CAPITULO 13

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Después de haber decidido estar juntos como una verdadera pareja, Samuel se sentía muy nervioso porque no sabía cómo comportarse con Carla. La mañana siguiente despertó un poco tarde y cuando entro en la cocina se encontró con una de las mejores vistas... Carla preparando café en su pijama corta.

-Buenos días – dijo

Ni siquiera tuvo tiempo para tomar alguna ropa, sino entro en el bóxer y así confundió la mente de Carla una vez más.

-Estoy preparando café – dijo nerviosa

Samuel sonríe, acercándose y dándole un beso en mejilla al encontrarse por detrás de ella.

-Te ves hermosa – susurra

Su mano baja sobre mano de Carla, acariciándola al no quitarle la mirada de encima. Con otra mano toca su pelo, moviéndole la parte del pelo que se encuentra sobre el cuello y le besa el cuello.

Carla da vuelta más nerviosa que nunca, cuando Samuel está a punto de besarla le hace la primera pregunta que se le pasa por cabeza.

-¿Quieres café? – pregunta

-¿Qué?

-Estoy preparando café... supongo que deberías irte a la empresa.

-Debería ir en pocos minutos, lamentablemente.

-No te preocupes por mí, Lu pasara por casa y así no me aburriré.

Samuel se sentía aun más nervioso, en cuanto volvió mirarla en los ojos no sabía que decirle.

-Tengo muchas ganas de volver a casa y eso que ni siquiera me había ido.

Carla rodea manos sobre su cuello, le besa en mejilla y así le confunde aun más.

-Me vuelves loco – murmura en su oído

Así se fue en la empresa sabiendo que volvería a verla en cuanto termina el trabajo, mientras tanto Carla pasó toda la tarde con Lu, diciéndole todas las cosas que ocurrieron acerca de su relación con Samuel.

-Ahora estamos juntos.

-¡Por fin!

-Te juro que no sabía ni cómo comportarme esta mañana, sé que me dijo todas esas cosas, que me quiere y que no quiere hacerme daño, pero esta mañana parecía como cualquier otra, no sabía cómo iniciar conversación ni que hacer.

-¿Y él?

-Se confundió...

-Lo que tienes que hacer es ser Carla, mostrarle que eres una mujer excepcional y que tiene mucha suerte de tenerte en su vida.

-Ya...

-¿Y ya lo han hecho?

-¿El qué?

-Joder, es como si fueras virgen, estoy hablando sobre su relación intima.

-Aun no.

-Vaya, que sorpresa...

-No teníamos mucho tiempo para pensar en esas cosas, no estamos tan desesperados.

-Estoy muy feliz por ti, Carla... sabia que ibas enamorarlo en poco tiempo.

-Descubrí que su ex le engaño y al parecer el hijo que esperaba no fue de Samuel – dijo preocupada

-¿De verdad?

-No tienes ni idea como se puso por eso, es desilusionado y perdido.

-Por eso tu estas aquí, para hacerle volver a creer en el amor.

-Le dije que tengo miedo de que me haga daño, pero ahora soy yo la que tiene miedo de hacerle daño sin querer.

-No piensas en eso, mejor piensa sobre tu primera vez con Samuel, ni que fueran vírgenes...

Carla reía por todas las cosas que le comentaba Lu, ninguno de los dos pensaba mucho en esas cosas pero por la noche cuando Samuel volvió del trabajo Carla se volvió más sensual y más hermosa que esa mañana. Incluso llevaba una ropa provocativa, una falda corta y una camiseta que atraía mirada de Samuel al entrar en el salón.

-Llegue un poco tarde, lo siento.

-Ven, guapo.

Samuel sonríe y sienta en el sofá a su lado, Carla se levanta un poco y le besa en mejilla.

-¿Qué hacías todo el día?

-Lu estaba aquí, eso ya lo sabes...

-Me aburrí con todo el trabajo, no dejaba de pensar en ti.

-¿Pensaste en mi?

-Mucho.

Carla sonríe, Samuel no se puede controlar, esta vez se acerca un poco más y le besa en labios al poner la mano detrás de su nuca.

De repente sin saber ni cómo ni en qué momento, Carla sube sobre piernas de Samuel, empieza besarlo, nació gran deseo de hacer el amor con él.

-¿Esto significa que tu también me extrañaste a mi?

-Cada minuto sin ti es tortura, Samuel – responde sinceramente

-Me pone mucho que tengas tantas ganas de mí, te lo juro – susurra

Carla sonríe, le quita la camiseta.

-Calma, guapo... que tenemos todo el tiempo del mundo.

Samuel besa su cuello, le hace gemir, estaba tan ansiosa de hacerlo con el que no tenia cabeza para nada más que solamente los besos de Samuel.

Carla quita camisa y Samuel queda fascinado y hipnotizado con la vista, entendió que Carla es mujer perfecta, no es solamente bella por dentro y por fuera sino también demasiado atractiva, le gusta la vista que de pronto sintió algo creciendo en sus pantalones.

-Joder, Carla...

Samuel pasa una mano sobre su pierna y vuelve besarla locamente, ambos gemían y cuando Carla empezó desabrochar sus pantalones el móvil de Samuel empieza sonar.

-Joder con el puto móvil...

-Contesta – ella suspira al sentir manos cálidas de Samuel

-No me puedo detener ahora...

Pero, sin embargo el móvil no dejaba de soñar y al ver que es su padre sabe que se trata del negocio.

-Es sobre el trabajo, de seguro.

-Responde, Samuel.

Samuel decidió responder y así llevo una conversación de veinte minutos con su padre mientras Carla decidió arreglar algunas cosas en la cocina, sabían que la noche fue un poco arruinada pero al menos ahora se tenían tantas ganas que la siguiente vez no podrán detenerse.

En busca de ti Donde viven las historias. Descúbrelo ahora