Cap 34

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Me desperté con un montón de besos por toda mi cara y al abrir los ojos pude ver la escena más bonita que he visto en mi vida
Leo me estaba sujetando la cara con sus manitas y me estaba besando toda la cara y por no hablar del rubio besándome la barriga

-buenos días- me dijo niall y me dio un beso en los labios

-buenos días guapos- cogí a leo en un abrazo y le comí a besos

-vístete que vamos a llevar a leo al parque- me informó niall cogiéndolo en brazos

Me levanté y me vestí con unos vaqueros y una camisa básica, cuando entre al cuarto de niall este estaba en calzoncillos cambiando a leo

-perdón- me reí y me di la vuelta

-no pasa nada- se ríe- pasa, no es nada que no hayas visto ya-

-imbecil- me reí y entre de nuevo

Ayudé a niall a cambiar a leo, le vestimos con unos vaqueros cortos grises , una camisa corta de coches azules y verdes y unos zapatitos grises

-estás guapísimo- le cogí en brazos y lo apretuje contra mí

Leo metió sus manos por dentro de mi camisa tocando uno de mis senos y pegando su boca a él

-mama- dijo chupando mi camisa y dejando babas en esta

-creo que quiere que le des el pecho- se ríe Niall

-no puedo hacer eso inútil- respondí

Niall cogió el biberón con leche de leo y probó un poco para que el viese que estaba bueno

-ummm esta buenísimo- habló para leo

Leo volvió a chupar mi camisa

-umm isimo- imitó a niall

-creo que no cuela- me reí

-venga leo deja a paloma- intentó cogerlo pero leo se agarró fuerte a mi y empezó a llorar

-no te pongas celoso- dije y me reí

-estupido bebe que consigue todo- habló haciéndose el enfadado

Llegamos al parque y estuvimos un buen rato jugando con leo en los columpios, ya casi era hora de comer así que decidimos volver a casa andando
Leo iba cogido de una mano de niall y la otra de la mía para que caminase un poco, cuando empezó a gritar

-!guagua! !guagua!- chilló

Leo vio a una pareja mayor con un perro y quería ir a tocarlo, como los señores se dieron cuenta se acercaron para que pudiese acariciarlo

-mira leo un guagua- le dije agachándome a su altura y tocando al perro

-!pero que lindo!- dijo la señora- ¿cuantos añitos tienes pequeño?- preguntó

-dile, tengo uno- le dijo niall a leo mientras se agachaba a la par suya

-uno- enseño su dedo índice

-!pero que listo!- exclamó el señor

Leo siguió tocando al perro mientras nosotros charlábamos con la pareja

-¿fue duro ser padres tan jóvenes?- preguntó la señora

-oh no- rió niall- nosotros no somos sus padres-

-somos hermanos- concluí

-¿pero vosotros no sois pareja?- preguntó el señor

-si, antes los vimos muy juntos- sonrío la señora

-mas me gustaría a mi- dijo niall

Los cuatro reímos y niall cogió a leo para volver a nuestra casa

-leo di adiós- le dije sacudiendo su mano en un saludo

-parece que no quiere irse- habló niall mirando a leo quien tenia los ojos aguados

-guagua- dijo triste mirando como se iba el perro

-el guagua se va a la casa y nosotros también, leo- le explicó niall pero a leo no le importó y se puso a llorar

Una vez que llegamos a casa leo dejó de llorar y niall se lo llevó al salón para entretenerlo mientras yo hacía la comida
Cuando la terminé fui a avisarles de que ya estaba lista

-di niall-  le hablaba a leo

-dial- dijo

-no, leo, presta atención- decía muy serio- ni.all-

-!no!- chilló enfadado

-¿como que no?- empezó a hacerle cosquillas mientras él reía- no es difícil-

-ya está la comida chicos- avise

-corre vamos a comer que sino paloma se enfada- le dijo a leo mientras este se reía

Dar de comer a leo era una de las tareas más difíciles ya que no paraba quiero, no me quiero imaginar cuando aprenda a andar, entre niall y yo le intentamos dar la comida y cuando terminó niall fue a bañarlo y yo caí rendida en el sofá

DOBLE CARA (NIALL HORAN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora