Capitulo IV: Una confesión

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Ya habían pasado dos días desde el incidente con Annie, Terra no entendía porque Annie la detestaba tanto, al punto de llegar de sorpresa y atacarla, pensó que quizá era por la ocasión en la sus compañeros murieron, pero se le hacia raro, porque ella le estaba salvando la vida a Annie, pues si iba lo único que haría seria morir en vano, pero aún habiéndola salvado de tal destino ella no lo vio de la misma forma, aunque Terra simplemente no quiso seguir preguntándose del porque del tal inconveniente, ya que no podía solucionar ese problema si Annie no ponía también de su parte, aún con esa piedra en el zapato lo deja de lado para buscar algo más interesante que hacer, ya casi amanecía, supuso que Adrián podría venir a verla, se dirigió a donde lo vio por última ocasión y efectivamente este la estaba esperando, así fue a donde él estaba.

-¿Por que gastas tu tiempo en venir aquí? - preguntó Terra.

-Oh, hola Terra ¿Cómo estas? - preguntó alegremente Adrián.

-Yo bien, pero responde a mi pregunta - respondió Terra.

-Ok pero ¿Por que sería esto perder mi tiempo? En realidad me divierto más aquí contigo que con mis otros amigos - dijo Adrián respondiendo a la pregunta de Terra.

-¿De verdad? - preguntó Terra.

-Te lo puedo asegurar - respondió Adrián.

Hubo un breve silencio, hasta que.

-Voy a mostrarte algo, pero ¿realmente puedo confiar en ti? - preguntó  Terra

-No lo se ¿Estarías dispuesta a confiar en mí? - respondió Adrián con una pregunta.

Terra se sorprendió, no esperaba que le respondieran con otra pregunta.

-(suspiró) Esta bien, sígueme - respondió Terra. 

Caminaron varias horas por un extenso bosque.

-¿Cuanto falta? - Preguntó Adrián.

-Tranquilo, ya casi llegamos - dijo Terra.

Cuando llegaron Adrián quedó impactado al ver lo gigantesca que era la estructura, aunque fue consumida por la naturaleza aún se podía ingresar a ella.

-Ven pasa - dijo Terra.

-Eh ¿Estas segura? - preguntó Adrián.

-Si - respondió Terra.

Entraron y vieron las salas, los laboratorios y otras habitaciones que ya hacían abandonadas. Una parte en específico le llamo la atención a Adrián.

-Oye ¿Qué es esta celda? Parece ser de alguien que fue apartado de los demás, por que allá veo celdas, pero esta está separada de las demás - se preguntó Adrián.

-Es que esa celda..........era mía - dijo Terra con disgusto.

-¿Cómo que tuya? - preguntó Adrián.

-De aquí vengo yo, no soy más que un simple experimento, aquí una vez hubo diecinueve como yo, pero fueron asesinados, había alguien que quería matarnos, pues al aparecer la intención de que me hayan creado es por que ese "alguien" quería hacer algo con nosotros, no se que era, pero yo supongo que nos quería asesinar y tomar algo de nosotros, fue por una chica que me entere de esto, también la que me ayudó a escapar de este lugar, por eso aquí estoy - respondió Terra.

-Valla, que feo debió ser eso, aunque ¿Por que dices que habían diecinueve más como tú? -pregunto Adrián.

-Si, habían diecinueve como yo, aunque yo diría más bien dieciocho, la chica en cuestión, que se llama Annie por cierto, intentó advertir del peligro que corríamos en ese momento, pero ninguno de ellos le quiso creer, solo yo le creí, prueba de ello es que aquí sigo con vida, pero los demás perecieron ante esa persona que te comente - dijo Terra respondiendo al enigma de Adrián.  

La Vida de un ExperimentoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora