Su secreto se llama Perséfone

CAPITULO 11

Alejandra

Lunes 14 de Julio

Desde el sábado no los he vuelto a ver.

No he visto ni a los mafiosos, ni a los chicos de las carreras. Tampoco he visto al impertinente, lo cual agradezco.

Aun no les he pedido ayuda a las chicas.

Estos días me estuve mentalizando a mi cambio de vida.

No puedo creer que cada que intento hacer algo bien algo bueno, se termina arruinando y por el mismo motivo.

No estarás tranquila hasta que él deje de existir.

No me interesa si termina vivo o muerto. Lo quiero fuera de mi vida.

Massimo te ayudara. Los de la mafias te ayudaran.

Si pero seguiré atada a alguien.

Tiro mi celular a la cama cuando vuelve a sonar.

*Llamada entrante de Numero Privado*

¡Me voy a volver loca!

Todo el fin de semana he recibido llamadas del mismo número.

En la madrugada lo puse en silencio porque ya no podía más.

Se que es él.

Contesta para averiguarlo.

No hay forma.

He pensado en buscar el numero en el aparato que me entrego Massimo pero no sé qué es peor: quedarme con la duda de quien podría ser o saber que es Hades y que sabe dónde estoy.

Deja de sonar y lo tomo. Busco el número de Laurel y presiono el teléfono de llamada.

- Bonjour?

- Laurel, soy Alejandra – parece que recién se ha despertado – ¿te he despertado?

- No preciosa – dice más animada – estaba viendo una película aburrida y me estaba quedando dormida. ¿A qué debo tu llamada?

- Para decirte que las chicas y tu tendrán lo que querían – hay una pausa y veo que no entiende – podrán entrenarme para ser una Elite

- ¡Te dijimos que lo lograríamos! – tengo que alejar el teléfono por su grito – desde hoy empezamos entrenando así que a las 3pm te veo en el club.

- Laurel – la interrumpo antes de que me corte – sé que son de la Elite pero, seré de la Elite y mafia.

- Lo supuse – dice soltando un suspiro – Angela y yo te vimos entrar con el Capo a la oficina de Lorenza. No lo creíamos al inicio pero pensamos que podía pasar algo así. ¿Tú también serás su protegida?

- ¿Ustedes lo son? – escucho que asiente – sí, también lo soy.

- Massimo es una buena persona a comparación de lo que puedas pensar – no se si lo dice para que me tranquilice o que – los otros mafioso también a excepción del Boss y su hijo. Ya sabes, si has escuchado algo macabro de la mafia roja créelo porque es muy probable que sea verdad.

- ¿El Boss tiene hijo? – eso si no me lo imaginaba.

- Su único hijo – hace una pausa y continua – ya lo conocerás. Es raro que vaya al club, creo que desde que empecé a trabajar hace dos, solo lo he visto 5 veces.

- ¿Porque no va? – pregunto extrañada – es mafioso, debería de ir y estar al tanto de los negocios que se hagan.

- La verdad no sé. Ni siquiera se ha liado con alguna de nosotras – responde como si también le extrañara la situación.