Sakura entró de puntillas al edificio de la hokage, mientras iba en camino alcanzó a divisar que las luces en la oficina aún seguían encendidas, eso quería decir que Tsunade y los anbu estaban teniendo su rutinaria reunión nocturna. Esperó en el pasillo que dirigía a la oficina pacientemente.
Sasuke tenía razón, el pastel de arroz le desagradaba hasta el punto de no poder comer más a allá de una rebanada, pero había alguien a quien si le gustaría probar aunque sea un trozo.
La puerta de la oficina se abrió de golpe, y de ella salió Tsunade acompañada de Shizune, ambas mujeres charlaron un poco para después guardar silencio y continuar caminando de tal forma por todo lo que restó de camino. Sakura dejó se ocultarse en las sombras hasta que escuchó dos portazos, cada uno viniendo de distintas direcciones, dando a entender que por fin se habían ido a sus respectivas habitaciones.
—Ya se te está haciendo costumbre -una voz la hizo saltar sobre su lugar, Itachi apareció detrás de ella con la máscara anbu puesta— Y también es costumbre tuya asustarte con mi presencia -una pequeña risa se le escapó al pelinegro antes de retirarse el accesorio de la cara para observar mejor a la chica.
—Siempre apareces de forma distinta... A veces me preguntó si algún día podrías llegar de frente como las personas normales -respondió sarcásticamente la pelirrosa a la vez que le tendía la pequeña caja al chico— Kushina-san ha preparado pastel de arroz, te he guardado un trozo.
—¿A quién dejaste sin comer está vez, Sakura-sama? -la diversión en la voz de Itachi la hizo sonreír, se conocían desde hace años, pero recién comenzaba a conocer a este Itachi que bromeaba y se reía de vez en cuando.
—Sakura-chan -se atrevió a corregirlo después de tanto tiempo, era algo que había querido hacer desde que se convirtió en discípula de la hokage, pero que no lo había hecho porque según la quinta, aquella era la forma en la que debía ser llamada por los anbu— Dime Sakura-chan.
Los ojos del pelinegro viajaron por el rostro de Sakura, a penumbras y siendo apenas alumbrados por la luz de la luna infiltrada por algún punto, los rasgos de la pelirrosa se le antojaron delicados y hermosos. Sus ojos verdes brillaron cuando una pequeña sonrisa se asomó en el rostro de Itachi.
—Sakura-chan... Por favor dime Itachi-kun.
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Quédate
FanfictionUchiha Itachi guarda un secreto desde hace algún tiempo... Está enamorado de Haruno Sakura la compañera de equipo de su hermano menor.