𝐀𝐧𝐢𝐦𝐚𝐥𝐬「ʙɴʜᴀ」

𝙷𝙸𝚂 𝙻𝙸𝙶𝙷𝚃 |𝙱𝙰𝙺𝚄𝙶𝙾 𝙺𝙰𝚃𝚂𝚄𝙺𝙸 𝙸𝙸|

Créditos a: plainbrunettelbl.

Situación: Un nuevo miembro está a punto de unirse a la mafia familia y causó drama.

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• Katsuki estaba jodidamente enojado, con enojo revolvió el curry picante que estaba haciendo. Antes no le importaba lo que su chef hiciera o le pusiera en el cuerpo, pero ahora que te habías convertido en su pareja y te mudaste con él, se aseguró de preparar comidas saludables y sustanciosas.

• Estaba un poco paranoico, así que eso significó que despidiera a su chef en caso de que no se pudiera confiar en él. A nadie más que a él se le permitió preparar la comida de sus amada compañera.

• Sus hombres lo miraron como si hubiera perdido la cabeza cuando entraron a la mansión por primera vez y vieron a su jefe con un delantal trabajando como esclavo en la estufa. Todo lo que hizo falta fue una bala en la primera persona para comentarlo y todo el mundo se apresuró a no volver a reconocerlo nunca.

• Pero eso no era lo que le molestaba, él estaba enojado porque sintió que su Omega se alejaba de él. Pasaste más tiempo en tu nido y solo saldrías por comida y agua. Incluso cuando preparó una buena comida para que ambos la disfruten lo llevabas a tu maldito nido.

• Estaba jodidamente furioso.

• Ni siquiera te sentabas más con él en la oficina de su casa. Tu olor se estaba desvaneciendo lentamente de allí. Le encantaba trabajar en el papeleo y los correos electrónicos mientras te tenías descansando tranquilamente en el pequeño nido que hiciste en el sofá.

• Él no sabía qué había hecho para causar esto pero estaba a punto de llegar al fondo de esto. Su Alfa no dejaba de caminar y gruñir, estaba tan inquieto como él. Quería que su pareja volviera a estar en su presencia y lo quería ahora.

• Sus hombres ya estaban nerviosos. Sabían que su jefe era especialmente letal en este momento, un movimiento en falso y acabaría con una bala en la cabeza, tendían a mantener la distancia tanto como podían.

• -¡T/n! La cena está lista -gritó, metiendo la mano en el armario para sacar algunos platos.

• Oyó tus pies pisar el suelo de mármol. Entraste en la cocina vistiendo una sudadera. Pensó que te veías adorable. Tu cabello estaba un poco desordenado por rodar en tu nido.

• Sólo mirarte hizo que su Alfa se sentara en posición firme.

• -Huele bien Suki -tarareas, todavía un poco somnolienta por la siesta que acababas de tomar.

• Sólo a tí se te permitió llamarlo así. Cualquiera más terminaría en el sótano debajo de la casa, no le gustaba llevarse su negocio a casa, pero cuando lo hizo, sucedió allí. Estabas restringida de poner un pie allí.

• No querías escuchar gritos y lamentos de dolor, así que estabas feliz de seguir su regla.

• -Lo hice un poco más picante de lo habitual ya que parecía que te gustó la especia la última vez -dijo, echando arroz y curry en tu plato.

• -¡Oh, mmm! No puedo esperar para probarlo -rebotaste feliz, mirando el curry rojo que fluía sobre el plato.

• Con intención, no te entregó tu plato sino que lo llevó a la mesa del comedor y lo sentó allí. Ignoró tu rostro preocupado y regresó a la cocina para tomar un plato. Cuando regresó, vió que te movías nerviosamente en tu silla.

• Se sentó y esperó a que empezaras a comer. Levantaste una cuchara a tu plato y comiste la cucharada humeante, tu rostro se iluminó tan pronto como golpeó tu lengua. No pudo evitar admirar el lindo y feliz movimiento que hiciste en tu asiento.