Cuando el plan falla

Tu tristeza es mi criptonita

Betty estaba en su pieza llorando por todo lo que había hablado con su jefe, estaba furiosa, pero también sentía que a pesar del daño aún lo amaba, no sabia si darle una oportunidad y quedarse en Ecomoda o renunciar para así no verlo nunca más.

Estaba sumergida en sus pensamientos cuando sintió golpes en la puerta, fue a abrir pensando que era su madre, pero era Nicolás.

N: Betty? Qué se hizo? Esta divina.

B: jajajaj gracias Nicolás.

N: qué le pasa Betty, yo conozco esa carita de pena y no me diga que nada.

B: venga vamos a mi cuarto, ahí le cuento.

N: que es este misterio Betty?

B: no sé que hacer Nicolás, ayer descubrí que don Armando no confía en nosotros, piensa que usted y yo somos capaces de robarle su empresa.

N: qué? Él le dijo eso?

B: no... intentó seducirme para tenerme controlada, pero yo lo descubrí y ahora dice que de verdad me quiere, que no lo deje.

N: y usted qué siente por él?

B: no lo sé, me gusta, siento una gran atracción por él, pero no le creo nada de lo que dice y no sé si seré capaz de estar cerca de él sabiendo que jamas volveré a...

N: a qué Betty? Usted se acostó con su jefe?

B: noo, aunque ganas no me faltaban, solo nos besamos, ahí fue cuando descubrí su plan.

N: Betty y si lo pone a prueba? Si vea hasta dónde llega, vea hasta dónde es capaz de ir por usted y si quiere acostarse con él hágalo, pero sin sentimientos para que no sufra.

B. No Nicolás, él ahora para mí es hombre muerto, creo que seguiré en Ecomoda un tiempo mientras busco otro trabajo.

N. Mm, sí es lo mejor, bueno Betty la dejo tengo que ir a hacer unos tramites.

Los amigos se despidieron, Betty se fue a acostar y Nicolás se fue al centro de la ciudad.

Después de unas horas haciendo papeleos Nicolás decidió entrar a una boutique.

Vendedora: buenas tardes en qué lo puedo ayudar?

N: si señorita, vea tengo una novia muy linda y quisiera regalarle un traje de ejecutiva, algo formal y bonito. Necesito algo con lo que se sienta la mujer más hermosa del planeta.

V: entiendo y que talla es su novia?

N: es así como usted.

V: ok, le buscaré algunas opciones

N: gracias.

V: qué le parecen?

N: me gustan ambas, llevare las dos opciones.

V: de acuerdo señor, inmediatamente le envuelvo los trajes.

N: señorita podría guardar ahí este sobre con estos bombones, por favor.

V: si claro señor.

Nicolás tenía una buena situación económica, su madre había comenzado con una pequeña panadería, la cuál con los años se transformó en una panadería y pastelería gracias a la gran fortuna que le heredó su padre al morir. Como sus padres se separaron cuando él era pequeño, su padre intentaba calmar la pena de Nicolás con regalos, por lo que él replicaba esto con su amiga, desde pequeños nunca soportó ver a Betty triste, por lo que siempre le regalaba cosas, peluches, flores, golosinas, perfumes, etc.

Llegó a la casa de Betty y como siempre le dejó el regalo con Doña Julia y se fue.

DJ: Betica, hija Nicolás le trajo un regalo tome.

Betty abrió la caja y encontró los bombones junto a un sobre que contenía una carta.

" Betty, mi amiga del alma, la tristeza en tu mirada es mi criptonita, si hay algo que no soporto en la vida es ver tus ojitos vidriosos. Yo tengo claro que mis regalos no curan, ni nunca han curado las grietas de tu corazón, pero es la manera que aprendí a demostrar cariño, espero que te guste lo que te compré, es probable que no quieras usarlo pero llegó el momento de que todos vean lo hermosa que eres, lo único que te pido es que ya no te hagas más ese maldito capul.

Te quiere tu hermano del alma, Nicolás Mora."