No es tan Malo ♡ KookJin Fanfic

24.5

Una muchacha se mantenía con la mirada fija en una figura al otro lado de los portones. Estaba rodeada de otras tres muchachas, tuvo la suerte de ser admitida en esa universidad y, de paso, de haberle agradado a las que eran conocidas como las chicas más calientes y populares de la facultad.

Se sentía insegura por ser una tailandesa en Corea, sabiendo cómo de cerrados eran los coreanos con extranjeros, pero el que dos de esas tres muchachas tampoco fueran de allí le hizo sentirse cómoda y actuar como ella misma.

Y eso también ha llamado la atención de los demás estudiantes de la facultad de derecho en tan solo el par de días que presentó su rostro.

‒ Lalisa, ¿qué miras? Llevas todo el rato con la mirada lela.‒ Se quejó una de las muchachas, una bajita con una linda cara felina, era una hembra de raza puma, se llamaba Jennie, era una mestiza.

La chica, una omega de piel levemente bronceada, respingó un poco mientras soltaba una risa nerviosa y se volvía hacia sus nuevas amigas.

‒ Si.‒ Empezó, tres pares de ojos viéndola esperando una respuesta.‒ ¿Quién es él?‒ Señaló al chico que había llamado su atención desde la primera vez que lo vio, ya sabía que era un alfa y que era también bastante comentado por los demás omegas e incluso hembras y donceles, pero él parecía un tema de conversación aburrido para el grupo de chicas al que se juntó.

‒ ¿Quién...?‒ Las tres giraron su rostro hacia donde apuntaba la más alta.‒ Oh, Jeon.‒ Está vez habló Roseanne, otra mestiza, que como Lalisa, había llegado a Corea con inseguridades que se desvanecieron cuando conoció a las que en ese entonces eran solo dos, Jennie y JiSoo. Era otra hembra, pero ella era una alta y esbelta leopardo.

‒ Creí que no te gustaban los chicos.‒ JiSoo, que igual que Lalisa era una omega, habló, la morena no se ofendió, sabiendo que ella tenía una lengua inocente y decía las cosas sin saber o sin intención de ofender.

‒ Yo también lo creí.‒ Concordó Jennie.

‒ Oh... ¿A ustedes no?

‒ Nope.

‒ Nah.

‒ Ni un poco.

Las tres hablaron al unísono y la omega tailandesa no sabía qué decir.

‒ Puedes ir a hablarle, si quieres.‒ Habló JiSoo, sonriendo de manera adorable.‒ Eres alta y tienes curvas y él es ese típico alfa popular, de seguro eres de su tipo.

Las otras dos asintieron dándole la razón y dando codazos a la más alta, quién sonrió, esas chicas eran su alta autoestima.

La tailandesa asintió, ya tenía algo para decirle al guapo alfa desde hace ya rato, y se armó de valor para dirigirse a los portones dónde un grupo de alfas conversaban y bromeaban entre ellos, ya era la hora de salida, por lo que supuso que estaban allí para esperar a que sus papis ricos los vinieran a buscar.

Eso porque solo una minoría de estudiantes allí eran becados.

Estaba un poco cerca cuando Jeon JungKook se despidió del grupo de alfas y machos que lo rodeaban, ella sonrió mientras los veía alejarse y el alfa que le gustaba se quedó recostado en el paredón.

Era un alfa bastante guapo, alto, alrededor del metro ochenta, tenía un cuerpo de infarto, eso se apreciaba por las mil y un maneras en las que se vestía, particularmente grueso, su nariz era un poco grande pero quedaba perfecta en sus varoniles facciones.

Casi babea en su lugar, pero se concentró, alzó el mentón e irguió su torso cuando llegó a su lado. El alfa, al notarla se volvió a su dirección, tenía su teléfono en mano, pero lo bajó para prestarle atención.