One shots

10. Hugo Aurbes ♤

•dedicado a: fatemeida
•es el tercer pedido, jamás me había sentido tan, no sé ni cómo explicarlo ah. Bueno, espero les guste

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>advertencia: patos asaltantes.
>categoría: comedia

•“los patos”

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Me encontraba recorriendo las calles de Madrid en mis días de vacaciones.
Había venido aquí porqué decían que es lindo, y no se equivocaban.
Es un buen lugar para pasar las vacaciones.

Me gustaba el paisaje y las lindas construcciones de las casas, todo es demasiado lindo, igual qué las personas.
De pronto me entró hambre así que decidí entrar a un restaurante con un balcón que daba muy bonitas vistas y se veía bastante acogedor.

Entré al lugar y me gustó la decoración, me senté en una de las mesas que estaban afuera en el balcón para ver mejor la vista, dejé mi bolso en una silla y me acerqué al barandal.
De ahí la vista era aún más increíble.

Me quedé contemplando la vista unos minutos cuándo siento una presencia a mi lado. Gire mi rostro y ahí se encontraba un chico de tez blanca y cabello castaño, muy guapo.

—hola, ¿es la primera vez que vienés a Madrid? —me pregunto.

—¿tanto se nota?—cuestione con un tono de voz divertido.

—la verdad sí, veías la vista cómo si fuese la primera vez que la admiras.

—lo és.

—¿y qué te parece?

—divina. Hay lugares bastante lindos aquí.

—lo sé ¿cuál es tú nombre?

—¿y el tuyo?

—pregunté antes—caturreo el— bien te lo diré para ser gentil. Soy Hugo, Hugo Aurbes.

—un placer Hugo Aurbes.

—¿me dirás tú nombre?

Hice cómo qué pensaba en sí decirle o no.

—oh, vamos. No te voy a secuestrar a menos que tú lo desees.

Reí.

—Bien, mi nombre es ____ Flores. Vengo de México.

—un placer conocerla, señorita flores.

Dijo con una sonrisa mientras tomaba mi mano y depositaba un beso ahí.

—¿vienés sola?

—sí, vine aquí de vacaciones, sola y pues aquí sigo, sola.

—¡Wow! Es mucha soledad—reímos ambos— ¿te gustaría acompañarme a comer? Yo igual vine aquí solo.

—Sí no es molestia.

—claro que no, hoy es mi día libre del trabajo y salí a pasear, sí gustas después de comer puedo enseñarte varios lugares turísticos de éste grandioso lugar.

—me parece bien.

Tomé mi bolso qué había dejado en la mesa y me fuí a sentar en la mesa donde Hugo, qué era más cerca del barandal del restaurante.
Comenzamos a platicar de temas triviales y nuestra vida.

Es un chico bastante gracioso y ocupado, por lo visto es actor.

—entonces así fue cómo mientras comía pasta se salió por mi nariz—me contó una graciosa anécdota.

—NO... PUEDE... SER— apenas dije para estallar en risas.

La gente del lugar se nos había estado quedado viendo raro debido a tanta risa qué soltabamos mientras comíamos.

Pagamos nuestra comida y nos fuimos a seguir dando paseos. Me llevó a los lugares más frecuentados por turistas y ahí me sacaba muchas fotos, debo decir que es un gran fotógrafo.

A veces se acercaba gente que lo conocía y yo les sacaba fotos a ellos y así fue el día. Demasiado divertido.
Ya en la tarde pregunté que sí podíamos ir a algún parque para alimentar patos o algo así.

Y accedió, fuimos a una tienda para comprar semillas para aves y de ahí a un parque bastante lindo. Nos sentamos en la orilla y los patos venían hacia nosotros.

Hugo se paro e hizo un caminito de semilla y ahí iban dos patos siguiendolas mientras comían.
A mi me parecía bastante tierna la escena así que grabe un video.
Luego de eso yo también decidí hacer lo mismo qué el, sólo qué 3 patos me veían con cara de asaltantes.

Claro que les daría, pero era para todos, no sólo para ellos. Así que les dije:

—no sean magantos, hay para todos.

Y cómo qué se enojaron y me comenzaron a corretear.

—HUGO, HUGO AYÚDAME. LOS PATOS ME QUIEREN ASALTAR O PEOR, ASESINAR.

—No es para tanto ___ —se comenzó a reír y a grabarme. Corrí en su dirección y ahora los patos nos perseguían a ambos.

—VES, TE DIJE QUE ERA PARA MUCHO. CORRE HUGO, CORRE.
PADRE NUESTRO QUE ESTÁS...

—¿ESTÁS ORANDO? ¿ENSERIO?—gitó/preguntó sin poder creerlo.

—NO PUEDE SER, UNOS PATOS VAN A ASESINARME—la gente qué nos veía se estaba riendo de nosotros. Sin tomar de forma sería que unos pato asaltantes nos perseguían.

—Bien, ___, lo tengo, los patos nos dejarán de perseguir sí aventamos las semillas—dijo Hugo con voz cansada de tanto correr.

—¿QUÉ? NO, ESOS PATOS TIENEN QUE APRENDER A COMPARTIR.

—___, ¡SON PATOS!  SÓLO QUIEREN COMIDA. A LA CUENTA DE TRES LES AVENTAMOS LAS SEMILLAS...

—pero yo no...

—UNO... DOS... TREEEESS.

Ambos soltamos las bolsas con semilla y corrimos un poco más, volteamos y los patos comenzaron a comer.

—te... Dije... Qué... Nos... Dejarían en paz—menciono Hugo entrecortadamente por tanto correr.

—ya no haré ejercicio después de todo lo que corrimos. Dios, jamás vuelvo a alimentar patos.

—¿Quieres ir a cenar?

—POR FAVOR. Llevamos horas de conocerme y ya me conoces.

Le di un suave golpe en el hombro.

—es qué leí tú mente.

—sí claro, y yo soy el Power Ranger amarillo.

—Mientes, ese soy yo.

Gire los ojos y reí para emprender camino a algún lugar donde vendieran comida. Éste había sido el mejor día de éstos 2 qué llevaba en España. Y esperaba tener más así junto a mi nuevo amigo Hugo.

Hey, espero que les haya gustado y de pérdida se hayan reído un poco, sí no fue así terminé siendo una mentirosa por la categoría.
Espero voten y comenten, se les quiere mucho, gracias por las 300 vistas <33
Perdón por no actualizar tan seguido.
Pedidos aquí
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O al dm