CAPITULO 2

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Alejandra

Lunes 30 de Junio

Vuelvo a mirar mi celular revisando que sea la dirección correcta del estudio de arquitectura. Es el tercer estudio que visito solicitando empleo y ruego para que me permitan laborar.

Debiste aceptar el puesto de Dante.

Ruedo los ojos aceptando que tal vez no debí rechazarlo. Porque sí, Dante me ofreció trabajo en su constructora pero decline. Bastante tengo con que me deje dormir en su casa, bueno casa de él y mi hermana, como para aceptar un puesto de trabajo que no deseos.

Se que no debo de estar de exquisita con el trabajo pero, no puedo aceptar algo que voy a realizar mal porque no es para mí.

El puesto de supervisor de obra era "perfecto". No iba a realizar gran esfuerzo y me iban a pagar demasiado bien. Pero no. Alejandra como siempre quiere algo diferente a lo que la vida le ofrece.

Quiero un puesto como diseñadora de interiores o paisajista.

Amo diseñar, hacer que un espacio se sienta acorde lo que la persona desea, que sin necesidad de describir el espacio, las personas puedan ser capaces por si solas de encontrar lo que transmite. Por eso ando en el tercer estudio.

Muero de hambre y estoy al borde tirarme a las piletas de Milán por el sol que hay. Debería ser delito estar a 33°.

El nombre "ARQDE" aparece enorme en una de las lunas de la fachada. El estudio es español pero tiene una filial aquí. He visto el trabajo que realizan y, honestamente, son muy capos en lo que hacen.

Entro mentalizándome que este si es y que me va a ir super bien.


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Ya no se a que Dios, deidad o ser superior pedirle para que me ayude a encontrar un trabajo.

¿Qué me dijo el estudio?

Que en estos momentos no estaban contratando debido al bajo número de proyectos pero, que debía dejar mi portafolio ya que es muy bueno y que me llamarían cuando tengan un mayor número de proyectos.

Siempre dicen lo mismo y jamás llaman.

¡Ag! Es la misma respuesta que he recibido de los tres estudios.

Necesito comida si es que no quiero mandar todo al diablo. No he almorzado y siendo las 7 de la noche mi estomago pide a gritos comida, en especial algo grasoso.

Entro al buscador del celular tratando de hallar un McDonal's cerca.

En Italia y buscando comida rápida

Que puedo hacer, antojos son antojos.

Camino unas cuadras hasta que encuentro uno, ordeno en una de las maquinas y espero pacientemente mi almuerzo-cena de hoy.

Busco una mesa cerca al ventanal para poder apreciar tranquila el atardecer. Escucho que llaman mi numero de orden y recojo todo. Una Big Mac con papas grandes y te de durazno.

Cuando me siento y empiezo a comer, me percato que al frente se encienden las luces de un local. Parece un pub con muy buena pinta pero solo he visto entrar a mujeres y que parecieran de mi edad.

Termino todo y, como no tengo que levantarme temprano para trabajar -nótese el sarcasmo- me acerco al local para averiguar que es a lo que exactamente se este local.

Su secreto se llama PerséfoneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora