La vuelta del dios del engaño

117 16 0
                                    

Estabas sentada en un cómodo sofá leyendo, completamente tranquila y serena, había pasado tiempo desde los acontecimientos de Dormammu, y Stephen siempre estuvo allí para apoyarte, se habían vuelto pareja.
Tú lo ayudabas con sus conjuros y demás para que el trabajo no fuera tan duro, ambos vivían juntos en el santuario de Nueva York y por fin parecía que habías logrado superar todo tu pasado, sólo te concentrabas en el futuro y en tu día a día con el hechicero supremo.

- capa, espera ¿qué haces? -se enrolló en tu cuerpo y te empezó a arrastrar fuera de la biblioteca.

Te llevó por un pasillo a rastras y al llegar a una de las muchas salas del santuario hizo que chocaras contra Stephen, haciendo que ambos caigan al piso.

- se que no puedes separarte de mí, pero sólo fui a meditar un rato -mencionó Strange riéndose levemente.

- tú enviaste a la capa -depositaste un rápido en sus labios antes de levantarte.

- atrapado -dijo sacudiendo su traje- tengo que interferir en la visita de una posible amenaza, pero después podemos ir a cenar

- después de hacer los hechizos adecuados -reíste recordando un desastre que ocurrió cuando salieron sin aplicar conjuros de protección.

- sí, no volveremos a salir sin hacer los hechizos

- me parece una magnífica idea, Doctor Strange -le sonreíste- yo iré a terminar de leer mi libro, estaba interesante

- de acuerdo -estuviste apunto de irte, pero él tiró de tu brazo, haciendo que vayas contra él y te bese con afán.

Tras haberte separado te dirigiste a la biblioteca para continuar leyendo tu libro.
Después de un par de minutos sentiste como las cosas empezaban a romperse, fuiste hacia el tercer piso y viste un paraguas romper varios jarrones antiguos, como también cristales.
Saliste corriendo hacia el primer piso para avisarle a Stephen, escuchaste "estuve cayendo por 30 minutos" y te pareció conocida esa voz.

- Stephen, lo que parecía un paraguas está destruyendo tod... -quedaste petrificada al ver a Thor parado junto a tu novio y al voltear estaba Loki, palideciste al verlo y te apuraste a bajar las escaleras.

- ¡lady, ___! -dijo el rubio emocionado de verte.

- ¿Ustedes se conocen? -preguntó Strange confundido.

- sí, así es -abrazaste a Thor y luego Loki se levantó acercándose a ti.

- sorpresa, Midgardiana -enojo brotó de ti y lo golpeaste volteando su cara hacia un lado.

- en verdad eres tú, ¿Cómo pudiste hacerlo? Creí que moriste -reclamaste enfadada

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

- en verdad eres tú, ¿Cómo pudiste hacerlo? Creí que moriste -reclamaste enfadada.

- también es un gusto verte, ___ -te sonrió y luego miró a Stephen- veo que no perdiste el tiempo, conociste a un mago de segunda -lo rebajó con la mirada.

Paradojas (Sherlock)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora