CAPITULO 22

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Samuel queda angustiado al ver que su padre se estaba besando con secretaria, le miro con ojos llenos de rencor y odio, no pudo imaginar que él sería capaz de hacerle algo así. Se fue rápidamente para no tener que oír las explicaciones de su padre, todo el camino a casa no pudo sacar esa escena de la cabeza.

Ese hombre, su padre... el hombre que siempre se mostro como un padre perfecto, un hombre que siempre quiso a su mama, hasta cuando era niño ese hombre era su ejemplo de seguir, pero al parecer todo fue una gran mentira.

Al entrar en casa hasta se olvido de lo que le pedía a Carla, no tenía ganas de hacer nada.

-¿No quieres ni cenar? – pregunto

-Fue un largo día del trabajo...

-Estoy segura que se cómo hacerte sentir mejor – dijo al sentar sobre sus rodillas

Samuel sonríe, pero aun sigue un poco molesto por todo lo que paso.

-¿O ya te has olvidado de tu deseo?

-Te deseo con toda mi alma, Carla... pero creo que no es el mejor momento.

Ella se levanta.

-Pues, tú te lo pierdes, pero... yo estaré en habitación arriba – dijo y le guiña el ojo

Samuel la mira caminar hacia escaleras, subiendo hacia la habitación, era una tentación a la que no se podía resistir. Últimamente preferiría intentar cosas nuevas con ella, hacerle el amor en vez de conversar sobre cosas que le molestan.

Esta vez tampoco se resiste, después de tomar un vaso de agua, sube a la habitación. Al entrar lo que ves una oscuridad, hasta que siente una mano de Carla sobre el brazo, matándolo del susto.

-¡Joder!

-No sabía que eres de esos que mueren del susto...

-Igual cambie la opinión y decidí averiguar si ya estas dormida.

Carla le empuja en la cama y empieza quitarse la ropa hasta quedar en ropa interior, empieza bailar para el sensualmente. Samuel no ve nada más que ella, es lo único que necesita en ese momento, era lo que le hace sentir euforia.

Samuel la mira como si fuera una diosa, era la única cosa que le saca otros pensamientos de la cabeza, sonreía y quedaba muy cachondo y mas enamorado, cuando Carla termino con el baile se acerco a él, sentando a horcajadas.

-¿Es esto lo que te hace sentir bien? – susurra

-Me hace sentir increíble – responde

Carla empieza besar sus labios, mordiéndole, había mucha pasión entre los dos, cuando Carla empieza besar su cuello él se deja llevar por todo lo que siente y todas las caricias...

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