- Reacciones de los integrantes de BTS ante diferentes situaciones.
- No +18
⚠️ Mi intención no es dañar y/o perjudicar la imagen de los idols o el grupo, ni ofender a nadie. Todo es totalmente ficticio.
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Habías salido de casa para hacer algunas compras pequeñas a la tienda más cercana, por lo que, llevabas una bolsa de género colgada a tu brazo mientras buscabas un poco de ramen para almorzar. Estabas parada observando el estante tratando de encontrar el ramen de tu gusto, pero al parecer no había.
- No hay...
- ¿El que trae pollo?
- Si... - después de contestar recordaste que estabas comprando sola y le estabas respondiendo a un desconocido. Sin embargo, al mirar hacia tu derecha viste a un chico alto y de cabello gris reconociéndolo como el joven que tu perro empujó hace días - tú...
- ¿Cómo está Kai? - rió levemente y te sorprendiste al escuchar que te recordaba a tí y a tu perro.
- Bien ¿y tú?
- Todo bien. Vine hasta aquí en bici, pero veo que tu no vienes con Kai - llevó su mirada hasta la vitrina donde podías ver que afuera se encontraba su bicicleta esperándolo.
- Claro que no. Ya viste cómo es y traerlo aquí es ganar regaños por puro gusto - llevaste tu mano hasta tu nuca avergonzada.
- Mmm... qué pena. A mí no me molestaría que se lanzara sobre mí si eso significa que te vería - sentiste tu rostro enrojecerse un poco, pero trataste de desviar la mirada viendo los fideos y agarrando el que más te pareciera delicioso.
- Qué dices... - trataste de reír, pero él buscaba tu mirada intentando ponerte nerviosa a propósito.
- No lo sé - su seguridad se desvaneció de inmediato mostrándose nervioso al igual que tú y riendo algo arrepentido de sus palabras mientras te seguía hasta la caja para pagar las cosas y luego salir del lugar.
- Bueno... supongo que... - estabas por despedirte, pero él no te lo permitió.
- Mi nombre es Kim Namjoon - paraste de hablar en seco y te quedaste unos segundos procesando la información. Su nombre le quedaba tan bien y era muy lindo. El nombre... bueno, él también lo era.
- Soy T/n.
- Suena lindo. Bueno ahora que nos conocemos un poco más, ¿vives muy lejos de aquí?
- Este... no tanto - dudaste un poco por su pregunta, ya que era no era la primera vez que comenzaban a preguntarte por tu dirección tratando de sacarte información.
- ¡Oh! Lo decía por si quieres que te lleve hasta tu casa - al parecer había notado tu incomodidad, pero al verlo tan inofensivo decidiste no pensarlo tanto.