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La noche había caído en todo su esplendor de estrellas y su brillante astro de precioso color blanco; el Omega se encontraba sentado en un puf de color morado oscuro, sus manos alrededor del telescopio. Mirando un poco más cerca las estrellas y algún planeta cercano.

Una sonrisa tranquila pinto sus labios, estaba curioso de ver una lluvia de cometas. En su vida jamás tuvo la oportunidad de ver una. . .

Los pasos acercándose por las escaleras lo hicieron despegarse del aparato para dirigir su mirada en dirección a las mismas, la melena azabache del mayor apareció, el alfa le sonrió y se acercó hasta el menor.

–Mientras esperamos aquel se acerque la hora, vamos a pescar–

Rubius tomo en sus manos la caña ofrecida por el mayor, ciertamente vegetta era sorprendente y raro, en el sentido de que tenía un estanque en el techo de su casa del árbol, Rubén asintió ante la idea y se acomodaron frente al estanque.

La conversación fue pacífica y amena, entre los chistes malos del mayor y las palabrotas del albino y reprimendas del alfa. No hubo nada más, estaban a gusto.

Para Rubén fue relajante sentir el aroma del mayor cerca, su oso estaba muy feliz y no había hecho rabietas desde que llegaron a la casa del alfa; no muy lejos de su sentir, vegetta no podía evitar mirar con creciente interés al Omega.

Que raro todo

        Que interesante él

Las horas pasaron y el momento llegó, poco a poco el oscuros firmamento, fue iluminandose de pequeñas y fugases luces que al rato se convirtieron en miles de cometas.

La mirada verde del menor se ilumino y una sonrisa llena de sorpresa y felicidad se mostró en su rostro. Para Rubén fue lo mejor que podía haber visto, se sintió feliz.

Y vegetta, él si estaba muy encantado con lo que veía. El brillo y la alegría, lo inocente y magnífico.

Deben saber de lo que hablo, es obvio

Esa noche samuel pudo ver la prefecto expresión de felicidad.

Esa noche Rubén se sintió lleno y pudo sentir una increíble calidez en su pecho.

Una noche de cometas perfecta

🐻✨🐻

La mañana siguente la sonrisa en los labios del menor no se la podía quitar nadie, las monjas se alegraron de ver al Omega tan feliz.

La misa fue rápida a comparación de los otros días, el confesionario casi no fue utilizado. Mejor para el albino, algunas veces las confesiones eran muy raras y otras muy vergonzosas. Pero era su trabajo y le gustaba.

Aún que la mañana estuvo tranquila, llegada la tarde fargan apareció en la iglesia con un pequeño envase.

–Rubius~ mira lo que traigo, son mis famosas tortillas–

Rubén lo miro con un ceja arqueada para luego reír, dejo acomodada la santa biblia y se acercó a su amigo. Tomo el envase y al destaparlo el increíble aroma de la comida le hizo que su estómago gruñera exigiendo alimento.

–¿No has comido en todo el día?–

El Omega búho lo miro con seriedad, Rubius rápidamente asintió antes de que le llegará una reprimenda.

–Hombre si desayuné, pero no fue bastante. Ayer en la noche cene demasiado y está mañana solo comí algo ligero–

Vegetta era muy bueno en la cocina, digamos que rubius no dudo en probar de todo. Estaba muy delicioso.

El híbrido de búho estrecho la mirada mirándolo buscando algún deja de mentira, pero al no conseguir nada termino asintiendo.

–A ver, dime a qué se debe tu presencia y tu comida–

Sentados en una pequeña sala aparte donde las monjas preparaban la comida a las personas de bajos recursos, mientras miraba a su amigo y comia, fargan se enderezó en su sitio y sonrió.

–Bueno, te venía a decir que willy y yo ya decidimos la fecha, también quería pedirte que siendo mi mejor amigo me ayudarás en los preparativos–

Rubén lo miro confundido, él no sabía nada de preparar bodas. O sea, las podía oficiar y eso, pero nada de preparativos y eventos. Eso nada.

–¿Por qué no le dices a luzu o a alexby? ¡No, mejor habla con Mónica! Ella sabe de estás cosas–

Fargan negó, el albino solto un suspiro.

–No, quiero que seas tú y yo. Creando algo perfecto. Ya que entre personas perfectas como nosotras nos entendemos–

El mayor sonrió y se levantó, ruben iba a reclamar pero fue callado por la mirada sería y decida de su mayor.

–Nada, no me dirás qué no. Ya decidí–

Levantó su brazo para mirar el reloj de pulsera.

–Tengo que irme rub, nos vemos después–

Así como el mayor apareció, se fue dejando a al albino con esa responsabilidad compartida.

–Me cago en la puta–

Murmuró sin darse cuenta que estaba aún en la casa del señor, en su mente pudo escuchar la reprimenda de Samuel como si lo hubiera escuchado.

🐻✨🐻

El sol se fue ocultando, dejando matices anaranjados y más atrás el azul de la noche junto a algunas estrellas. Luego de dejar todo en orden, decidió tomar rumbo a su casa.

Un escalofrío recorrió su cuerpo al pasar por el mismo callejón de aquella vez, una pequeña inseguridad brotó en la boca de su estómago. Se había asegurado de que nadie lo siguiera, sin embargo ahí estaba esa duda.

Vamos a casa Rubén, no te quedes aquí pensando.

–Si, tienes razón–

Su oso decía la verdad, entre más rápido llegará a casa, mejor.

🐻✨🐻

Hola, que tal?
Jdhakdbajs

Wey los amo
Los amo como no tienen idea (◍•ᴗ•◍)❤

(っ˘з(˘⌣˘ )

Estoy muy agradecida con todo el apoyo que recibe está historia/cry

Como ando happy happy, además de este capítulo, subiré otro más adentrada la noche

O la tarde, bueno no estoy al tanto con los horarios de sus países

XDDDDD

¡BUENO!
Nos vemos en unas horas :3

Voten y comenten

¡Oh! Y pregunta: ¿Que creen que pasará más adelante? OwO

Nos leemos~

✨Híbrido✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora