Dela Vega
Solo es un puto apellido pero todo cambia cuando miras a quien porta ese apellido.
Mi nombres es Jessica Dela Vega y antes de los 17 era una buena hija, responsable, amigable, pero ahora que todo se fue a la mierda soy lo que siempre quise...
-A partir de ahora nos vestiremos diferente, de gala.
-Así que ¿saldremos de compras? –Sus ojos realmente deseaban que respondiera que si-
-Claro que si –Le respondí sonriendo- Y te compare un lindo vestido y nos podremos pelucas.
-¿Tu también? –Pregunto sonriendo-
-Somos espías en cubierto no quieres que te enseñe a manejar un lamborghini sian roadster.
-¿Un lambo qué?
-Papa tenía una gran colección y cada carro nuevo se agregaba a su colección –Respondí y parecía indecisa- también se sobre carros Rom, tranquila.
Salimos del hospital, fuimos de compras y conseguimos los atuendos perfectos.
Romina tenía un lindo vestido negro que llegaba un poco más arriba de su rodilla, acompañado de unos tacones negros de plataforma pequeña.
A comparación de ella, mi vestido era largo de color rojo, terminando con una linda abertura que mostraba mi pierna derecha a diferencia mis tacones eran un poco más altos. Nuestros accesorios consistían de unos pendientes plateados y collar lleno de lindos diamantes.
-¿No te gusto ninguna peluca Jess? –Me pregunta Romina al ver que no me he probado ninguna-
-No me gustó ninguna, prefiero mi largo cabello suelto.
-Si tuviera un cabello como el tuyo tampoco lo escondería, pero me fascina esta peluca ¿Puedo consérvala?
-Claro, puedes elegir todas las que quieras Rom...
