertenece crédito a su autor/ra

ADVERTENCIA: Este capítulo contiene escenas de sexo chicoxchico, si no te gusta abstente de leer. Y por favor de hacer comentarios desagradables. Gracias de ante mano <3

EDITADO.

El atardecer era de colores magníficos, naranja, rojo y una hermosa tonalidad de rosa. A veces Xiao XingChen sentía una opresión en el pecho al ver esos colores, Era como si algo dentro de sí mismo tuviera miedo al imaginarse, que pasaría si desaparecieran dejándolo en una oscuridad y nada más (*).

Miro a algún punto sin importancia. Solo esperaba a Xue Yang en un parque, ya que sus tardes consistían en momentos pacíficos. Como estar el uno con el otro comentando algo sin importancia, ir a ver alguna película, estar en su propio departamento perdiendo el tiempo como una pareja recién casada, o pocas veces yendo al parque, y jugar con algunos niños y sus madres que ya lo conocían y les agradaba, por lo tanto a veces y solo a veces Xue Yang se les unía, él no era tan fan de los niños, y a veces también solo alimentaban las palomas en el parque como un par de pareja de ancianos.

«Sí, muy ridículo y tonto». Pero eso era lo que amaban; pasar tiempo con el otro.

— ¿Qué hace un lindo omega por aquí solo? —Xiao XingChen sonrió un poco, cuando esa voz llego a sus oídos y la encantadora fragancia a dulces llegó a su nariz.

Era Xue Yang.

Él estaba detrás de él, y aunque ya no podía verlo desde su posición, sentía su presencia y era afirmada con la firmeza y la suavidad de un beso en su cuello. El aliento se le quedó atascado en su pecho, y se dio cuenta de que estaba esperando el roce de las yemas de sus dedos en su cuello igual.

¡Qué desvergonzado!

—No. Xue Yang aquí no —Xiao XingChen tomo aliento mientras volteaba sobre sus talones con una hermosa sonrisa en los labios—. Se me da muy bien resistirme a la tentación. Tú también deberías intentarlo.

— ¿De veras lo eres? —Se arrimó; sus labios estaba tan cerca de su oreja que Xiao XingChen sintió su aliento—. A mí no. Por lo que a mí respecta, sucumbir a la tentación es uno de los pocos placeres genuinos de la vida.

«Por los Dioses». Un ardiente espiral de deseo lo atravesó, haciendo que su piel se calentara y que sus rodillas se le aflojaran.

Si Xue Yang se percató de la reacción de Xiao XingChen, no dijo nada.

Pero comenzó a caminar despacio al alrededor de Xiao XingChen, (extrañamente solo permitiendo que viera su parte frontal), como si contemplara una escultura en un museo. Xiao XingChen también empezó a hacer lo mismo, siguiendo los movimientos de Xue Yang.

— ¿Mi XingChen se esforzó en arreglarse para nuestra cita de hoy?—Dijo. El tono imperioso de su voz era innegable—. Quédate quieto.

Xiao XingChen, tomo unos segundos para captar lo dicho, antes de quedarse quieto, vacilo un poco y luego volvió la cabeza para mirar hacia la fuente en medio del parque, con una sonrisa en los labios, las personas se movía con suavidad cuando pasaban por allí. Luciendo sonrisas, riendo y sin más preocupación que la calidad del tiempo familiar y el sonidos de las alegres charlas.

Solo a veces el mismo se preguntaba si podría formar una familia con Xue Yang algún día.

Xiao XingChen seguía quieto mirando a la nada, a veces Xue Yang era el hombre que tenía el control; y él era el hombre que se rendía a su hechizo. Así, como así de simple.