𝐊𝐈𝐍𝐆 ; 🜲

04

Neo Tokyo, 2098, un mes antes.

Toji había ido a revisar si su compañero Choso seguía vivo, pues aquella caída sin duda lo habria matado y a cualquiera para ser francos.

Bajo hasta el nivel más bajo de aquella ciudad, donde se encontraban las alcantarillas y la peor escoria de aquella ciudad decadente de morales. Encontrandose con dos cuerpos a la orilla de aquel "rio" artificial, acercándose a paso rápido para observar lo que había alrededor, así llegando a donde aquellos azabache estaban. Se agachó lo suficiente como para tomar el pulso de ambos, seguían vivos.

⠀⠀⠀⠀⠀⠀─ Pensé que estarían muertos, levántate Choso, deja de descansar y lleva contigo al bastardo con cara de zorro.

Choso se levantó aún cansado, ese golpe con el agua había dolido tanto como si hubiera sido con concreto mismo, pero aún así acato las órdenes de su compañero y superior. Cargando con aquel chico hasta la motocicleta de Toji y subirse los 3, el otro aún estaba cansado por lo que seguía dormido, después de todo... aquel niño lo había salvado, le debía una y bastante grande.

Neo Tokyo, 2098, día presente.

La cabeza de Toji seguía ideando el plan perfecto, pero por más que pensaba no podía ver la solución de este maldito problema y ahora que tenía a Megumi de vuelta, era más difícil, pues su hijo estaba con el en las noches o días, depende de su turnó, si, tenían más dinero por lo que podía comprarle bastantes cosas a Megumi, pero el resto del día Shoko se quedaba con el y... muchas veces se lo llevaba al trabajó y mezclar a niños y una morgue, no era lo más adecuado.

Pero mientras más demorará en tener un maldito plan, más daño le harían a los niños y a Satoru, ya lo había visto sufrir, el como Naoya jugaba con su piel y lo obligaba a desnudarse frente a los de la Nero Elite, mientras le hacía toda clases de daños, incluso el sacarle un ojo, joder, Naoya estaba bastante mal del cerebro y lo peor es que el metió en esto al albino. Lo único que le consolaba es que su piel y sus órganos se regenerarían para estar como antes, pues no deseaba qué Satoru se quedará sin esos preciosos ojos qué tanto le... gustaban.

⠀⠀⠀⠀⠀⠀─ Joder...

Susurro, pero justo ahí estaba su pequeño retoño, Pronto subiéndose al sofá y abrazandole del costado, creyendo qué estaba enfadado, Megumi era todo lo que estaba bien en su pequeño mundo.

⠀⠀⠀⠀⠀⠀─ No te enojes papá...

Toji solo acarició los cabellos de su cabecita y negó con la testa.

⠀⠀⠀⠀⠀⠀─ No estoy enojado Megumi, solo no se como puedo resolver un problema...

No sabia ni porque le estaba diciendo esto, ¿ya estaba tan desesperado? Si, sin duda lo estaba, por aunque sea un maldito rayo de luz.

⠀⠀⠀⠀⠀⠀─ ¡Te ayudo! La tía Shoko dice, que si dices tu problema en voz alta veras tu error y así podrás corregirlo.

El niño lo decía como si ya lo hubiese comprobado, Toji estaba en u callejón sin salida, así que... ¿qué más daba el probarlo?

Así lo hizo y como si su hijo y Shoko le dijeran a los gritos "TE LO DIJIMOS", ahí estaba su error en su plan, era tan jodidamente sencillo joder. Le dio un beso en la cabecita a su hijo y lo tomó en brazos, para irse a dormir, sería un día atareado.

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Naoya estaba en su oficina, cuando uno de los militares de Nero entró a su oficina.