capítulo 34

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El lunes por la mañana Dean, Seamus, Neville y yo entramos al Gran Comedor para desayunar justo en el preciso momento en que llegan las lechuzas con el correo. Neville no parece muy entusiasmado por leer el periódico, pero todos los demás si estamos ansioso por saber más noticias sobre los mortífagos fugitivos, quienes todavía no han sido detenidos, pese a que muchas personas aseguran haberlos visto.

Le entrego un knut a la lechuza que me da el periódico y lo despliego apresuradamente. Junto a mí, Hermione hace lo mismo.

—¿A quién buscas? —escucho que pregunta Harry cuando una lechuza aterriza con un golpe seco delante de él. Harry nunca recibe cartas.

De pronto, tres, cuatro y hasta cinco lechuzas más llegan volando y se posan al lado de la primera disputándose un sitio.

—¿Qué está pasando, Harry? —le pregunto asombrada, me inclino a mirar y siete lechuzas más aterrizan entre las anteriores, chillando, ululando y agitando las alas.

Seamus, Dean y Neville se inclinan hacia nosotros para observar.

—¡Harry! —exclama Hermione, que a continuación hunde las manos en la masa de plumas y levanta una lechuza que lleva un paquete largo y cilíndrico. —Creo que sé lo que esto significa. ¡Abre ésta primero!

Mi amigo le retira el envoltorio de papel color marrón y se encuentra un ejemplar fuertemente enrollado del número de marzo de El Quisquilloso. Al desenrollarlo nos encontramos con su cara, que sonríe tímidamente en la portada. Sobre la imagen de Harry hay unas letras rojas que rezan:

"HARRY POTTER HABLA POR FIN: TODA LA VERDAD SOBRE EL QUE-NO-DEBE-SER-NOMBRADO Y LA NOCHE QUE LO VI REGRESAR"

—¿Te gusta? —le pregunta Luna, ella y Ophelia se han acercado a la mesa de Gryffindor y se apretuja en el bando entre Fred y Ron. Ophelia prefiere colocarse lo más alejada posible de mi hermano mayor. —Salió ayer. Le pedí a mi padre que te enviara un ejemplar gratuito. Supongo que todo esto, son cartas de los lectores.

courageous| neville longbottomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora