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La biblioteca era tan aburrida como enorme.

Después de que el timbre sonara, Renjun le dedicó una mirada expectante a Donghyuck y el coreano solo pudo sonreír con resignación y galantería, guardaron sus cosas rápidamente y no perdieron tiempo en dirigirse al dichoso lugar.

Renjun admitía ser una persona sensible respecto al arte, disfrutaba pasar su tiempo pintando un gran lienzo con lo que sea que su imaginación proyectase, normalmente guiado por sus pensamientos y sentimientos, que estar en cualquier otra parte.

Sin embargo, era un poco decepcionante no poder decir lo mismo de la lectura; sus gustos eran demasiado exigentes respecto a la misma, por lo que prefería deliberadamente no adentrarse a este mundillo, aunque su curiosidad picase por encontrar algo que coincidiera con él.

De cualquier forma, no estaba aquí para encontrar un libro que le gustase.

—Ciencias, historia, literatura...—divaga. —¿Vas a contarme sobre eso?

—Chismoso.

—Así me vas a tener que aceptar.

Haechan ríe.

—Bien, lo prometido es deuda—suspira el coreano mientras se adentra por un pasillo, Renjun leyó en un pequeño letrero de madera "textos escolares". —Uhm, bueno, no sé exactamente por dónde empezar.

Renjun dirige su mirada al suelo, un poco avergonzado.

—Esa persona, ¿es...?

—Un chico.

Renjun traga saliva.

Okay, no entendía de dónde venía esta creciente curiosidad, pero así es; el tema le despertaba una intriga que cosquillea en su estómago, que le hace jugar con sus dedos nerviosamente, sonrojarse y sentirse tímido. Honestamente, se sentía como un tonto.

Es decir, Renjun asumió que su nula vida amorosa le estaba pasando la cuenta y ahora su interés se vio despertada por la experiencia ajena, debía ser eso.

Inaceptable.

Jamás se había sentido particularmente atraído por un tema que – a opinión de Renjun – resultaba ser una total distracción y pérdida de tiempo, algo que no le iba a servir de nada a sus estudios, pero aquí estaba, sintiéndose como un niño curioso ante lo desconocido en plena pubertad.

Absurdo, totalmente absurdo.

Bufa, metido en su mundo y Haechan lo mira extrañado.

—Hey, si eres homofóbico o algo por el estilo...

—¡Oh, claro que no! solo estaba teniendo una discusión interna, no me hagas caso—Renjun mueve su mano de un lado a otro restándole importancia. —¿Qué es lo que decías? ¿Un chico? Eso es genial, ¿quieres contarme sobre él?

El coreano sonríe, notándose un poco aliviado.

Renjun tomó nota: "Deja tus debates mentales para cuando estés solo".

—Eso es bueno, y sobre el chico, pues...— Haechan pasa su mano distraídamente por el estante lleno de libros, divagando con su mirada, Renjun puede notar un sutil carmín pintando sus acarameladas mejillas. —Uhm, es de último año también, pero va en otro curso, aunque compartimos algunas clases, es mayor que yo.

—Ya veo, ¿es ese el detalle? ¿mayor?

—El detalle es que es canadiense.

—Oh...

Haechan ríe.

—En realidad, su nacionalidad no es lo que me tiene intentando gustarle, aunque debo decir que escucharlo hablar inglés es absolutamente maravilloso—el coreano detiene su mano y saca un grueso libro del estante, extendiéndoselo al chino, en su portada yacía en letras grandes la palabra "matemáticas". —En serio, debes conocerlo, te vas a enamorar.

Getting worse ↬ Norenmin [NCT]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora