El maldito sin magia

Juntos...de nuevo

2 semanas pasaron desde que la pelirroja descubriera todas las actividades nocturnas de nuestro protagonista.

Una mañana llena de regaños que fue acompañada con un lapso de días en los que la cara de Asta estuvo roja e hinchada por un cachetada de su amiga pelirroja.

Esa cara hinchada solo era uno de los más malestares físicos que atormentarían al ojiverde...diversas visitas al médico de la ciudad

-Costillas Rotas
-Hematomas por todo el cuerpo
-Un brazo que simplemente el doctor no pudo analizar
-Órganos lastimados

Entre un largo etcétera...

A ella no le agradaban las mentiras, ni que él cenizo pusiera su propia vida en riesgo...ella no estuvo de acuerdo en dejar que él siguiera con todo esto pero no podía negar que la ciudad estaba mejorando de a poco.

Solo hubo una condición...que no volviera a suscitarse una situación como la famosa masacre...Asta se lo contó todo...como había perdido el control.

Le prohibió a toda costa el volver a asesinar a alguien, aún si fuera la peor basura del mundo...Asta no era ni nunca debió convertirse en un asesino y no permitiría que algo como eso volviera a pasar.

Asta se lo prometió y eso fue suficiente para ella.

Por otro lado...en el lugar de los hechos que relacionaban a un pelinegro y a nuestro protagonista.

Algunas horas después de que la pelea acabará en un..."empate" él grupo de reconocimiento encontró al miembro de amanecer dorado con un estado que se asimilaba al de su "hermano".

Un montón de excusas lo dejaron libre de cualquier problema...todo se archivó como un encuentro que terminó en una pelea en defensa propia.

Lo que más le costó a ese pelinegro fue explicarle lo que había pasado a cierta chica bajita y de ojos rojizos.

Estaba decepcionada de cómo terminaron las cosas, de que "alguien más" tenía el grimorio de su mejor amigo, lo que solo hizo que llegará a la conclusión de que realmente había muerto.

Pero en vez de tomar un actitud de negatividad u hostil hacia Yuno, ella decidió preguntar y hablar si él ya se encontraba bien.

Terminada su conversación y con la partida del mago de viento, volvió a adentrarse a la base de su orden, entró a la bañera caliente a reflexionar y dejar salir todos sus sentimientos de tristeza y negatividad.

Salió del enorme baño para guardarse el secreto de todo lo que él miembro de Amanecer dorado le había dicho.

Por obvias razones nuestro protagonista no pudo salir a patrullar por esas 2 semanas.

Se quedó en casa siguiendo lo que debería ser una vida normal.

En el presente Asta estaba jugando con los niños de la iglesia por un acontecimiento importante, el cumpleaños de Marie había llegado y al cenizo no se le ocurrió mejor idea que ir a felicitarla, invitarle una comida completa y jugar mucho tiempo para festejar.

Pero no sólo él compartía esta emoción un hermano demasiado "amoroso" también tenía grandes planes para este día.

Compró todos los regalos que pudo y se puso inmediatamente en marcha para ver a su pequeño ángel...pero no encontró lo que esperaba.

Desde lejos veía como un tipo jugaba con Marie y los otros niños, se quedó de piedra por un momento.

¿Quién demonios se atrevía a jugar con su ángel?...impaciente apresuró el paso  pero las sorpresas no paraban.