capítulo 31

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—¡No puedo creerlo! —exclama Tonks por milésima vez. —¡Estás bromeando!

Yo niego, dándole una última mordida a la empanada de piña que robé de la cocina.

—Todo es verdad, por más loco que parezca. —murmuro con pesadez.

Ayer, después de una larga noche en la que nadie pudo dormir, mamá llegó con la maravillosa noticia de que papá está bien, fue un completo milagro que sobreviviera a tal suceso pero se encuentra estable y, cuando lo fuimos a visitar en San Mungo, nos dimos cuenta de que aún conserva su divertido sentido del humor y esa curiosidad por saber todo de los muggles. Pues en cuanto nos vio entrar le preguntó a Harry si sabía algo acerca del funcionamiento de la bicicleta.

Ahora me encuentro con Tonks en la habitación que utilicé durante las vacaciones del verano, mi amiga lleva el cabello corto y rosado luciendo asombrosa. En cuanto me vio me preguntó sobre mi relación con Neville, algo natural si tenemos en cuenta que la última carta que le mandé decía que estábamos juntos. Así que después de una larga explicación de todo lo sucedido, estamos aquí.

—Pero eso es ilegal. —suelta con un tono de indignación y molestia. —Dumbledore tuvo que haber hecho algo.

Ruedo los ojos, dejándome caer en la cama.

—Dumbledore es un imbécil. —murmuro sin poder evitarlo, claro que estoy molesta porque nuestro director no hizo absolutamente nada ante esta situación. Me incorporo de la cama, mirando hacia todos lados. —¿Crees que Dumbledore me escuche? Siempre he tenido la teoría de que tiene espías a lo largo de todo el mundo mágico, y escucha cualquier cosa que decimos.

Tonks deja escapar una enorme carcajada, su cabello se torna amarillo por un momento.

—Yo también lo he llegado a pensar, para serte sincera. —confiesa entre risas, después se pone de pie. —Aunque si es cierto, quizá deberíamos aprovecharnos de eso. ¡Dumbledore deja de ser un imbécil y atiende la situación con tus estudiantes!

Me carcajeo al ver que cambia su aspecto para lucir exactamente como el profesor Dumbledore, lo cual es aún más divertido pues sigue vistiendo los pantalones de cargo de Tonks.

courageous| neville longbottomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora