Cuando se separaron ambos caminaron hasta el sofá y se recostaron ahí, Lee le robó un beso y Gaara sólo sonrió y lo volvió a besar, más profundo, más pleno, más delicioso, Gaara se levantó y comenzó a desnudarse frente a Lee, disfrutando de su mirada, de su sonrojo, de su sonrisa que se desvanecia cambiando completamente por una mirada llena de deseo y unos labios entre abiertos.
Lee miraba con detalle la piel pálida del pelirrojo, tan delicado y sensible, sabía que un sólo apretón suyo lo marcaría, quería marcarlo, esa seria la prueba de que era suyo, completamente suyo. Al fin.
Lee se levantó y se desnudó también, más rápido y activo que Gaara, ambos sin quitar la mirada en el otro.
-¿Que quieres hacer primero? -Dijo Lee.
-¿Es normal que quiera cogerte la boca?
-No Gaara, no es para nada normal.
Ambos sonrieron y Lee se hincó en el suelo y tomó el miembro de Gaara en sus manos para comenzar con las caricias, luego de que estuviera erecto lo entró en su boca y comenzó a lamer con lentitud, Gaara comenzó a temblar y desesperar por la suavidad de la boca de Lee, con más desespero lo tomó del pelo y comenzó a embestir su boca.
Algunas lágrimas se corrieron de los ojos de Lee, aunque eso no fue lo único en correrse.
-¡Ah! Mmmm.
Gaara se vino llenando la boca de Lee y ensuciando su cara con sus fluidos.
-Mmmm creo que... ahora es mi turno ¿no? -Dijo Lee.
Lee se levantó y se limpió con su ropa.
-Dame un segundo.
Gaara intentó calmar su respiración. Lee cargó a Gaara y lo recostó a la orilla del sofá para comenzar a morderlo y besarle el cuerpo, cada parte de su pálida piel que su boca pueda alcanzar.
-No hay lubricante, ¿Quieres que vaya a buscar? -Dijo Lee.
-Si, está en el último cajón de mi mesita de noche.
-Vale, volveré pronto.
-Aquí te espero.
Lee se vistió sólo con el pantalón y salió, regresó a la casa y vió a todos tirados durmiendo, caminó lo más silencioso posible y fue a la habitación de Gaara, tomó lo que necesitaba y volvió a salir.
-¿Lee? ¿a donde vas? -Dijo Neji.
-Yo... yo... saldré.
-¿A estas horas de la noche? Ven a dormir que mañana tenemos cosas que hacer antes de regresar a la aldea.
-No es que...
-No discutas y busca una manta ¿Que traes ahí?
Lee apretó con fuerza el lubricante y negó con la cabeza.
-No es nada.
Neji activó el byakugan y sonrió al ver lo que era.
-Ahh ya entendí, bueno ve, Gaara te está esperando.
Lee arqueó una ceja pero salió de inmediato.
Neji se volvió a acomodar pero luego levantó la mirada.
-¿En donde está Kiba?
Por otro lado Lee regresó con Gaara quien lo esperaba acostado boca abajo cubriendo sólo su trasero con una vieja manta.
-¡Volví!
-¿Todo bien? ¿despertaste a alguien?
-De hecho Neji me descubrió pero no creo que le importe.
-Bueno, pues ven aquí.
-Te ves tan sexy mi Lord Kasekage.
-¿Y sólo miraras?
Lee sonrió y se volvió a desnudar para montar a su muy amado y ahora novio Gaara.
[●●●]
A la mañana siguiente ambos se despertaron y se vistieron, regresaron a la casa y se encontraron con sus amigos desayunado.
-Entonces tenías razón, deberás. -le dijo Naruto a Neji.
-Te dije que si estaban juntos.
Lee y Gaara se miraron y sonrieron.
-Si que eres malo guardando secretos. -Dijo Lee.
-No me dijiste que era un secreto.
En ese momento salieron de la habitación Kiba y Kankuro.
-¿Con que al fin apareces? -Dijo Shikamaru.
-¿Que hacían? -preguntó Gaara.
-Lo mismo que tu y Lee. -respondió Neji.
-¿Deberás? -preguntó Naruto.
-Si, es mi desgracia por tener el byakugan, a veces me entero de cosas...
-Bueno... nosotros... -Dijo Kankuro con dificultad.
-¿Que no tenías una chica? -Dijo Gaara.
-No eres el único en encontrar el amor en un chico de Konoha.
-Eso dirá Temari cuando se entere.
-Yo le digo, me voy a encontrar con ella, nos vemos en unas horas. -Dijo Shikamaru.
-¡Usen protección! -gritó Naruto.
-Hey cuidado con lo que dices, es mi hermana.
Todos rieron un poco y continuaron desayunando y conversando de forma agradable.
♡♡♡
Que buena soy haciendo avatares.
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Quédate Cerca ~GaaLee~
FanfictionLee ama a Gaara, Gaara lo quiere como un amigo, pero si algo sabía hacer Lee era cumplir a la perfección sus retos auto-impuestos, y conquistar a Gaara era uno de ellos.