𝐀𝐧𝐢𝐦𝐚𝐥𝐬「ʙɴʜᴀ」

𝙼𝚈 𝙻𝙸𝚃𝚃𝙻𝙴 𝙾𝙼𝙴𝙶𝙰 |𝙳𝙰𝙱𝙸 𝙰𝙻𝙿𝙷𝙰!|

Créditos a: animekath.

Mierda.

Mierda.

Mierda.

Mierda.

Dabi se quitó la ropa de su cuerpo caliente, su cuerpo estaba cubierto de sudor, pero se evaporaría instantáneamente debido a su peculiaridad.

-¡No puedo... Joder...! -apoyó su cuerpo contra la pared de su dormitorio, su mano engrapada palmeó la erección de sus bóxers, sintiendo el parche húmedo de su punta.

Dabi quería reproducirse; quería una compañera. Sí, tenía miedo de ser padre, pero hará todo lo posible para hacer feliz a su Omega y a sus hijos. El pensamiento hizo gemir al Alfa, prácticamente arrancándose los bóxers para dejar que su polla se liberara. La punta caliente golpeó contra su estómago, su respiración se agitó mientras miraba por encima de su polla; pulsante y tembloroso, queriendo cualquier tipo de atención.

Su mano comenzó a bombear su polla, pero sabía que no era suficiente. Quería una compañera; quería un coño apretado para tomar su inmensa polla y bombearla con su semen caliente.

-Omega... -siseó, apoyando la cabeza contra la pared mientras su mano continuaba.

Él la quería.

Él la necesita.

-T/n...

Ah, sí. La nueva pequeña Omega de su grupo, la sanadora. Te uniste a la Liga de villanos casi al mismo tiempo que él, y el chico zombie no podía apartar los ojos de tí. Olías perfecta. Dabi no quería nada más que enterrar su rostro en tu cuello e inhalar tu dulce néctar; el pensamiento le hizo gemir.

Dabi se mantuvo cerca de tí de manera protectora, pero también para frotar su olor en tí, para que las personas supieran que te reclamaba. Nunca parecías incómoda por sus acciones; o eras inconsciente o no te importaba. Pero el villano notó la forma en que te inclinabas hacia él, los penetrantes ojos azules de Dabi te observaron mientras te alejabas y dejabas que tu cabeza descansara en su hombro. No quería nada más que reclamarte frente a todos, bombearte con su semen y hacerte gritar su nombre.

-¡Mierda...! ¡Mi Omega...! -gruñó. Su cuerpo se calentó, su mano urgía a correrse. Te imaginó; debajo de él, llamándolo su Alfa.

Dios, la idea era embriagadora.

Lo que lo enfureció fue el otro Alfa, Tomura. El jefe era más astuto, buscaba formas de acercarse a tí, de tocarte. Dabi gruñía ante el pensamiento. No pudiste alejarte correctamente; él era el líder y el Alfa superior. Dabi olía a ese bastardo en tí solo hizo que su cuerpo se sintiera en llamas, queriendo marcar tu bonito cuello como si fuera su propio lienzo.

-¡La... necesito...! -un gruñido animal escapó de su garganta, sin notar la baba corriendo por su barbilla- ¡Necesito a mi Omega...!

Su aroma lujurioso llenó los pasillos, tu cuerpo se despertó de su pacífico sueño.

-¿Hm...? -tus fosas nasales se llenaron de madera quemada y tiza, el olor es agradable para tí. Pero también recogió almizcle caliente, el olor presente hace que la parte inferior de tu estómago arda.

No podías oírlo, pero lo sentías. Su aroma te estaba atrayendo hacia él, tratando de tenerte en sus manos, y estaba funcionando. Sus caderas se balancearon contra la cama, un ronroneo se le escapó por la fricción.

-N-No... -tu ciclo de celo estaba destinado a ser en unos pocos días, pero el olor de Dabi estaba haciendo que tu mente se sintiera confusa.

Te levantaste de la cama, tus piernas ya se sentían débiles, pero te arrastraste fuera de tu habitación. Tu celo se estaba filtrando fuera de tí, sin pensar que el Alfa puede olerte.