Peligrosa Atracción ✓ [Terminada]

Cap. 15

Los misterios no son problemas insolubles, sino realidades no objetivables, pero que al estar inmersos en ellas nos iluminan.

Cap. 15 

Maddie

 Las palabras de la psicóloga retumban en mi mente, si salgo perderé contacto con todo lo que conozco, desde mis 13 años estoy en este lugar curando una herida, salir de aquí seria como ponerle limón. 

 - Maddie, te llama la psicóloga- indico una chica, ella estaba aquí por presenciar el asesinato de sus padres a mano de unos vándalos, siendo ella la única sobreviviente, en terapia nos piden contar nuestras historias para superarlas. 

 mis nervios aumentaron, ¿acaso comenzó a hacer más calor? 

 Caminé con pasos lentos hacia la oficina, al entrar pude ver a una señora, cabello castaño corto, de baja estatura, pero más alta que yo, tenía marcadas arrugas en su frente y grandes ojeras, vestía un vestido hasta debajo de las rodillas.

 - Maddie, ella es la directora de centro de rehabilitación- estaba desconcertada. 

 - Mucho gusto Maddie, he oído maravillas de ti- comento al ver como la miraba sin pisca de disimulo.

 - Oh, mucho gusto, señora- sonreí. 

 - Maddie, ¿recuerdas lo que hablamos hace 2 días? - oh, no. 

 - Si, señora-

 - Pues, he hablado con la psicóloga y en unas semanas haremos un examen psicológico, podrás irte de aquí – ¿Qué? Estaba sorprendida, no sabía que decir, no esperaba que le comentara a la directora mi mejoría tan rápido, no, no estaba lista. 

 - Y-yo tengo que tomar aire- Salí de la oficina dejando a la directora y psicóloga con las palabras en la boca, mis piernas tomaron vida y caminaron sin rumbo fijo, al alzar la vista me di cuenta de que había parado frente al mismo árbol en donde había hablados con Adrián.

 - ¿Maddie? - ahí estaba Adrián, sentado al pie del árbol mirando fijamente las flores.

 - Oh, Adrián- tampoco quería dejarlo a él... 

 - ¿y esa cara? Parecen que te hubieran dado la peor noticia de tu vida- rio.

 - ¿Qué sentirías si me voy? - su cara drásticamente cambio, su sonrisa juguetona fue cambiada por una expresión que no logre descifrar, parecía ido ¿acaso estaba drogado?

 - Pues... el día que te vayas haré una fiesta, ¿Por qué? – pregunto.

 - Me voy – fue lo único que pude articular, no esperaba esa respuesta, di vuelta y comencé a caminar lo más rápido que pude a mi lugar seguro, mi habitación. 

nota de la autora: ¡Hola! ¿Qué tal va la lectura? ¿se han sorprendido? si están un poco perdidos déjenme decirles que muchas cosas se sabrán en capítulos próximos, espérenlos con ansias. 

hasta luego, los leo.