Bordados para Monoma, bnha. TERMINADA

30: Globos.

Ese día fuiste a dejar el bordado personalmente, no era como si nunca hubieras ido pero ahora no dirías que fue regalo de una amiga.

Eran globos, porque no habías podido comprar globos ya que estuviste hasta tarde con dolor de estómago y apenas lograste terminar el bordado.

Fumikage estaba escoltándote porque estabas tan nerviosa que creías que morirías en algún momento. Te guio hasta el salón y te dejó en la entrada, él siguió su camino para ir a dejar la pluma del día.

Naoko vio como estabas entre ir y no ir, irritada porque llevabas casi 10 minutos hablando sola fue a buscarte para que hablaras con Monoma. No sabías qué estaba haciendo, se veía como un Jojo posando pero eso era un detalle.

—Monoma-kun —saludaste a duras penas, él dejó de posar y te miró.

Recibió el bordado y sacó de su pupitre un ramo de flores variadas que tenía para ti.

Habías olvidado la nota, pero él ahora tenía una notita para ti.

...

Para ser de la clase A no eres tan irritante como tus compañeros.

No me gustan mucho los unicornios y creo que tengo olor a limón.

Ya sabía que eras tú, no sabes esconderte muy bien que digamos.

Lo supe desde el primer día y no es una mentira para que te quede claro, ya sabes, soy muy impresionante.

Como es el día 30 tenía que hacer algo, espero que te gusten las flores, sino es culpa de Naoko.

Pero si te gustan fue idea mía.

...

Estabas completamente avergonzada, creíste que habías sido lo suficientemente buena para esconderte e incluso llegaste a pensar que algune de tus amigues te delató. No podías creerlo y querías correr a esconderte.

Monoma te llevó a otro lugar para hablar y Naoko estaba molesta por eso, quería el chisme completo, santo cielo.

No dijo nada en realidad, solo quería privacidad para darte el beso que la pelota en tu cara evitó que te diera.

Estabas feliz, tuviste la fortuna que algunas personas no tuvieron, conquistar a su crush en 30 días.

Aunque eso fue una pérdida de tiempo. Monoma hubiera dicho que sí a todo el primer día porque ya le gustabas.